Neon Genesis Evangelion: Las Alas del Corazón

Epílogo: Hacia una Nueva Era

Escrito por: beamknight87

Historia basada en los personajes creados y con Copyright de Gainax.


Año 2025 – Tokyo-3

Era una hermosa y soleada mañana la que iluminaba la histórica ciudad. Ni una sola nube ensuciaba el resplandeciente cielo azul.

Hacía ya seis años desde que la ciudad finalmente fue reconstruida, al contar con el apoyo de casi todo el mundo dado el simbolismo que representaba y los hechos que en ella se vivieron. Se trabajó arduamente a toda máquina, día y noche sin descanso hasta que finalmente la meta se cumplió.

Al contrario de cuando sirvió como una fortaleza, los edificios que la componían ya no estaban hechos de acero reforzado, ni tampoco había edificaciones armadas que sirvieran a modo de intercepción. La razón era porque siempre existía el riesgo de que fueran tomadas bajo control enemigo y también porque simple y sencillamente, semejantes preparaciones ya no eran necesarias.

No gracias al sistema que era capaz de proyectar un Campo-AT artificial en una forma perfectamente esférica, capaz de cubrir la ciudad entera y ser completa y absolutamente impenetrable.

Incluso la topografía del lugar era algo característico de la ciudad, dado que el antiguo Geofrente se había localizado bajo tierra y nadie se tomó la molestia en tratar de reconstruir la ciudad encima de su nivel, las paredes de la gigantesca cueva se habían aprovechado a manera de establecer el asentamiento, como si estuviera resguardado en el cuenco de un valle.

Incluso un lago artificial (como el Ashinoko que en antaño había existido ahí) se había colocado a orillas de la ciudad pero éste tenía una particularidad muy especial. Justo en su centro, una escultura de mármol blanco como la nieve se alzaba orgullosa, mirando al cielo eternamente. Con su figura humanoide y un único ojo dándole la apariencia de un cíclope, era una de las dos imágenes que más representaban a la ciudad, en memoria de aquello que se utilizó para protegerla en el pasado.

La otra escultura ocupaba un lugar igualmente representativo, en el centro de la ciudad se erguía una enorme pirámide, el logotipo de NERV ocupando por completo una de sus caras. Y justo en la punta, se alzaba de forma igual de desafiante, dirigida a los cielos, una réplica en mármol blanco del legendario titán que tantas veces había servido a esta ciudad, cada detalle era exacto: el cuerno en su cabeza; las doce alas gigantescas completamente desplegadas saliendo de su espalda; la lanza con cuatro puntas, dos entrelazadas de cada extremo, sostenida en su mano derecha. La única diferencia con su similar del lago era que unas cuantas partes de la escultura estaban hechas con los restos de la armadura original que aquél guerrero usó en la que fue su última batalla.

No obstante, a pesar de la majestuosidad que Tokyo-3 ofrecía con esas esculturas, lo que consideraba su mayor tesoro se encontraba en uno de los edificios que estaban a las orillas del lago, en un conjunto de departamentos que por fuera no parecían tener nada de especial.

El sonido de la ducha podía escucharse venir desde el interior de uno de los dichos departamentos al estar siendo utilizada para lo que su ocupante realiza cada mañana, como una ceremonia ritual.

De repente, la caída del agua se detuvo y la persona tomó una toalla que estaba colgada convenientemente cerca para comenzar a secarse, el agua resbalando por todo su cuerpo, su corto cabello negro pegándosele a la frente por efecto de la humedad.

Se ató la toalla alrededor de la cintura y se acercó al estante dentro del baño donde colocó sus ropas para prepararse para lo que sería un nuevo día.

Todo con tal de no molestar a la ocupante del dormitorio.

A través del vapor que inundaba el lugar, un brillo en su pecho producto de la luz del Sol que entraba por la ventana resplandeció. No por la humedad que lo rodeaba, sino por algo más.

Una gran cicatriz de color blanca que iba desde su hombro izquierdo hasta la parte derecha de su cintura, atravesando todo su pecho, estaba presente ahí. La herida ya era vieja, pero debido a su gravedad, no había desaparecido y en vez de ello, había dejado una marca perpetua.

