Disclaimer: HP no me pertenece


Entre veelas e incubus

.

Epílogo

.

No se suponía que Harry estuviera haciéndole el amor a Draco en medio de la fiesta de aniversario del fin de la guerra, tenía que estar en medio de toda la gente dando mensajes de esperanza, agradeciendo participaciones en la guerra, exclamando lo mucho que los aurores se eforzaban por mantener el orden de la sociedad... pero eso era exactamente lo que estaba haciendo. Habían encontrado un cuarto totalmente vacío y se había introducido en él, antes de besarse con fuerza y empezar a retirar la ropa del otro.

-Saca tus alas-ordenó el héroe con voz entrecortada y cuando el rubio lo hizo, Harry solo pudo gemir fuerte, antes de apoderarse de su boca y tomarlo con más fuerza. Draco sollozó cuando el otro acarició las plumas y dejó caer la cabeza hacia atrás para que Harry se apoderara de su cuello.

-Dijiste...-empezó Draco a hablar con dificultad, a medida que Harry besaba un hombro-dijiste que tenías que estar ahí en el momento del discurso.

-Que lo dé Hermione, no me importa-exclamó Harry y el slytherin rió suavemente antes de asentir.

-¿Me estás usando como pretexto para escapar de tus obligaciones, Jefe de Aurores?-preguntó travieso y Harry negó, antes de girarlo y besarlo suavemente, apoyándolo contra la pared, de la misma manera que lo había hecho años atrás cuando descubrieron que era su pareja destinada. Solo que esta vez, ambos estaban seguros de lo que hacían y que estarían juntos para siempre, por lo que no hubo vacilación a medida que se poseían más y más hasta liberarse.

-No necesito pretextos para darle amor a mi veela.

-Y el hecho de que Zabini esté ahí afuera, colgado del brazo de Victor Krum no significa nada.

Harry negó.

-Vi la mirada que te dio. No importa cuánto odie el hecho de que seas un veela, le gustas.

-Tú le gustas, peleamos por ti.

-Y ganaste.

-Gané.

-Así que, ¿por qué no aprovechas tu premio?-sonrió Harry, coqueto, antes de besarlo. Draco lo hizo, canturreando de felicidad. Cuando ambos se dejaron ver nuevamente en la fiesta, Hermione los miró exasperada.

-Te estuve buscando por horas-reclamó ella-¡tuve que dar el discurso del aniversario por ti! Dijiste que irías por bebidas y desapareciste. El Ministro estaba a punto de organizar un rescate hasta que noté que ni tú ni Draco estaban cerca, y le dije que no era necesario. ¿Dónde estaban? Ni siquiera me dejaste un borrador ¡Tuve que improvisar!

Cuando Draco soltó una risita, ella suspiró.

-No me digan que... No puede ser. ¡Harry! Han pasado años desde que se unieron, ¿cómo es posible que aún parezcan adolescentes?

-Harry se puso un poco posesivo con Zabini cerca, no que me queje.

-Pequeño ingrato-exclamó Harry, tomando su mano- tú estuviste de aquí para allá coqueteando con todo mundo. Te encanta tenerlos a tus pies, ¿y se supone que debo quedarme quieto viendo como intentan atraer tu atención? ¿Como chocan disimuladamente contigo y te invitan bebidas? ¿Y más cuando el hombre que casi te dejó una vez sin voz está cerca? Tenía que asegurarme que estuvieras lejos de él y cerca de mí.

-Soy un veela, ser bonito es lo mío. Algunos tienen buen gusto y otros simplemente son débiles ante el allure, sin importar lo muy bajo que esté. Y sí, te aseguraste que estuviera cerca, muy cerca, y te lo agradezco. Fui muy divertido- exclamó dándole un beso en la mejilla y sacándole una sonrisa a Harry.

-¿Y por qué estabas usando el allure exactamente?-entrecerró los ojos Hermione, mirándolo con cautela.

-Tal vez quería ver cuánto resistía mi esposo, el cual exclamó que no me besaría en toda la noche, y el único que lo siente con mucha, mucha fuerza. Aunque, también es el único que tiene inmunidad ante el allure cuando quiere y se esfuerza.

