Lágrimas –Derrota –

*Amber Mist

            Corrió lo más rápido que pudo, sintiendo las cálidas lágrimas recorrer el contorno de su rostro, provocándole aún más de las mismas. Sabía que sus dos amigos lo seguían confundidos y preocupados, pero él no los quería cerca. Quería escapar de ellos, de su propio llanto, de lo ocurrido, de todo…

            Llegó a la casa que la Liga les brindaba durante la competencia. Abrió la puerta con violencia, sin preocuparse por cerrarla y se encerró en la habitación que compartía con Misty y Brock. Se deslizó dejándose caer en el suelo contra la puerta. Apoyó su cabeza sobre sus rodillas sosteniéndose la nuca con ambas manos. Solo en la oscuridad accedió al llanto impotente de la derrota, dejando fluir las lágrimas y crecer la ira.

            Misty y Brock entraron a la casa sorprendidos por las acciones de su amigo. Él tenía bastante ventaja en su frenética corrida hacia la casa, aún así, desde la distancia que ellos estaban, escucharon el portazo que sufrió la vivienda al entrar el joven a la habitación. Se acercaron a donde Ash estaba, golpearon con suavidad la puerta, inseguros de la posible respuesta del entrenador…

-LARGO! – Para el criador, aquel grito angustiado fue suficiente para no insistir y dejar que el chico  calmara su ira. Para Misty no lo fue…

-Ash, queremos hablar contigo. –

-Déjalo, Misty. Necesita tiempo para calmarse. –

            Ash levantó la cabeza al escuchar las palabras de su amigo. Sus ojos rojos y su expresión furiosa se enfocaron en la ventana, mientras su atención permanecía del otro lado de la puerta…

-Pero, Brock. No podemos dejarlo solo… -

-Debe haber sido difícil para él, Misty. Déjalo. –

-Lástima… - Esa sola expresión cruzó la mente de Ketchum al escuchar a sus amigos. Una sensación quemante se extendió por su pecho y  cerró los puños con fuerza mientras los otros dos continuaban con sus compasivas palabras…

-Quizás hablando sobre esto logre calmarse. – Escuchó a Misty tratando de convencer a Brock, poniéndose de pie, presionando más sus puños y cerrando los ojos…

-Está exagerando. Vamos, prepararé algo de comer… -

            Brock se marchó, pudo escuchar su paso alejarse, pero ella continuaba allí, parada frente a la puerta, esperando…

-Ash… por favor, abre. Hablemos de esto… -

            Abrió los ojos y volteó hacia la puerta. Misty lo escuchó acercarse sin poder evitar una pequeña sonrisa, ni sentir la esperanza de poder ayudarlo, pero lo que escuchó del otro lado era completamente distinto…

-DEJAME SOLO! – Pateó la puerta con bronca -¿NO LO ENTIENDES? LARGO – Continuó golpeando con los puños cerrados, empujando y pateando la madera, mientras gritaba –DEJAME, DEJAME! LARGO –

            Misty retrocedió asustada. Los gritos y los golpes no cesaban. Brock se asomó desde la cocina viendo a la chica perpleja caminar hacia atrás sin dejar de mirar la puerta. El criador frunció el ceño, determinado a tomar alguna acción para detener los golpes de Ash, pero todo quedó en silencio después de un golpe seco…

            Se encontraba arrodillado en el suelo, presionando sus puños contra las rodillas. Su vista nublada por las lágrimas y su mente igual, por impotencia, ira, resentimiento y derrota. Del otro lado de la puerta no se oía ningún sonido. Sus dos amigos habían callado. Ahora podía concentrarse en encontrar calma en su soledad. Se acercó a la ventana y se sentó en su marco. Observó el cielo despejado repleto de estrellas que rodeaban la luna llena. Miró hacia abajo, teniendo el suelo cerca podía salir de la casa en cualquier momento que quisiera sin pasar por ningún interrogatorio de sus amigos. Con los rayos de la luna pudo ver sus manos, rojas por los golpes a la puerta, al suelo y por la presión que ejercieron sus dedos en las palmas…

-¿Era tan difícil entender que quería estar solo?... – Se quitó la gorra y la arrojó en su cama. Volvió su atención al paisaje fuera de la casa –Sería sencillo bajar de la ventana y escapar…. Empezar todo otra vez ¿Cómo sería si pudiera hacerlo? ¿A dónde iría?…. – Una diminuta sonrisa triste se formó en su rostro y cerrando los ojos apoyó su cabeza en el marco…

-Por alguna razón no puedo dejar este modo de vida……. Ni tampoco creo que pueda cambiar algo escapando. Esta es la realidad que me tocó. Seré perdedor toda mi vida, aunque intente cambiarla miles de veces….. Es así. – Miró a la puerta desvaneciendo la sonrisa –Y ellos no van a dejarme solo…. Me tienen lástima… -

            Se levantó del marco y se acercó a la puerta. Todavía el silencio era reinante del otro lado. Curioso, abrió la puerta con precaución para no hacer ruido. Murmullos se escuchaban desde la cocina, pero no quiso saber que decían suponiendo que Brock y Misty debían estar hablando de lo ocurrido al anochecer, imaginó a la entrenadora criticando todo su esfuerzo y al criador burlarse de sus decisiones…

-Yo también lo haría si estuviera en lugar de ellos. Lo que hice hoy fue todo un espectáculo, aunque ellos quieran teñir la burla de preocupación… -

            Volvió a la habitación cerrando la puerta con la única llave. Se acostó inconscientemente en la cama de Misty, logrando poco a poco quedar dormido…

-Nunca lo vi tan furioso antes… - La misma frase repetida más de quince veces. Aún no podía asimilar lo sucedido –É-Él no es así, Brock. –

-Lo sé – Respondió el criador masajeándose la frente.

-Estando ahí dentro solo…… ¿No te preocupa que haga algo? –

-¿Cómo qué? –

-No lo sé. – Se levantó de la silla sosteniéndose su adolorido cuello. La tensa situación le estaba provocando una contractura muscular que no ayudaba en nada. Brock tomó su ejemplo levantándose también.

-Veremos como amanece – Concluyó brindándole una afectuosa mirada –Por hoy será mejor que vayamos a dormir. –

-De acuerdo. Merezco un largo descanso. –

            Ambos se detuvieron frente a la puerta de la habitación e intercambiaron inseguras miradas antes que el criador girara el picaporte…

-Está con llave… - Ella suspiró resignada, sin ánimos de volver a golpear esa puerta.

-Busquemos más sábanas o algo. Podemos usar los sillones. –

-Sí…. Creo que tengo mi mochila por aquí… -

            Teniendo solo un sillón lo suficientemente grande como para dormir, Brock usó su bolso de dormir por esa noche, mientras Misty se acomodó en el único mueble cubierta por la manta del criador…

-Buenas Noches, Misty. -

-Buenas Noches, Brock…- Volteó hacia la puerta cerrada. –Dulces Sueños, Ash. –

Continuará…

AM