Descargo de responsabilidad: Spiderman ni Marvel me pertenecen, solo escribo esto por diversión, si algún personaje no pertenece a las películas, series y/o comics entonces es invención mía.


Pequeña contrincante

Para los dieciséis años Peter y MJ eran grandes amigos. La chica se sentaría con Ned y Peter en el almuerzo, leería un libro y fingiría no prestar atención a su charla nerd aunque de vez en cuando hacia algún comentario sarcástico, así serian los primeros días, eventualmente ambos niños la incluirían en sus planes y los tres tendrían una maratón de películas, tomarían un helado, harían grupo de estudio y (a pesar de que Michelle no era una gran fanática) armarían Legos.

Como Michelle era una chica sería y sarcástica que se dedicaba a observar y escuchar en lugar de hablar, siendo parecida a un libro guardado en un cofre con triple candado al cual nadie tenía acceso, nadie se esperaría que ella se enamorara de Peter Parker, el niño era un libro abierto, decía cada pensamiento que se le cruzara por la mente y en su plena adolescencia tenía algo que a muchos chicos de su edad les faltaba: conservaba su niñez. Peter era literalmente un niño, jugaba con Legos y guardaba una inocencia vista en pocos. Por lo cual el hecho de que a Michelle Jones le gustara era en extremo inusual, y más inusual era que fuese correspondida por el chico. Sus personalidades estaban destinadas a repelerse como dos polos magnéticos del mismo signo. Sin embargo, como bien dicen, los opuestos se atraen por lo que ambos congeniaron y se gustaban mutuamente.

Pese a ello las dificultades de dos personalidades tan diferentes estaban latentes, Peter aunque haya sido un libro abierto en la mayoría de los casos, aun era un niño tímido, y Michelle mantenía la mayor parte de sus emociones bajo llave, por lo que ninguno daba el primer paso, lo cual se dificultaba de mayor manera teniendo en cuenta el hecho de que solo se veían fuera de la escuela cuando se juntaban con Ned, el pobre chico sin darse cuenta a veces sobraba como tercero sin lugar entre Michelle y Peter.

Aun así todo se resolvió una noche de cine un sábado en la que May trabajaba hasta tarde y Ned envió un mensaje diciendo que a sus padres se les rompió el auto, por lo cual no podría ir. Iniciaron con "Todopoderoso" y le siguieron con una mataron de "The Big Bang theory", Peter hizo pochoclos y MJ compró dulces, en algún momento de la noche acabarían acercándose quedando ambos sentados lado a lado, con sus piernas pegadas y sus manos se rozarían con bastante frecuencia al intentar ambos sacar pochoclos del tarro. Claro que Peter no admitiría que en realidad dejaba su mano allí para que cuando MJ buscara pochoclos si o si sus manos se tocaran, y MJ tampoco admitiría que se dio cuenta que Peter no sacaba su mano del tarro, por lo que buscaba pochoclos con más frecuencia de la necesaria para su estomago solo para lograr el contacto.

No sería errado decir entonces, que aquella noche Peter Parker y Michelle Jones se acercaron aun más y algo cambio entre ellos.

Al día siguiente Ned faltó a la escuela por un horrible resfriado producto de horas en el frio de la calle esperando la grúa para el auto. Lo que fue una serie de desgracias para el chico resulto en una suerte para sus dos amigos. Durante los recreos, las clases que tenían en común y el almuerzo Peter y MJ congeniaron aun más, el niño logró entablar una verdadera conversación con su amiga y ambos pasaron un rato de lo más agradable, llegando a conocerse aun más.

Peter quedó de llevarle al día siguiente el libro "ladrona de libros" a Michelle. Después de eso la chica se hizo aun más abierta y a pesar de que ha Ned el comportamiento se le hizo de lo más extraño no dijo nada, pensando que tal vez Michelle simplemente ya había entrado en confianza con ellos y oficialmente podrían llamarse amigos, aunque el muchacho no se equivocaba pues aquello fue exactamente lo que sucedió.