Se frotó con fuerza todo el cuerpo con la toalla para secarse y sin molestarse en abrir la ventana o la puerta para dejar escapar algo del vapor acumulado, comenzó a vestirse rápidamente con el traje color azul marino que siempre preparaba cada noche antes de acostarse. Era una necesidad y una obligación estar presentable en el trabajo. Sobre todo en días como éste, cuando se tenía programada otra activación de prueba.

El hombre terminó de colocarse la chaqueta, donde una insignia de color plateado resplandeció por un momento en la parte izquierda de su pecho y de la misma manera, el pendiente con forma de gota de color púrpura brillante que colgaba de su pecho por una cadena plateada también lo hizo. Después, se colocó los zapatos negros como carbón pero elegantemente lustrosos y brillantes. Hecho eso, se dirigió al espejo y disipó la humedad que se había acumulado en su superficie pulida producto del vapor con una mano.

Un par de ojos color azul oscuro se reflejaron en él, saludándolo como cada mañana. Y como en cada mañana, tomó su equipo de afeitar para proceder a la última fase de su rutina de preparación matutina.

Sin embargo, justo antes de tomar el instrumento para la vital tarea, un destello en el dorso de su mano derecha captó su atención y se le quedó viendo un momento. De la misma manera que en su pecho, una marca blanca se encontraba ahí, sólo que ésta era de color circular, justo en el centro de su mano. Girando la muñeca, examinó con atención la palma, donde una herida idéntica estaba presente, con la misma textura brillante. Una única cicatriz que atravesaba tejidos, tendones y nervios por igual, una masa de tejido regenerado que por supuesto, tenía a su pareja. Alzó su mano izquierda y contempló a su hermana gemela, el brillo de la cicatriz saludándolo desde ahí.

Por un momento, se les quedó viendo. Hacía ya mucho que habían dejado de dolerle, a pesar de haberse sometido a varias intervenciones ahí para permitir la recuperación mínima de tejidos vitales, todo gracias a la biotecnología. Nunca había estado dispuesto a usar guantes para ocultarlas y aunque la gente muchas veces se le quedaba viendo cada vez que tenía la mano para saludarla, una sonrisa suya aliviaba la tensión del momento y el detalle pasaba de largo, sin que tuviera mayor importancia.

Dando un suspiro, resumió la tarea para comenzar a afeitarse.


Ahora se encontraba preparando el desayuno en la cocina, moviendo el sartén por el mango como todo un experto mientras preparaba algo sencillo, sólo huevos con tocino y panqués.

No obstante, cuando su mano se dirigió por sí sola sin despegar la vista de la sartén para tomar la sal y sólo sintió su puño asir aire, dio una exclamación ahogada de sorpresa. Frunciendo el ceño, alzó la vista y miró a sus alrededores, en busca del condimento que necesitaba. Moviéndose hacia la sala, sus ojos se enfocaron en algo fuera de lugar.

Un diminuto par de zapatillas azules que se dejaban verdor debajo del sofá.

Dando una sonrisa y moviéndose lo más sigilosamente posible, rodeó el mueble para tomar por sorpresa al responsable del robo.

Quien evidentemente era lo que quería.

Tomándola con ambas manos por los costados, la levantó súbitamente de su escondite, girando y dando vueltas rápidamente, unas infantiles risas alegres resonando por todo el departamento.

Una vez que él mismo se mareó, se detuvo y giró delicadamente a la personita para verla a la cara. Su brillante cabello rojo recogido gracias a un par de moños hacían de ella el vivo retrato de su madre. En su pequeña mano apretaba con fuerza el salero y su rostro aunque alegre, no podía evitar revelar la culpabilidad de su crimen en sus brillantes ojos verdes.

"Kotori... Ya sabes que no debes esconderle a papá las cosas de la cocina. Mami se molesta cuando el desayuno no está listo a tiempo", dijo, en un tono que trataba de ser de regaño, pero falló miserablemente ante la vista tan adorable que su hija daba en sus brazos.

