Atencion Atencion todos los personajes, el mundo en el que se basa esta historia, muñequitos de peluche de Harry y Luna (¡ah no!... que aqui no hay de eso... lastima serian una monada) y demas zarandajas que producen dinero no son mias, son de JK Rowling. Estoy mas arruinado que una rata de rio asi que demandarme no servira de nada...
Esta historia comienza al final del 5º libro, pero como seria tonteria limitarse a copiar lo que viene en el libro (y por lo cual SI podrian demandarme) aqui los acontecimientos son diferentes.
Bueno... pues dicho esto vamos con la historia.
Harry se sentó en medio de la mas completa oscuridad intentando recordar lo que había pasado antes de quedarse inconsciente.
Había ido al departamento de Misterios para rescatar a Sirius. Ron, Hermione, Ginny, Neville y Luna habían insistido en acompañarle a pesar de que había dejado claro que ni quería ni necesitaba que le acompañasen. Todo resultó ser una emboscada preparada para conseguir una profecía sobre Voldemort y él. Durante la huida se separaron en dos grupos, cuando se volvieron a juntar solo Luna y él seguían intactos, Hermione estaba fuera de combate, a Ron le habían alcanzado con algún tipo de hechizo de confusión, Ginny tenia un tobillo roto y la nariz rota de Neville le impedía pronunciar correctamente los hechizos.
Acabaron acorralados en una de las extrañas habitaciones. Neville quedo fuera de combate cuando los mortifagos forzaron su entrada. Ante tal situación Harry decidió hacer de cebo para alejar a los mortifagos de sus compañeros caídos, con lo que no había contado es con que Luna le siguiese. Su carrera tuvo una parada bastante accidentada al caer por las escaleras del foso donde se encontraba el extraño arco de piedra con el velo negro.
Al levantarse comprobó sorprendido que en la puerta por la que acababa de entrar se encontraba Luna, al parecer manteniendo a ralla de manera bastante eficaz a los mortifagos que les habían perseguido desde la otra sala. Por desgracia esa no era la única puerta de la habitación y no tardaron en aparecer el resto de mortifagos. A Harry apenas le dio tiempo a gritar un aviso a Luna antes de que uno de los recién llegados comenzasen su ataque. Con una agilidad felina Luna consiguió esquivar o desviar los ataques lanzados contra ella y llego al fondo del foso donde Harry sostenía la, milagrosamente aun intacta, profecía. Los seis mortifagos que aun quedaban en pie los habían acorralado contra el extraño arco de piedra. Pero cuando Malfoy se disponía a hablar una voz aguda y fría le interrumpió.
-Basta, si hubiese querido dar a conocer mi regreso no os hubiese ordenado que me consiguieseis la profecía, hubiese venido yo mismo desde el principio. –Voldemort acababa de aparecer en lo alto de la escalera del foso.
-P... pero mi señor... –comenzó a decir Malfoy mientras el Señor Oscuro descendía las escaleras.
-Desapareced, el viejo y su grupo vienen hacia aquí, y con todo el alboroto que habéis montado seguramente hasta los aurores estén de camino. Después me encargare de castigar vuestra ineptitud.
A pesar de llevar mascaras se podía notar el terror en los seguidores de Voldemort, que desaparecieron al instante.
-Y ahora Potter, entrégame la profecía y te prometo que tu y tus amigos tendréis una muerte rápida.
-No puedes usar tu varita contra mí ¿recuerdas? –Dijo Harry tratando de contener el angustioso dolor proveniente de su cicatriz –así que solo...
-Sea pues –Le interrumpió Voldemort –AVADA KEDAVRA
-PROTEGO –Grito Harry justo a tiempo de impedir que el mortal rayo verde le alcanzase.
Una onda de energía recorrió la sala cuando los dos hechizos se encontraron
Después de la explosión se debía haber perdido el conocimiento. Seguía sin tener ni idea sobre donde estaba. ¿Quizás Voldemort le había capturado tras quedarse inconsciente?... No, descartó esa posibilidad, al fin y al cabo, ¿Para qué capturarle si podía matarle en el acto aprovechando que estaba indefenso?