Después de eso Michelle enviaría un mensaje a Peter diciéndole que terminó el libro y ambos se sumergieran en una larga conversación por chat hasta las dos de la madrugada, habrían continuado de no ser porque la tía May le insistió a Peter que apagara la luz de su habitación y los padres de Michelle amenazaron con quitarle el teléfono si no se iba a dormir, por lo que ambos pactaron verse al día siguiente después de la escuela para tomar helado. Ninguno de los dos le puso a la reunión la etiqueta de "cita", ni tampoco dijeron si invitarían a Ned. Como Michelle fue la de la idea Peter (para su propia conveniencia) decidió pensar que ella le avisaría al otro muchacho, y como Peter era amigo del chico Michelle optó por pensar que él le diría, aunque los dos sabían que estaba el silencioso acuerdo entre ambos de no decirle nada y si el otro preguntaba alegar aquella excusa. Después de todo esta reunión era solo para hablar del libro, ya que las conversaciones por mensaje de texto no se comparaban a hablar con una persona en vivo y en directo, y no podían invitar a Ned porque no había leído el libro y le arruinarían la trama. O eso fue lo que le dijeron a sus conciencias, sobre todo Peter que no paraba de pensar que estaba excluyendo a su mejor amigo de algo. Sin embargo Ned tenía a Betty y muchas veces le había cancelado planes para salir con la muchacha, por lo que Peter no lo estaba excluyendo ya que hacía lo mismo con MJ que Ned con Betty.

Llegó a la heladería y allí estaba Michelle, apoyada contra una pared y esperando.

Peter estaría mintiendo si dijera que este no fue el mejor día de su vida. Estar con Michelle toda una tarde a solas fue lo mejor que le pudo haber ocurrido en su vida. Aquella noche ambos llegaron a sus casa con un humor increíble. May no necesito preguntar por el buen ánimo de su sobrino sin embargo a Michelle la taladraron a preguntas en cuanto entró en su departamento.

-¿Y Michi? ¿La pasaste bien?

-Aja.- Respondió con poco interés y cortante, jamás escucharía el final de la historia si sus padres se enteraban que le gustaba Peter. Su madre siguió cortando la cebolla y le dirigió una mirada escéptica viendo a través de su fachada desinteresada.

-Fuiste con ese muchacho… Peter ¿verdad?

-Sí.

-¿Y cómo la pasaron?- Preguntó su padre.

-Bien.

-¿Ned los acompaño?- MJ maldijo para sus adentros y mentalmente insultó a las dos personas que la conocían de toda la vida.

-No.-Contestó a su madre con más brusquedad de la incluso necesaria. Sus dos progenitores sonrieron con suficiencia obteniendo lo que querían.

-¿Se puede saber porqué?- Siguió su padre. Michelle solo resopló cansada sacando jugo de la heladera.

-No lo invitaron ¿verdad?- Sirviéndose el jugo en un vaso ella comenzó a dirigirse a su habitación. Una táctica evidente de huida pero para este punto no le importaba. –Invítalos a pasar la tarde mañana.-No fue una pregunta y MJ solo dijo un pequeño si hasta desaparecer por las puertas de su guarida solitaria, es decir, su cuarto.

Resopló con ira en los confines de su habitación y se acostó en su cama hasta que la cena estuvo lista.

.

Peter estaba por demás nervioso, se baño y cambio tres veces de ropa, también se pasó el peine por el cabello más veces de las que podía contar. Dios, ni las princesas Disney daban tantas vueltas con su apariencia como él.

Ned llegó a su casa y juntos salieron empezando a caminar hasta la casa de MJ. La chica los había invitado ese día en la escuela y eso los sorprendió de sobre manera, pero también asusto. Ambos amigos tenían diferentes métodos para lidiar con el miedo, mientras Peter caminaba en silencio teniendo un ataque existencial en su mente, Ned no paraba de lanzar preguntas sin esperar respuesta.

-¿Crees que ella se parezca a su madre o a su padre? ¿Tendrá hermanos mayores? ¿Y si no les caemos bien? ¿Qué pasa si digo algo y ofendo al señor Jones? ¿Y si rompo un vaso? ¿Sabes lo vergonzoso que sería eso? Tal vez deberíamos llamar y decir que nos atropelló un camión en el camino. O mejor aún, tu tírate a la calle y que te atropellen, tienes más posibilidades de sobrevivir que yo, entonces llamare y diré que estas en el hospital. Y será verdad, por lo que no tendremos que sentirnos mal por mentir.- Ned tomó una bocanada de aire y se calló de repente cuando estaban frente al edificio, ambos se quedaron duros viendo la imponente estructura de trece pisos.

Las manos de Peter reaccionaron primero y temblorosamente tomó su teléfono, dudó en sus acciones hasta que su cerebro logró reaccionar también. –¿T-tocamos el timbre o la llamamos?

-Ammm… Llama.

Peter asintió varias veces y prendió la pantalla de su celular, dudó viendo el fondo de pantalla y sus manos temblaron sin saber qué hacer.-Bien… ¿p-por qué no lo haces tu?

-¿Yo?

-Sí, tu.