"Aaaahh", dijo la niña, con un puchero, "Sólo quería sorprender a papa". Shinji no podía evitar sentirse sorprendido cada vez que la oía hablar con esa extraña mezcla de japonés y alemán, le daba un acento único. Pero trató de no quedarse embobado contemplándola. Se suponía que tenía que ser una figura ejemplar...

"Ah, veo que ya te vistes correctamente tú sola", dijo, refiriéndose al pequeño vestido azul que llevaba puesto la niña, ante lo cual la chiquilla alzó la frente, tratando de dar un gesto de superioridad que resultaba hilarante dada su corta edad.

"¡Sí!. ¡Yo misma vestí!. ¡Sin ayuda de nadie!" dijo con su voz chillona.

Shinji no pudo evitar dar una risita, en verdad era el vivo retrato de su madre, sobre todo con ese gran orgullo suyo.

El sonido de la ducha corriendo otra vez alcanzó sus oídos, por lo que decidió aprovecharlo. "¿Oyes eso? Mamá ya se despertó. ¿Qué tal si me ayudas a poner la mesa para que podamos tomar todos juntos el desayuno?. ¿Eh?" le dijo con una sonrisa, ante lo cual la niña asintió ferozmente con un fuerte "¡Hai!". Con cuidado, la depositó en el suelo y rápida como un rayo, comenzó a hacer su mejor esfuerzo para cumplir la labor que su padre le había encomendado.

Kotori Ikari Langley. Un verdadero monstruo que con la corta edad de cinco años, nunca parecía cansarse.

Dejando que su vista vagara un momento por la sala, sus ojos se enfocaron en un foto que estaba colgada en una de las paredes. Estaba colocada de tal forma, que era lo primero que veía cada vez que regresaba a casa.

Su foto de bodas con Asuka.

Aún recordaba con emoción ese día. Había sido el mejor de su vida.

Lo que nadie sabía era que Kotori ya había sido concebida para cuando tomaron esa foto, pensó con un sonrisa, sumergido en sus recuerdos.

Luego de que todo el mundo se entero de lo ocurrido aquél fatídico día, había decidido primero que nada terminar sus estudios de la manera más rápida y eficiente posible, pero claro, con Asuka ayudándole a toda hora, incluso graduarse de la Universidad había sido relativamente fácil. Pero la pelirroja le desinfló ese orgullo que sintió cuando sostuvo su diploma en sus manos diciendo que el nivel japonés no tenía nada que hacer a compasión del alemán...

Desde entonces, ambos habían estado laborando para NERV, en espera de que Tokyo-3 terminara de ser reconstruido. Asuka aún como piloto activo y sorprendentemente para él, Shinji recibió el cargo de Teniente. Probablemente fuera debido a su desempeño, pero él sospechaba que más que nada era debido al que era el hijo único de los que fueron los principales miembros de la organización, ya que a lo largo de los últimos tres años, había ido progresando mucho, escalando puesto tras otro hasta finalmente ser la mano derecha de Fuyutsuki como el Subcomandante, siempre haciendo todo lo posible por dar caza a los miembros de SEELE que habían estado cayendo poco a poco de entre las sombras. Después del incidente de hacía ya casi diez años, varios simplemente habían optado por quitarse la vida por su propia mano, pero los demás habían sido muy escurridizos.

Ahora sólo faltaba uno.

No se dejaba engañar, tarde o temprano, con toda la red de espionaje y de información que tenían desplegada por el mundo, el último miembro de SEELE, '01', caería también. Y cuando eso pasara... Fuyutsuki le pasaría la antorcha, podía verlo en sus ojos cada vez el anciano se le quedaba viendo, evaluándolo. La única razón para que él fungiera como el Comandante de NERV era para hacer que SEELE pagara por sus crímenes, tal y como se lo prometió. Una vez hecho eso... no estaba seguro de poder ser el siguiente líder de la organización. El sólo pensamiento de ser el nuevo Comandante le provocaba mariposas en el estómago. Prefería con mucho ser el segundo, había... más espacio para maniobrar.

