Supertotitoti: Me alegra que te haya gustado e intentaré mejorar todo lo que ustedes crean que sea necesario. Para eso sirven sus comentarios. Gracias por darme una oportunidad de lectura.

Creí que había sido claro cuando dije que se atrasaron unas semanas de memoria en el mundo. (La aparición del padre de Lala y el cumpleaños de Haruna).

Ronnie Byron Valenzuela Meza: Me alegra que te esté gustando y espero mejorar las cosas que te parezcan disconformes.


- ¡¿QUÉ DIABLOS PREGUNTAS TAN REPENTINAMENTE, RITO INFIEL?!

- ¡E-Espera, hermosa! ¡Es un malentendi... UGH!

Lala derribó el rostro de su novio de un masivo impacto contra la mesa, sin notar el como la había llamado. Si fuese humano, hubiera muerto. Run estaba celosa ante la declaración repentina del castaño. Sairenji, avergonzada a más no poder. Mio y Risa rieron ante toda la escena y continuaron comiendo.

- ¡Cállate, infiel!

- ¡Un amigo mío está enamorado de ella y me rogó que le preguntara! ¡No me pegues más, amorcito! ¡AAAAHG!

- ¡Ah~! ¡¿Era eso?! L-Lo siento, darling...

Escena. Ella y él mordiéndose los labios con suavidad. La camiseta de entrenamiento de la princesa comenzó a subir por acción de la cola de su novio.

- ¡Rito!

- ¿E-Eh?

Todos lo veían con preocupación. Parece que estuvo mucho tiempo pensando en eso.

- Lo lamento, hermosa. Estaba pensando en algunas cosas...

Al oír eso, Lala se sintió levemente abrumada. Ese apodo le hizo entender algunas cosas...

- ... ¿Y bien Sairenji? ¿Alguien está atravesando tu corazón últimamente?

Rito estaba relajado, sin notar que era el motivo del nerviosismo de ella.

- A... A mí...

Roja de la vergüenza, pero con una mirada de molestía, Sairenji se levantó de su asiento y huyó rápidamente.

- ¡Lo siento!

Con esa repentina situación, Rito no pudo terminar su día más que confundido.


- ... Ya veo. ¡Gracias, Sempai! ¡Ahora tengo mí confesión en la presidenta del comité de disciplina!

Rito y Lala miraban al joven completamente motivado, a pesar de todo lo que le contaron.

- ¿Eh?

El castaño tenía una sensación de horror. Algo iría mal en todo esto...


- ¿Fantasmas? ¿Por qué no me sorprende?

Rito continuó desayunando con Lala relatando la historia que se había esparcido por la escuela.

- Si. Dicen que está en la antigua escuela, pero no sé si es creíble...

La joven miró al joven meciéndose en la silla, mirando a su madre cocinar con su hermana. Ambas, tranquilas, meciéndose suavemente en filamentos dentro aquél pequeño espacio.

- Los extraterrestres existen; la prueba cabal lo son tú y el viejo, no estaría demás que existan los ambientes sobrenaturales. Hace tiempo atrás, un dragón rojo galés, que había comprado en la ciudad, brilló intensamente, rompiendo una estantería...

- ¡Oh~, lo recuerdo! ¡Lala se disculpaba porque creyó haberlo destruido con sus experimentos!

- Ya veo...

Rito golpeó la mesa con la palma de su mano, llena de intensidad y predisposición.

- ¡Vamos a comprobarlo! -

Ante toda esta palabrería, Lala finalizó su té.


- Así que... Esta es la escuela antigua. No siento absolutamente nada de poder...

Rito dijo esto, relajando a los demás ante algún temor por qué algún otro extraterrestre viniera por Lala.

Lala iba segundo, mientras que la aterrada Haruna iba junto a sus amigas.

Pisada. Rito, sorprendido por el ruido inesperado que tan cerca había aparecido, atacó una puerta de una patada inesperada, revelando a Yami con su tradicional mirada seria.

- ¡Yami~! ¿Tú eras el fantasma?

- A todo esto, ¿Qué haces aquí? Me asustó tu forma de llamar la atención.

- Libros, Yuuki Rito. Y no sé de qué habla, princesa.

Sin previo aviso, las amigas de Lala la abrazaron y comenzaron a mimarla, incómodandola.

Inesperadamente, Rito se puso serio y caminó, quedando de espaldas a ellas.

- Tu también lo sentiste, Yukki Rito.

Todas estaban intrigadas ante las palabras de la sonrojada Yami.

- Si... Hay alguien más aquí...

Todas se pusieron algo tensos. Los pasos comenzaron a oírse y a ir cada vez más cerca.

- ¡USTEDES! ¡ESTÁ PROHIBIDO EXPLÍCITAMENTE EL ACCESO A ESTE LUGAR!

- Ah... Falsa alarma. Es la vieja gruñona de Yui...

Aún sin verla, Rito la distinguió fácilmente.

- ¡¿A QUIÉN CREES QUE LE DICES ASÍ?!

- Váyanse.

Rito se incomodó y golpeó a sus espaldas, pensando que habría alguien, y saltó hacia atrás, evadiendo un derrumbe pequeño.