-Oh o-okay.- Ambos se quedaron quietos sin hacer nada hasta que el tonó de mensaje del celular de Peter y el vibrador de Ned los sobresaltó. El niño miró la pantalla detenidamente y leyó el mensaje de MJ en su chat grupal, mientras que Ned no tomó el teléfono y se quedó estatico.

MJ: ¿Ya llegaron perdedores? No tengo todo el día.

Peter escribió con manos temblorosas y debió borrar y rescribir varias veces.

Peter: Estamos abajo.

MJ: Ahora bajó a abrirles.

-A-ahora baja.- Le informó a Ned. El chico solo asintió y ambos esperaron hasta que MJ llegó y los hizo entrar. Ambos estaban por dirigirse a las escaleras hasta que la chica les redirigió el rumbo al ascensor. Por suerte Michelle optó por no decir ningún comentario sarcástico del nerviosismo de sus dos amigos, a decir verdad ella también era un manojo de nervios.

Llegaron al piso de Michelle y entraron al departamento de la chica, ambos adolescentes saludaron al señor y la señora Jones con un apretón de manos, sin embargo Peter se sintió en extremo nervioso, no pudo evitar sentirse en escrutinio por los dos adultos, sobre todo el padre de Michelle.

Se sentaron en la mesa y la madre de Michelle fue muy amable al ofrecerles leche chocolatada y unas deliciosas galletas. Ned fue el primero en entrar en confianza con la familia y elogió enormemente las galletas de miel con nuez de la madre de MJ. Rodrigo y Gabriela se unieron a ellos en la mesa e hicieron las preguntas típicas de todos los adultos a los adolescentes, aunque el padre de Michelle se concentró especialmente en Peter.

-Entonces Peter… ¿Qué estudiaras?

-Lo he estado pensando pero creo que Ingeniería.

-¿En la universidad Estatal?

-Lo-lo estoy pensando.

MJ maldijo a su padre interiormente sabiendo perfectamente lo que hacía. Decidió rescatar a Peter del interrogatorio antes de que se desmayara allí mismo.

-Peter tiene una pasantía en Industrias Stark.- El niño abrió grandes los ojos y la miró en Shock. ¿Por qué diablos MJ decía eso? No era necesario revelar esa información.

La confesión funcionó ya que su padre inmediatamente corrió su mirada a ella y frunció el ceño.

-¿Industrias Stark?- El hombre volvió a correr su mirada hacia Peter. El niño maldijo internamente y asintió despacio con un pequeño si. –No sabía que tomaban pasantes.

-No lo hacen. Peter es el único.- MJ respondió por él y Peter hizo una nota mental para comprarle a la chica un regalo por tan hermoso favor.

-¿Y por qué te tomó a ti? Si se puede saber.

-Presente un proyecto para la fundación septiembre y al señor Stark le gustó mucho así que me tomó como pasante.

El hombre asintió aun escudriñando al niño hasta que Gabriela lo salvó pidiéndole al hombre que la ayudara a revisar lo que hacía falta en la alacena para comprar. Ya sin los padres de Michelle los tres lograron relajarse y entablar una conversación más fluida y relajada.

-Oh, eso me hace acordar un chiste que me contó mi tía Cristina. –Dijo Ned.-Escuchen comienza así-

-NO.- Dijeron Peter y Michelle al unisonó.

-¿Por qué no?

-Ned no sabes contar chistes.

-Claro que sí.

-CLARO QUE NO.- Ambos adolescentes se agarraron las cabezas cuando el otro comenzó con su chiste.

-Con mucha suerte nos esperan diez tortuosos minutos.- Murmuró Michelle.

Gabriela tomó unas bolsas y arrastró a su marido fuera del departamento.

-Fuimos de compras ayer.-Se quejó Rodrigo cuando estaban en el ascensor.

-Estabas intimidando a ese niño.

-Claro que no.

-Claro que sí. Ahora escúchame bien, en lo que queda de la tarde no quiero que lo vuelvas a molestar.

-No hago promesas.

-¡Rodrigo!

-Bieeeeen.

-Si tiene una pasantía con el mismísimo Stark debe ser inteligente. Además parece un bien niño. ¿Qué más quieres para Michelle?

-Todos parecen buenos al principio.

Gabriela revoleó los ojos, su esposo no tenía remedio.

Cuando volvieron de hacer sus compras, quince minutos después, se sorprendieron al ver que Peter y Michelle habían tenido razón, y Ned continuaba contando el chiste tan largo y con tantos detalles como si fuera una novela.

-Entonces, la mujer, la rubia no la pelirroja, entra al consultorio del doctor, el radiólogo no el neurólogo, y le pregunta- El muchacho se calló súbitamente con la mirada perdida en el techo pensando.

-¿Y?- Preguntó Peter. Tenía la cabeza descansando en la palma de su mano.