Pero lo que realmente le daba más miedo era que las circunstancias pudieran llevarlo a hacer algo similar a lo que hizo su padre. No hacía mucho, Fuyutsuki le contó toda la verdad que no quiso decirle durante esa batalla, el cómo su padre había hecho casi lo imposible y probablemente, algo que hubiera sido imperdonable, todo con tal de estar con su esposa otra vez.

Al final el hombre sólo había actuado por amor.

El amor... en verdad un sentimiento a la vez maravilloso y terrible.

Y ahora que compartía una familia... no estaba seguro de qué habría hecho él en el lugar de su padre. Su lema siempre había sido 'sigue adelante, sin mirar atrás'. Pero si las perdiera a ellas...

El perceptible aroma del humo lo hizo darse la vuelta al instante para atender el desayuno y evitar que se le quemara.

Estaba terminando de colocar los platos con el almuerzo servido junto con Kotori cuando oyó unos pasos suaves venir del pasillo. "Morgen", la voz cansada de Asuka se escuchó. Casi inmediatamente, Kotori se lanzó a sus brazos con un fuerte "¡Mama!" y dicha persona recogió a la pequeña en ambos brazos, dando vueltas rápidamente como tanto disfrutaba ella, haciendo su agotamiento a un lado al instante.

"¿Cómo amaneció nuestra princesa hoy? Espero que bien porque te llevaremos a ver a 'Rojo' el día de hoy", dijo con un sonrisa Asuka, a lo cual Kotori contestó con un feliz "¡Yay!" Con eso, colocó a la niña en el suelo, quien rápidamente trepó a la mesa para ocupar su lugar en el comedor.

"Buenos días, mi amor", la saludó Shinji con un beso, el cual ella aceptó gustosa antes de tomar asiento también y como cada mañana, encender la radio.

De igual forma que él, Asuka llevaba puesto su uniforme correspondiente de NERV, el clásico de color café, sólo que la insignia de sus hombros era diferente a la de todos los demás al tratarse de una piloto. El bordado que estaba en el tejido sobre el lado izquierdo de su pecho así lo atestiguaba también, para dejar paso a su nombre: 'Ikari Asuka Langley'. Su largo cabello rojo le caía como cascada sobre la espalda en una única cola de caballo, y sus ojos de distintos colores aún reflejaban algo de cansancio a pesar de que últimamente dormía como una roca, sin duda debido a su condición.

Al menos podía decir a favor suyo que los tres meses de embarazo que tenía casi ni se notaban... todavía.

Aún no habían decidido el nombre si se trataba de otra niña, pero si así era el caso y ésta tenía aunque fuera la mitad de energía que Kotori tenía, estaba seguro que al menos a él las canas no tardarían en aparecerle. Los horrores del ser padre eran bienvenidos para él con todo gusto pero aún así, no dejaban de ser horrores. Recordaba en especial las excursiones al centro comercial a eso de las tres de la mañana por orden de Asuka, quien argumentaba durante el embarazo de Kotori que, "su hija tenía hambre".

Eso al menos aún no empezaba otra vez, pero Shinji calculaba que eso no tardaría en volver a comenzar.

Es por ello que rogaba porque fuera un niño esta vez, dado que prefirieron averiguar el sexo de su segundo hijo a la antigua, además de que ya tenían decidido el nombre si se trataba de un varón.

Kamui.

"¿'Rojo'?" le preguntó, alzando las cejas en interrogación, mientras él también se sentaba a tomar el desayuno.

"Así lo llama, después de todo, ese es el color de la Unidad-02", contestó Asuka encogiéndose de hombros y procediendo a devorar con voracidad su plato.

El EVA-02, nombre clave, 'Suzaku', dado la similitud de sus alas de fuego con la legendaria bestia sagrada que protegía la región del sur, el fénix. Ritsuko y Maya habían hecho un gran trabajo al ser la encargadas en restaurar la máquina hacía ya casi ocho años. Tanto él como Asuka se habían quedado boquiabiertos al ver el resultado de las reparaciones, el EVA prácticamente estaba como nuevo, conservando sus colores originales pero su estructura había sido modificada por completo para adaptarse perfectamente a las capacidades que había ganado gracias al órgano S2 y también al estilo de combate que Asuka manejaba. En resumen, el EVA-02 había revivido de sus cenizas una vez más, más fuerte y hermoso que nunca, muy similar a esa ave mítica.