El derrumbe incrementó, obligando a Rito a saltar hacia este para rescatar a las chicas que caían.

- ¡LALA!

La detuvo en brazos al instante, evitando que todos sufrieran una violenta caída al aferrarse a él.

Risa, Mio y Yami, quienes evitaron el accidente, fueron a buscar la manera de ayudar, mientras que todas destrozaban a Rito con su peso.

Piano. El salón de música despedía un sonido muy irritante.

Tras reponerse, siendo los gritos de Haruna lo unico que lo estaban destrozando, Rito pateó la puerta sin mucha fuerza, permitiéndole acceder. Al entrar, no había nadie.

- Hay alguien más aquí... Lala. Formación de defensa.

Sonidos. Distintos sonidos comenzaron a oírse cerca de ellos. Al mirar al fondo del pasillo, 2 maniquíes comenzaron a avanzar rápidamente hacia ellos.

- ¡Pudranse!

Desarmó al cuerpo esquelético de un golpe, y atravesó el del muñeco con otro.

Enanos. Pequeñas bolitas con ojos cayeron de los muñecos y comenzaron a huir al notar la letalidad de Rito.

- ¿Eh? ¡Cobardes!

Sacudida. El edificio comenzó a moverse bruscamente, y el piso se abrió, mostrando a un monstruo con muchos tentáculos y un ojo.

- ¡SE LOS HABÍA ADVERTIDO!

La criatura alzó un tentáculo, mostrando a Yami completamente derribada.

- N-No puedo ayudarte contra esto, Yuuki Rito.

Estaba completamente asqueada. La criatura se sacudió rápidamente y capturó a las chicas, dejando a Rito.

- ¡LALA! ¡YAMI!

Risas. Detrás de Rito, muchos monstruos comenzaron a aparecer.

- Ja, ja, ja. ¡No pueden huir!

Risas. el castaño volteó hacia el ejercito con sus runas cargadas.

- Creo que no comprenden la situación. Yo no estoy encerrado con ustedes, ustedes estan encerrados conmigo.

Mostrando sus runas, el muchacho se lanzó contra estos. Derribandolos muy fácilmente a base de golpes.

- ¡Oye, tú!

La criatura no dudó en atacarlo al verlo lograr derribar a todos sus colegas. Saltó sobre la cruz de tentáculos que incrustó en el suelo y corrió hacia él.

- ¡A-Aléjate!

Intentó golpearlo con todo, pero fue imposible. Rito le dió un puñetazo en la cabeza, que no solo se hundió en el cráneo, sinó que también lo noqueó.

- Eso obtienes por tomar a mí...

Cuando los tentáculos dejaron de moverse bruscamente, Lala cayó en los brazos de Rito.

- ... Prometida.

Y sobre ambos, cayó Yami, que seguía desmayada.

- E-Estos son Aliens. L-Lala, ayuda. Creo que me rompí algo.

- ¿E-Eh? Ah, si. Nosotros somos fuimos reestructurados de nuestros planetas y terminamos en este. Viviendo aquí...

- Ya veo. Así que crearon la historia de los "fantasmas" para mantenerse en este lugar, a salvo.

Una bella enfermera apareció entre los pasillos, sorprendiendo a Rito y a Lala.

- ¡M-Mikado-sensei!

- ¡Oh! Rito. ¿Haciendo cosas eróticas en un enfrentamiento? Eres sorprendente.

- ¡YO NO HICE NADA!

- ¡Bueno, alienígenas varados! ¡Tengo una oferta de trabajo en un parque! ¡Vivirán en una casa embrujada!

Mientras las criaturas oían la oferta y se mostraban altamente felices, Rito intentaba despertar a Yami, quién aún no respondía.

- Hermosa, cometiste un error en confiarte.

- Lo sé...

La heredera Deviluke estaba decaída al no haber podido ayudar en el enfrentamiento.

- Descuida, ya pasó. Ayúdame a despertar a Yami

- ¿Necesitan ayuda?

- ¿Hmm? Por ahora no, fantasma...

Fractura. Rito sintió su cuello crujir en cuanto volteó, palideciendo, y corroboró que estaba frente a una bella mujer de aspecto espectral y un aura enorme.

- Ah. Perdón por mí tardía presentación. Me llamo Oshizu, soy una fallecida mujer de actualmente 400 años~.

Caída. Rito cayó al lado de Yami, inconsciente.


- ¡¿CI-CI-CITA?!

Lala se derrumbó en la mesa al oír que Yami invitó a Rito a una cita. O eso dicen todos, ya que en realidad lo secuestró.

- Si. En realidad oía a Rito quejarse y a estar a los jalones con ella...

- Dónde...

Lala amenazó a Mio con sus palillos. Su almuerzo se arruinó por completo.

- ¡E-El centro!

- ¿Traía un collar con forma de corazón?

- ¡S-Si!

- Perfecto. Peke.

- ¡De inmediato, Lala-sama!

Inmediatamente, el enano identificó la ubicación del castaño.

- Está a unos 1km de aquí.

- Andando. Si Rito la acepta, entonces tendremos que movilizarnos.

Se levantó de su banco, lanzando los palillos que quedaron incrustados en esta, y se abalanzó a una ventana, directo a la ciudad.