Resumen:

Draco Malfoy, un Hufflepuff, decir que nadie se lo esperaba era un chiste de mal gusto. ¡Una serie de capítulos cortos sobre su supervivencia en Hogwarts! Escrito para el evento de Sorting Hat de Eventos Oscuros. DM/HP RW/EM


Capítulo 1: Una clasificación no es una tortura. Parte 1 de 2.

Draco Malfoy se removió incomodo en el taburete hosco, cerró los ojos al sentir la presión del viejo sombrero sobre su cabeza maravillado de que un objeto tan feo y cualquier cosa sería lo que determinaría su futuro en Hogwarts. Toda historia contada por sus padres sobre Hogwarts no se comparaba para nada para lo que estaba sintiendo en ese momento.

Draco espero pacientemente a que el Sombrero Seleccionador diera su sentencia, además él ya estaba seguro en que casa estaría: Slytherin. El niño resistió el impulso de sacudir sus piernas mientras esperaba.

Goyle estaba aún en la fila de niños, de alguna forma sus padres habían convencido a la escuela de que fuera clasificado después de él. Draco sacudió con emoción su mano, por un momento.

Goyle sonrió radiante y devolvió el saludo.

El sombrero apenas estaba rozando los cabellos de Draco cuando empezó a exclamar. "¡Sly-!"

"Goyle es un buen amigo" comentó, mentalmente de forma alta. ¡Él no podía esperar para junto a él y Crabbe asusten a todos los plebeyos!

Draco notó el silencio a su alrededor y por parte del sombrero que no decía ni pío. Parpadeando se preguntó si ya lo habían clasificado y se lo había perdido.

"No Señor Malfoy, me disculpo por mi exabrupto, no se perdió de nada…me temo Señor Malfoy que usted es…humph, bueno eres raro" murmuro el Sombrero en su cabeza, bastante informalmente si le preguntaban. "Hay mucha inteligencia, oh si…pero vaya que eres igual de denso en lo más simple…oh, tu auto preservación es más baja que el coraje pero aun un cobarde... Tendencia a responder a tus mayores, vaya, eres obstinado, dispuesto a discutir tu opinión…

Un niño muy extraño de hecho…e igual de seguro que quieres ir a Slytherin al igual que tus antepasados mm…Un Malfoy después de todo."

"Bueno sí" murmuro Draco, como si el Sombrero fuera una clase de idiota. "Aunque yo no soy ellos, soy Draco."

El Sombrero empezó a reír, Draco lo hizo igual aunque no entendía sobre qué se reían.

"¿Puedo irme ahora? No quiero esperar más" gimió.

"Ten paciencia que aún debo pensar donde…" le advirtió el Sombrero. "Supongo que puedo mezclarlo todo, eres bastante complejo para hacerlo con precisión…veamos…menos mal que me fije antes de dejarme llevar…"

Draco parpadeo, un segundo consciente de como escuchaba ligeros murmullos en el gran salón. Una clasificación supuestamente fácil y rápida tomaba demasiado tiempo y no resulto como esperaban.

"Señor Sombrero…" pensó Draco vacilante. "¿No me pondrás en Slytherin?"

Si Draco pudiera ver directamente al Sombrero, tal vez diría que estaba haciendo muecas estúpidas.

"Bueno, tienes características pero no las suficientes…creo que te comerían vivo, joven Malfoy." Respondió.

Draco parpadeo más veces, sintiendo sus ojos escocer.

"Oh…padre me dijo que el dormitorio está en una mazmorra. ¡Una mazmorra! No entra el sol y eso es espantoso." Draco olfateó y el sombrero tuvo la ligera impresión de que el niño estaba burlándose para evitar llorar.

"Pareciera que Hogwarts está criando Slytherins para acostumbrarse en lugares oscuros y estrechos ¡Como delincuentes potenciales cuyo futuro es estar encerrados! Bueno, el color tampoco es muy bueno, es decir, soy precioso y el verde es bueno para mí pero el plata me hace más pálido, ¿no cree?" Draco arrastró las palabras en su mente mientras permanecía perfectamente quieto en el taburete. "Sin embargo, creo que en Ravenclaw me iría terrible también, ¡todos son tan nerds!" escupió la palabra como si le ofendiera. "Sus modales son espantosos, madre lloraría si sus costumbres se me pegaran. ¡Llevar un libro a la mesa! Merlín los perdone, porque yo no."