Mientras seguía cavilando Harry se dedico a tantear el suelo de piedra en el que se encontraba. Al poco su mano choco con un objeto. Por el ruido dedujo que se trataba de algo de madera. Esperanzado siguió el ruido hasta dar con la varita que había rodado a unos pasos de el.
-Lumos –dijo nada mas recoger la varita.
Lo primero que vio nada mas hacerse la luz fue a Luna bocabajo a unos metros de el. Al instante se arrodillo a su lado para comprobar su estado. Al parecer se había golpeado la cabeza, pero no parecía demasiado grave.
-Hmmm, ¡¡¡¡¡Au, eso duele!!!!! –Dijo Luna sorprendiendo a Harry mientras este examinaba la contusión que tenia ella en la frente.
-Lo siento –Se apresuro a decir Harry -¿Estas bien?
-Si, creo que si ¿Dónde estamos?
-Ni idea –Respondió Harry mientras recorría el resto de la estancia con el haz de luz.
A unos metros, junto a una pared, se encontraban la varita de Luna y la esfera que contenía la profecía milagrosamente intacta. Harry recogió la profecía. "Tantos problemas por esto" pensó, mirando a la pequeña esfera como si tuviera la culpa de todo. Por su parte Luna ya se había puesto en pie y recogido su varita mientras Harry se encontraba ensimismado con la profecía.
-Lumos... Harry, HARRY –Harry apenas fue consciente de las acciones de Luna hasta que se dirigió directamente a el- Creo que ya sé donde estamos.
Harry dirigió también su varita hacia la zona que Luna estaba iluminando y la sorpresa hizo que casi se le cayese la profecía. Seguían aun en el departamento de Misterios, en la misma sala con el arco de piedra, pero había algunas diferencias significantes. Para empezar estaba el arco de piedra, pero no había ni rastro del extraño velo negro. En segundo lugar todo estaba cubierto de polvo y parecía que hiciese años que nadie pisaba esa sala. Y desde luego también estaba el hecho de que la única luz en toda la sala fuese la que provenía de las varitas de Luna y Harry.
-¿Qué esta pasando aquí? –Dijo Harry para sí mismo casi en un susurro.
-Solo hay una manera de averiguarlo –Respondió Luna a pesar de que era evidente que la pregunta de Harry había sido retórica.
Dicho esto Luna avanzó hacia una de las escaleras que llevaban del foso en el que se encontraban a una de las múltiples puertas que tenia la habitación.
-Espera Luna, puede ser peligroso, será mejor que yo vaya delante.
-De acuerdo –Respondió Luna de manera despreocupada encogiéndose de hombros.
Tras la puerta se encontraba la habitación giratoria, aunque esta vez no se cerro la puerta tras ellos al entrar y tampoco se movió. En esta sala tampoco había ninguna iluminación. Algunas de las puertas estaban abiertas. Harry dudó un momento, a un lado tenia la salida, al otro la habitación donde había dejado al resto del grupo. Al final se decidió por la habitación.
-Dudo que sigan ahí –Dijo Luna al ver hacia donde se dirigía el chico.
Por respuesta Luna recibió una mirada furibunda pero que al parecer no le afecto en lo mas mínimo. En efecto la sala se encontraba desierta, incluso los tanques que habían contenido los cerebros estaban vacíos. Cuando Harry volvió a la sala anterior Luna se encontraba examinando la salida.
-Hace un rato Voldemort dijo que Dumbledore y la orden venían de camino... ¿Dónde demonios se han metido? –Dijo Harry perdiendo la paciencia.
-¿Orden?
-Olvídalo es una historia muy larga. –Respondió Harry de manera un tanto brusca –tenemos que encontrar a los demás.
-Es evidente que aquí no hay nadie –Repuso Luna
-Eso no es posible –dijo Harry alzando la voz.
-Mira a tu alrededor ¿recuerdas que esto estuviese así la ultima vez que pasamos por aquí? –La voz de Luna sonaba tan calmada como si simplemente estuviesen manteniendo una conversación trivial. –De todas formas lo lógico ahora es salir de aquí e informar de lo que ha ocurrido.
-P... pero...