-Ese soy yo, pero no pude resistirme hoy.

-¿Y por qué no habría de besarte?-exclamó Hermione con los ojos entrecerrados- ¿Qué plan oscuro estaba evitando?

-Si, Potter ¿Por qué? - preguntó Malfoy, tocando su brazo insinuante.

-Porque tú-siseó Harry antes de besarlo bruscamente- tú te vestiste a propósito con mi túnica y si te besaba no podría parar y lo sabes, y por eso lo hiciste.

-Tu túnica...-repitió Hermione-saben qué, no preguntaré. Solo que la próxima vez, avísenme.

-¿Qué? ¿Que vamos a ir a ...?

-Si. ¡No! Que me van a ofrecer de sacrificio o algo por ir a divertirse. -Y antes que Draco hablara intentarla especificar en qué, Hermione lo miró mal y lo silenció.-No completes esa frase, Draco Malfoy. Eres un veela desvergonzado. No te pareces nada a ese veela dulce y tímido que fuiste en nuestro último año.

Draco rió.

-No puedo evitarlo, Harry me tiene muy consentido y mimado. Soy un veela amado totalmente, así que, naturalmente, me vuelvo presumido y alegre. ¿Acaso no es lo mismo con Fleur?

-Supongo que tienes un punto,-suspiró la ex gryffindor mirando a su cuñada platicar con las damas de sociedad-aunque no se que tan bueno sea que se sientan tan confiados. Por cierto, ten-exclamó ella- te guarde un poco de postre.

-Eres un amor-exclamó el veela, besando su mejilla, lo que ganó pequeños gritos de chicas a su alrededor y un sentimiento cálido en Hermione.

-La confianza es lo que nos permite exclamar con firmeza que nuestros compañeros nos aman, y nos brinda la fuerza para defenderlos cuando es necesario-exclamó Draco comiendo velozmente su pedazo de tarta de frutas.-Además, ¿no has notado aún que mi pareja es Harry Potter? No quiero presumirte, pero incluso entre los veelas soy muy afortunado y puedo darme el lujo de presumir.

El Jefe de Aurores sonrió complacido.

-¡Oh, ya veo porque lo aceptaste! Te encanta que alimenten tu ego-rió la mujer antes de sonreír.-Por cierto, tu adorado esposo se está comiendo tu porción de postre ahí.

-Déjalo, puede que lo haya agotado hace un momento, no me sorprendería que corra por una jarra de miel de maple.

Draco lo miró.

-Creído.

-Te adoro, lo sabes.

-Me alegra que se encontraran uno al otro, y tú, Harry, puedas ser amado como nunca lo fuiste. A pesar de que jamás tendrás ese perfil bajo que siempre soñaste, con él a tu lado.

-Todavía puede ser muy dulce y tímido cuando quiere-exclamó Harry, rodeando la cintura de Draco, y saludando de lejos a Luna.-Me gusta mucho esa faceta también.

-Si, pero no podía usarla hoy. Ese es mi comportamiento ante ti y la familia, donde sé que estás sano y salvo. Hoy tenía que demostrarle a todo tu club de fans de Harry Potter que eres mío y solo mío y voy a hacerlas sufrir si interfieren entre nosotros.

-Tu solo quieres ver el mundo arder.

Draco rió divertido, pero antes de que respondiera se tensó y sus ojos cambiaron ligeramente a un color más plateado.

-¿Qué pasa?-preguntó Harry con preocupación al reconocer la señal de peligro, y Hermione llamó rápidamente junto a ella a Ron, quien intentaba que Neville invitara a Daphne Greengrass a bailar.

-¿Qué pasa?-preguntó Ron.

-Huele a fornicación.

Sorprendido por la frase y recordando la última vez donde lo escuchó, Harry respiró profundo y volteó atrás de él para descubrir que Zabini estaba caminando hacia ellos, con una sonrisa coqueta y ojos venenosos. Parecía haber dejado a Krum en algún lado, porque por primera vez en la noche estaban separados.