"Vaya que eres hablador" bufo divertido el sombrero. "pero ciertamente tienes razón. No es lo indicado…pero me pregunto cuál sería…"

"¡Que grosero! ¿Esta insinuando que no sirvo para ninguna casa?" susurro Draco, tratando de imitar el tono amenazador de su madre.

El sombrero se encontró desconcertado por la pregunta. "Bueno, claro que no—"

"Bueno ciertamente no" bufo bajo "soy mi propia persona."

La madre de Draco le enseñó a no despotricar, pero honestamente, Draco sintió ganas de hacerlo y bueno, ella no estaba aquí. Si lo fuera, diría que tan terrible era su plan para que el Sombrero lo pusiera en su casa deseada.

"¿Volvemos a la clasificación, señor Sombrero?" preguntó cuándo noto nuevamente los murmullos, solo que más fuertes y el movimiento impaciente de McGonagall.

"De acuerdo, no Ravenclaw y ya dije que no Slytherin…" murmuro pensativo, ignorando el jadeo casi sollozante de la cabeza bajo él. "Entonces ¿Qué? ¿Gryffindor?"

Draco ahogo un grito horrorizado. "¡Pésimo opción de color! El tono no es adecuado para mí, ¡me vería terrible!" Draco llevo una mano hacia su cabello rubio, como consolándose. "Debes estar bromeando, además no dijiste que era yo…un poco ¿cobarde?" escupió.

El sombrero exhalo profundamente, McGonagall hizo una mueca de simpatía pero estaba ya impaciente. "Sly-!"

"¿No dijiste que ahí me comerían vivo?" pensó rápidamente Draco, con miedo y sin poder evitarlo.

Él quería hacer feliz a sus padres, pero al menos quería estar vivo para verlos.

El sombrero irradiaba ya molestia. "Entonces, Ravenclaw."

Draco apretó los puños, aguatando las ganas de patalear. "No uses ese tono conmigo. Además creo que ya dije muy claro lo que pienso antes, ¿¡Acaso quieres hacer llorar a mi madre!?"

El sombrero volvió a tomar aire. "Cierto, la única inteligencia que me muestras ahora es sobre la etiqueta adecuada a la hora de té."

"¿Y eso que tiene de malo?" murmuro ofendido. "no puedes tratar de hacerme avergonzar por eso, no cuando eres así de feo."

"…"

"La verdad duele, acéptalo."

El sombrero pensó distraídamente si podía renunciar o al menos tomar unas vacaciones, lamentó lo que iba a hacer.

"Vi que quieres hacer amigos, iguales de leales que…bueno el Señor Crabbe y Goyle, Godric no quiera, y tu actitud te puede llevar a varios problemas…dije que eras raro señor Malfoy…y creo que necesitas mejores influencias…

Y me acabas de insultar."

Draco pensó que había cometido un error en su plan de acción. Tal vez debió dejar que lo pusiera tranquilamente en Slytherin, pero el sombrero le metió miedo ¡era culpa de esa cosa fea! ¡No de él!

"Que estas insinuan—"

El sombrero se asomó para mirar con pena una de las mesas. La llegada del Señor Malfoy podía marcarlos para siempre.

"Solo, Señor Malfoy…no los haga llorar."

"…¿Bueno?" contestó, el sombrero se apresuró.

"¡Hufflepuff!" el gran salón se quedó en silencio después de la exclamación cansada. Nadie aplaudía cuando Draco elegantemente se sacaba el sombrero y se lo tendía a una atónita McGonagall.

Una vez de pie, Draco se volvió para hacer una reverencia burlona al estúpido sombrero rencoroso. Cuando se dirigía hacia la mesa de Hufflepuff mordiendo la parte interior de su boca ahogando los chillidos indignos que quería hacer, empezaron los aplausos perezosos e incrédulos.

Ya sentado y con las ganas de llorar reprimidas, Draco observo como la clasificación se reanudaba del silencio aturdido que causo su clasificación.

"Um—"escucho una voz tímida a su lado. "Hola, soy Hannah Abbott."

Draco solo la miró fríamente, la niña se veía tan buena. La chica se removió incomoda y parecía como si fuera a llorar.

Oh Merlín.

¡El debería ser quien debería llorar!


Notas:

Oh Draco, ya estas fallando en el único pedido del pobre sombrero…