-No sabemos lo que ha pasado, tal vez ya estén a salvo, y si no lo están lo único que podemos hacer ahora por ellos es avisar a alguien.
Por un momento pareció que Harry iba a responder, pero al final simplemente se limito a asentir con un gesto de derrota en su cara.
Al llegar al los ascensores Luna, que ahora iba delante, se detuvo un momento a examinarlos con interés.
-Espero que aun funcionen –Dijo en voz baja, aunque no lo suficiente para que Harry no la oyese.
-¿Por qué no iban a hacerlo?
Luna simplemente se limito a llamar al ascensor. Al momento se comenzaron a oír ruidos procedentes al parecer de los pisos superiores. Al cabo de un rato el ascensor apareció. Iba a trompicones y hacia todavía mas ruido de lo que Harry recordaba. Una vez que se hubo parado Luna corrió la reja. Harry le lanzo a Luna una mirada que quería decir "¿de verdad te vas a montar en eso?" Y por su parte Luna le respondió con su propia mirada que quería decir "Que remedio".
El viaje fue bastante movido, tenían que sujetarse por lo menos en dos de las paredes para poder mantener el equilibrio debido a las sacudidas del aparato. Aun así Luna parecía bastante absorta en sus pensamientos.
-SABES LO QUE ESTA PASANDO ¿VERDAD? –Harry tuvo que gritar para hacerse oír por encima del estruendo producido por el ascensor.
-¿QUIERES HACER EL FAVOR DE RES... –El ruido había cesado debido a que el ascensor había llegado a su destino- responderme?
-Tengo un par de teorías –Respondió Luna mientras descorría la reja – Pero no puedo confirmarlas aun... depende de lo que encontremos ahí fuera.
-No se como puede estar tan tranquila –Murmuró Harry, si Luna le oyó no respondió. -¿Y bien? –Dijo Harry en voz más alta.
-Fuera –Se limito a decir Luna.
Exasperado, Harry dirigió su atención al vestíbulo en el que se encontraban ahora. Al igual que en el resto de estancias por las que habían recorrido aquí tampoco había rastro de que hubiera pasado nadie en mucho tiempo. A Harry le llamo especialmente la atención la fuente con las estatuas que se encontraba en medio del vestíbulo. Solo estaban en pie las del mago y la bruja, el resto al parecer habían sido destruidas a juzgar por la cantidad de escombros que sobresalían de la fuente (Harry incluso le pareció ver la oreja de la estatua del elfo domestico).
Por su parte Luna se encontraba examinando las chimeneas, muchas de ellas también se encontraban destruidas, pero aun quedaban dos indemnes.
-Aquí hay algo de polvo Flu –Dijo Luna examinando un recipiente que se encontraba tirado cerca de una de las chimeneas intactas.
-¿A que esperamos? –Dijo Harry avanzando hacia Luna.
Harry cogió la mitad de los polvos que quedaban y se dirigió hacia una de las chimeneas.
-Es inútil intentar ir a Hogwarts, allí no hay nadie que nos pueda ayudar, es mejor que vayamos a Grimmaul Place –Dijo Harry antes de entrar en la chimenea, Luna parecía a punto de hacer una pregunta pero Harry le interrumpió –Después te lo explicare, ahora solo recuerda, Grimmauld Place.
Harry repitió otra vez el destino y lanzo el polvo a sus pies... que simplemente se deposito en sus zapatos. No surgió llama alguna. Al principio Harry se quedo esperando alguna reacción, pero al ver que no iba a ocurrir nada simplemente soltó una maldición mientras le daba un puñetazo una de las paredes laterales de la chimenea. Lo único que consiguió fue que sus nudillos sangrasen. El polvo era ya irrecuperable ahora que se había mezclado con las cenizas que quedaban en el suelo de la chimenea y lo que tenia Luna apenas llegaba para que una persona viajase.
Luna por su parte permaneció inmutable.
-será mejor que pruebes otro sitio... –Dijo Harry con desgana- Quizás el caldero chorreante o... –Harry se quedo pensando un momento- La Madriguera, si, seguro que los padres de Ron sabrán que hacer, ve sin mi, yo esperare aquí a que traigas ayuda.