-¿¡Que le preguntó!?-Dijo Michelle con los brazos y la cabeza sobre la mesa.

-Es-es que no me acuerdo. Se me olvido el final.- Confesó. Sus amigos suspiraron y maldijeron en voz baja.

-¿Me estas jodiendo?- Casi gritó Michelle, mientras detrás de ella sus padres estallaban en risa.

-Michi paciencia.-Dijo su madre.

-Amigo, siquiera nos podrías haber inventado un final. Aunque no nos diera gracia sería mejor que esto.

Ned fue salvado de más insultos dirigidos a su persona cuando la puerta del apartamento se abrió y apareció una niña de diez años, muy parecida a Michelle solo que con el cabello lacio.

-Ya volví.- Gritó.

-Barbará estamos aquí, no grites.-La retó su padre.

-Perdón. –La niña se acercó a sus padres y le dio un beso a cada uno.

-Barbie, ellos son Ned y Peter los amigos de Michelle.-Presentó Gabriela. La niña se dio la vuelta y saludo con un "Hola" animado. Sin embargo sus ojos se agrandaron al ver al lindo muchacho castaño sentado frente a su hermana.

.

Michelle la quería matar, la mocosa tan molesta como nadie que haya conocido antes, obtuvo un rompecabezas de cien piezas, las esparció en toda la mesa y ahora los cuatro estaban armando la ridícula imagen de un hada en un bosque. Y como si eso fuera poco inmediatamente se sentó junto a Peter y no le sacaba los ojos de encima, no es como si Michelle estuviese celosa, la mocosa tenía diez años y aun jugaba con Barbies.

A la pequeña Candelaria Jones se le hacía en extremo difícil concentrarse en el rompecabezas frente a ella cuando tenía a este lindo chico de ojos dulces a su lado. Empujó sin querer una ficha al suelo con su codo y Peter la atrapó rápidamente en el aire, ofreciéndosela con una sonrisa.

-Toma.-Sus ojos jamás abandonaron aquella linda sonrisa mientras su mano tomaba la ficha y murmuraba un "gracias".

No llegaron a terminar el rompecabezas cuando el teléfono de Peter sonó con una alarma.

-Ya nos tenemos que ir Ned.

-Oh. ¿No se quedan a cenar?- Preguntó Gabriela.

-Lo lamento quede de hacerle la cena a mi tía.

-Y yo prometí ayudarlo.-Agregó Ned más pronto de lo incluso necesario.

-Ohooooo.- Candela se quejó tirando medio cuerpo sobre la mesa con exagerada depresión.

-No te preocupes Cande seguro se quedaran otro día.- La niña se enderezó y asintió con demasiado entusiasmo. Los muchachos se despidieron y agradecieron a los Jones por las galletas.

-Gracias por el rompecabezas Cande, fue muy divertido.- Agradeció Peter, la niña se sonrojo pero no le quitó los ojos de encima hasta desaparecieron tras la puerta y no lo pudo ver más.

-¡Pero que lindo es ese chico!- La pequeña volvió a tirar el cuerpo sobre la mesa con la vista clavada en la puerta como si Peter aun siguiera allí. Rodrigo le disparó una mirada enojada a su hija quien ni siquiera se inmuto, mientras que su madre estalló en carcajadas. -¿Cómo dijiste que se llamaba?

Michelle revoleo los ojos y cruzó los brazos, apoyándose contra el respaldo de su silla, Candelaria tanto le había tenido los ojos encima Peter y ni siquiera recordaba su nombre de cuando su madre lo presentó. –Peter.

-Peter… jamás olvidaré ese nombre.

-Y no es tan lindo.-Dijo Michelle. Su padre lanzó un ¡Qué! escandalizado al entender el tan de su hija.

-Ese Peter es un peligro.- Gabriela estalló en risas otra vez por las exageraciones de su esposo.

El señor Jones ahora no tenía solo una sino a sus dos hijas enamoradas de Peter Parker, al menos Michelle era lo suficientemente decente como para disimularlo.


Hola a todos! Enormes gracias por leer.

Este one-shot inicialmente fue pensado como el capítulo uno de una historia SpideyChelle que voy a empezar a escribir pero me di cuenta de que al final me desvié mucho de la trama por lo que decidí publicarlo como capítulo individual he iniciar de cero con mi historia.

Gracias a .m por agregar este fic a sus favoritos y seguirlo.

bellaraven03: Jajaja. Sip, definitivamente Peter es muy lindo, ya ves que no solo le gusta Michelle.

Como sea, muchas gracias a todos los que leyeron. Nos leemos pronto. ¡Saludos!