Y fue casi enseguida que salió a su primera misión.

Recordó con algo de disgusto ese hecho. Aunque NERV ya era un organismo autónomo de la ONU y su principal función era el desarrollo de la biotecnología que se usó en los EVAS pero ahora para fines y aplicaciones humanas (como la regeneración de miembros amputados), además de hacer uso del sistema MAGI para otros proyectos igualmente ambiciosos, como el enigma que aún era el genoma humano o el cerebro ("usamos menos del 2 de ese disco duro en nuestras vidas", decía Ritsuko, quien era la encargada de ese proyecto, segura de que podía ser capaz de descifrar los enigmas de la mente usando como base los datos que habían logrado recolectar de las pruebas armónicas entre los EVAS y sus pilotos), aún estaba bajo amenaza, debido a lo que poseían y probablemente también por una sed de venganza creciente de sus enemigos. En ese entonces, Fuyutsuki había logrado seguirle la pista a dos miembros de SEELE hasta localizarlos definitivamente en Europa Oriental, muy cerca de las fronteras soviéticas.

Se había corrido el rumor de que una nueva producción en serie de EVAS estaba siendo construida.

Asuka al escuchar eso no había perdido el tiempo y saltando a su recién restaurada Unidad, simplemente había salido a toda velocidad desplegando sus alas al máximo y solicitando las coordenadas de dicha locación. Y efectivamente, cuando llegó al punto destinado, fue recibida por dos Unidades nuevas en serie, idénticas a las primeras con las que pelearon.

Pero... por fortuna, esas cosas ni siquiera habían tenido un sistema operativo para que funcionaran, mucho menos un órgano S2. Simplemente las habían puesto de pie para tratar de ahuyentar a Asuka con su vista.

Craso error.

Las instalaciones de ese lugar quedaron reducidas a cenizas en un mar de fuego al instante. El incidente provocó un gran alboroto y revuelo por todo el mundo. Sobretodo por la reaparición del EVA-02 que se creía había sido destruido en ese día del 26 de Mayo del 2016. Lo que ahora en los libros de historia se conocía como "La Gran Batalla de Tokyo-3". Desde ese entonces, el EVA rojo sobrevolaba varias veces a la semana la ciudad, sirviendo como su guardián, así como un arma en caso de que otro país tratara de desarrollar un EVA para fines bélicos, pero por fortuna, eso ya no parecía ser el caso. El desarrollo de las máquinas era en extremo costoso, y sin el equipo técnico adecuado, lento e ineficiente. "Una copia jamás se comparará con el original", decía Asuka con orgullo cada vez que bajaba de su Unidad.

Fue sacado de sus pensamientos por una emisión de la radio con un aire aparatoso.

"Noticia de última hora. Se acaba de confirmar que el servicio secreto británico, trabajando en conjunto con autoridades alemanas, logró la captura del último miembro del tan buscado consejo de SEELE por sus crímenes contra la humanidad. No hace más de treinta minutos, la captura de Keel Lorenz fue un éxito luego de una intensa década de busca desde los sucesos del 26 de Mayo del 2016. Paso con nuestro corresponsal, Hokuto Tatsumiya allá en Berl..." Asuka apagó la radio.

"Bueno", empezó, "debes de estar satisfecho. Con esto, tu ascenso ya está asegurado", dijo con una sonrisa.

Shinji se quedó estupefacto (una expresión en la cara que le resultó muy graciosa a Kotori), aún asimilando la información en su cerebro. Realmente no había esperado que esto sucediera tan pronto, pero dadas las capacidades de los agentes encubiertos que habían enviado a la misión, no era de extrañar. "Supongo que habrá que darles un reconocimiento a Sakurazuki y a Takamichi, veo que no nos equivocamos al enviarlos", dijo a modo de broma Shinji, mientras daba unos cuantos bocados a su plato para ver que Asuka miraba con avidez el suyo. La ración que le había servido a ella literalmente había desaparecido. Suspirando, empujó el plato en su dirección, a lo cual Asuka, sin perder un segundo, lo devoró tal y como al primero.