Luna se dirigió a la otra chimenea y repitió la operación obteniendo el mismo resultado que Harry.
-Quizás no quedaba suficiente... posiblemente por aquí halla mas –Dijo nerviosamente Harry mientras rebuscaba en los escombros de las demás chimeneas- ¡¡Tiene que haber mas!!
-Me parece que estas chimeneas están fuera de la red –Dijo Luna mientras salía de la chimenea.
-No... eso no puede...
-¿Ser? –Luna termino la frase por él
Harry se sentó en el borde de la fuente totalmente abatido.
-Todavía podemos salir a la calle –Dijo Luna poniéndole una mano en el hombro.
Harry miro hacia la salida que iba a dar al Londres muggle. Hizo un breve gesto afirmativo con la cabeza y se levanto para dirigirse hacia la falsa cabina telefónica.
-Espero que sea menos movido que el ascensor –Dijo Harry
Una vez dentro solo tuvieron que decir al teléfono que querían salir para que este se pusiese en marcha. Por suerte esta vez el trayecto fue tranquilo y solo duro unos segundos.
-Nox –dijeron Luna y Harry casi a la vez.
Ahora que estaban en el exterior ya no necesitaban la luz que les proporcionaban las varitas, había suficientes farolas y el cielo estaba cada vez mas claro, señal de que se acercaba el amanecer.
-Harry, tu creciste entre Muggles ¿verdad? –Dijo Luna mientras miraba a su alrededor -¿notas algo extraño en los edificios?
-No... ¿A qué viene esa pre... ? –Antes de poder terminar una voz a sus espaldes interrumpió a Harry.
-Lumos –instintivamente Harry y Luna se volvieron hacia la voz que acababan de oír, pero inmediatamente una luz intensa les cegó. Harry instintivamente se coloco un brazo enfrente de la cara protegiéndose le la luz –Quedáis detenidos por violar el toque de queda decretado por el gobierno de su excelencia osc... –Cuando Harry bajo el brazo para intentar ver a su interlocutor el recién llegado se callo inmediatamente y se arrodillo sin perder ni un segundo. –O... os ruego que me perdonéis Milord... No tenia ni idea que erais vos... ni siquiera sabia que os encontraseis en Londres, os lo aseguro... yo jamás osaría...
Ahora que la luz no le apuntaba a la cara Harry pudo observar al hombre mejor. Era bastante joven, quizás seis o siete años mayor que Harry, aunque no podía asegurarlo ya que este mantenía la cabeza agachada y no le veía bien la cara. Iba vestido con una especie de mezcla entre típica túnica de mago y algún tipo de uniforme, de hecho en las hombreras portaba algún tipo de insignias que Harry supuso que eran para indicar su rango. Pero lo que realmente le helo la sangre fue el ver que en el antebrazo izquierdo del uniforme llevaba bordada la marca tenebrosa.
Mientras Harry le había estado observando el hombre había seguido hablando (casi balbuceando) con nerviosismo, pero Harry no había reparado en ello.
-... por favor Milord si puedo serviros en algo –En ese momento Harry volvió en si al darse cuenta de que le estaba hablando a el.
-Debemos llegar al caldero chorreante lo antes posible –Tanto Harry como el recién llegado se sorprendieron cuando Luna habló.
Harry le dirigió una mirada inquisitiva a Luna mientras el hombre miraba confuso a la pareja. Por su parte Luna se limito a guiñarle un ojo a Harry para indicarle que le siguiese el juego. Harry, que no estaba seguro de sí le saliese la voz después de tantas sorpresas se limito a mirar al hombre arrodillado y asentir. Pero cuando este se levantó Harry se quedo estupefacto.
-¿Stan?... ¿Stan Shunpike? –Harry consiguió a duras penas no gritar.
Continuara...
Jujuju ahora si sois tan amables podeis dejar un review para decir lo (piiiiiiiii) o lo (piiiiii) que soy por dejar la historia colgando asi (si os apetece decir algo bueno tambien es bienvenido).
Ahora en serio por favor dejad reviews solo vivo por los revieewwss XD.
Y mencion especial a quien sepa que ocurre en esta historia.