-Eso aplicaría más a ti en este momento-siseó Zabini llegando, mirando a Harry de arriba a abajo-. De hecho ambos apestan a romance. Uff.

-No es fornicación si estoy casado, imbécil-respondió el rubio y Zabini rió como quitándole importancia.

Harry no lo hizo, tomó la mano de Draco y lo miró con ojos asesinos.

-¿Qué quieres?-preguntó.

-Me alegra verlos también, Potter, Weasley, Weasley, Malfoy.

-Granger-respondió Hermione-conservé mi apellido.

-Ya veo.

-¿Qué te trae por aquí, Zabini?-siseó Draco.

-Solo venía a felicitarlos. Siempre pensé que él te rechazaría, eventualmente, cuando notara que tu amor era tan falso como mi atracción, pero parece que no lo hizo. Me alegra que hayas recuperado tu voz,-exclamó con sarcasmo- quisiera decir lo mismo de mis alas. En fin, solo quería advertirte que regresaré al país, acompañado como podrás notar, y si de alguna manera intervienes esta vez con mi pareja oficial, voy a destrozarte.

Draco rodó los ojos.

-Por Merlín, ahórrate las palabras. Krum no es mi maldito problema.

-Eso espero. Después de todo, ya arruinaste nuestra unión.

-¿Oh, él sabe siquiera que va a unirse?-ironizó el veela.

-Como dijiste, ese no es tu problema, yo me preocuparía más por esa cosa que llevas en ti-exclamó alejándose, y Draco bufó antes de que Harry lo mirara interrogante.

-Se supone que en la unión el mostraría las alas-aclaró-. Ya no puede presumirlas. Bueno, puede, pero están rotas aún al parecer.

-Oh-exclamó Harry, recordando como las alas de Draco habían brillado de un hermoso color plateado cuando había mordido su cuello, en medio del reclamo.

-¿Por qué jamás se recuperaron?-preguntó Ron y Draco se alzó de hombros.

-Padre dijo que algo sobre no ser totalmente un incubus. Como no tiene la suficiente sangre de criatura, no pudo regenerarlas.

-Ya veo.

-¿Y no podrías hacer algo por Krum?-preguntó Hermione, mirando al hombre que alguna vez fue su compañero de baile.- Él se ve... distinto.

Draco se alzó de hombros.

-Si está intoxicado, sin dudas, pero una vez que se unan se verá más normal. Puede que incluso ame a Blaise. Como sea, lo más que podría hacer por él alguien, es intentar alejarlo de Zabini mediante medios legales.

-Con Harry lo liberaste con un toque.

-Si, porque le di amor.

Harry frunció el ceño.

-Pero no lo harás con Krum.

-No lo haré-lo calmó Draco.- Él no es mi pareja, así que lo estaría intoxicando yo mismo. Además, no puedo darle amor a nadie más que a Harry, ya que es mi pareja.

Harry sonrió.

-Bueno, eso no es del todo cierto.

-¿Qué quieres decir?

-Bueno yo-se sonrojó Draco- eso que dijo Zabini que llevo en mi-tartamudeó.-Harry, es un bebé.

-Un bebé...-repitió sorprendido.

Hermione chilló.

-¡Felicidades!

Ron jadeó.

-No puede ser.

Y Harry, Harry rió y lo alzó levemente, haciéndolo girar.

-¡Si, si, si!

-Me alegra que estés feliz-susurró Draco y Harry lo abrazó atrayendo la atención de la gente. Como respuesta, Draco dejó un aura dulce y cálida salir de él, lo cual atrajo la atención de todos en el lugar. No de una manera romántica, solo curiosa. Avergonzado, Draco sacó las alas y los cubrió a ambos cuando Harry lo besó profundamente.

-Por supuesto que estoy feliz,-exclamó cuando se separaron y Draco ocultó sus alas.- Ahora, si todo el mundo me disculpa, me temo que debo ir a darle mucho amor a mi veela.

Draco rió y dejó que Harry tomara su mano y los llevara a casa.