"¿Segura que está bien que comas tanto? Ya sabes que la prueba de hoy se supone sería para comprobar el funcionamiento del equipo diseñado para el funcionamiento aéreo", dijo preocupado Shinji.

"¡Hmph! No digas tonterías, por tú culpa sabes que ahora debo comer por dos. Además, la verdad no sé para que tenemos que hacer esas pruebas. El EVA-02 por sí solo se basta, tengo la sospecha de que ese idiota de Aida sólo diseña sus nuevas tonterías con tal de fastidiarme", dijo Asuka, frunciendo el ceño, a punto de terminar su plato.

Shinji simplemente sonrió, pensando en ello. Kensuke había logrado lo imposible por lograr unirse a NERV y convertirse en la cabeza del equipo técnico y de reparaciones de la Unidad-02 luego de haber sido expulsado de la Universidad, aunque su amigo argumentaba que era debido a la "incomprensión de los demás hacia él". Aunque lamentaba el no haber podido nunca llegar a ser piloto de un Evangelion, se daba por satisfecho al conocer de pies a cabeza la estructura del EVA rojo, diseñando, modificando y arreglando hasta la más ínfima pieza con tal de que "fuera una obra maestra", según sus propias palabras. Siempre daba la impresión de ser un niño en una juguetería cada vez que realizaba su trabajo.

"¡Yay!. ¿Estará el tío Aida ahí?" dijo Kotori, con evidente expectación y no era para menos. Kensuke tenía la fama también entre NERV por consentir (en exceso, aseguraban algunos, incluida Asuka) a la pequeña, a quien Shinji y Asuka llevaban a NERV cada vez que se hacía la prueba de activación de 'Rojo', como ella lo llamaba.

Los ojos verdes de la chiquilla se abrían llenos de admiración cada vez que veía a la máquina y al final de esos días, marido y mujer charlaban sobre cuándo creían que sería adecuado para ella conocer toda la verdad sobre los EVAS, sobre NERV y... sobre ellos mismos.

"Por supuesto, princesa", le aseguró Shinji mientras se levantaba y comenzaba a recoger los platos para llevarlos al fregadero y lavarlos de inmediato. Era muy quisquilloso cuando se trataba de las labores domésticas. Una vez que terminó, cargó a su hija en su espalda, a manera de caballito, para comenzar a dirigirse a la salida del departamento.

"Sí, lamentablemente...", dijo Asuka con una expresión oscura mientras comenzaba a seguirlos por la puerta.


Al salir del departamento, Shinji fue a revisar el buzón de correo, donde vio con sorpresa una postal desde Tokyo-2 de parte de Touji y Hikari. Junto con ella, una foto de ambos en la fachada de lo que parecía ser el restaurante que recién habían abierto y al que les invitaban venir cuando pudieran darse el tiempo estaba presente. Miró con una sonrisa la foto de sus amigos y notó a Pen-Pen en medio de ellos, su plumaje ya casi completamente gris en la foto, saludando. El pingüino lo había sorprendido no sólo por su inteligencia, sino también por la longevidad que había tenido, aunque desde que Kotori lo conoció, parecía que ya no duraría mucho. La pequeña lo apretujaba con una gran fuerza, como si se tratara de un oso de peluche cada vez que lo veía.

Estaban caminando hombro con hombro, marido y mujer, él con su hija ahora tomada de su mano, cuando tuvo una sensación que no había sentido en más de diez años venir en dirección del Lago Ayanami.

Una sensación que siempre había asociado con la batalla, con el enemigo, aunque la última vez que la sintió fue para una despedida.

Deteniéndose en seco, giró la vista en la dirección desde donde sentía venir la presencia.

Nadie notó que su pendiente púrpura dio un pequeño resplandor muy intenso, no por acción de los rayos del Sol, sino porque parecía tener fuego en su interior.

Ahí, sobre la superficie, vio la figura traslúcida de cinco personas, sonriéndole, todas con una expresión serena en la cara.

Kaji, Misato, sus padres... y Rei.

"¿Qué pasa, papa?" lo distrajo la voz de Kotori, haciéndole bajar la vista por un momento hacia su hija, pero cuando la regresó al punto que estaba viendo de la superficie cristalina del lago, ya no había nada.

Sólo una pluma blanca como la nieve, flotando justo ahí.

Sonriendo, se apresuró a alcanzar a su esposa, quien se había adelantado un poco y ahora se había volteado para mirarlos, con una expresión extrañada en el rostro. "Nada, es sólo que... creí ver a alguien conocido, eso es todo", contestó Shinji con una sonrisa.

Asuka lo miró con su ojo sano un tanto extrañada, pero al final decidió no darle importancia al comentario, "Anda, démonos prisa o llegaremos tarde", lo regañó, mientras se dirigían hacia su auto.

Si alguien hubiera visto en ese momento a la familia, se habría percatado de ese algo que los rodeaba, como un aura que los distinguía de cualquier otra persona. Como si una luz muy intensa estuviera posada justo encima de cada uno de ellos, iluminándolos.

Cualquier habría dicho que parecían ángeles a punto de desplegar las alas de su corazón, para surcar los cielos...

Hacia una nueva era.

Fin

Notas finales del autor:

Ah, nada como escuchar un poco de Utada Hikaru mientras escribo estas notas finales (vale la pena que chequen a la cantante, algunas de sus rolas son muy buenas, como 'Hikari', 'Color's' o 'Tokyo Nights'). Muchísimas gracias a Theblacksun y a BurningFlower por todo el apoyo que me han brindado con su labor de prelectores para toda esta historia, en verdad se los agradezco mucho.

Bueno, aquí está, el fin definitivo de Las Alas del Corazón. Ha sido un largo camino desde que comencé esta historia, originalmente no pensé que llegara a ser tan larga (+200,000 palabras) pero fue creciendo, aumentando, el script original tuvo que sufrir serias modificaciones, capítulos nuevos, sucesos diferentes a los que planeé en un principio, todo gracias a repasar una y otra vez el manga y más de la mitad de los capítulos por escenas, diálogos y descripciones. A pesar de ello, puedo decir que estoy muy satisfecho con el resultado, Evangelion más que un título referente a sus robots, es sobre la psique humana, el autodescubrimiento del interior de los personajes y aunque he de decir que la razón principal por la que me llamó la atención este título fue por sus mechas, espero haber podido dar al menos un introspección de los personajes aceptable en esta historia. Como bien dije antes, LQYAE... fue mi mayor referente para comenzar a escribir esto, pero aunque tengo que decir que es mi historia favorita, el final era demasiado... "color de rosa", vamos, todos los personajes terminaban viviendo felices por siempre (a excepción de Gendo)... lo lamento, pero por mi experiencia en historias, libros, novelas, fics y otros títulos de anime y manga que he tenido la oportunidad de leer o ver, eso no sucede. De lo personajes que murieron en esta historia (Kaji, Kaworu, Misato, Gendo y Rei), la razón para esa decisión fue debido a que tras más o menos analizarlos una y otra vez, me pareció que estaban marcados por la tragedia y un suceso como el que les ocurrió era inevitable (aunque tengo que decir que con Kaworu estuve a punto de hacer algo distinto, la idea original consistía en introducirlo a la historia durante el tiempo en que Shinji estaba dentro de su EVA y al ver la manera de ser de los humanos, rechazar su labor como último Ángel y rebelarse contra SEELE, casi seguramente usando al EVA-03 y ayudar a los otros dos Elegidos en contra de los EVAS series, pero sólo era una idea, no llegó a desarrollarse) y lo menos que podía hacer era tratar de darles el fin más digno que podían tener. Por otra parte, otorgarle un final feliz a Evangelion... creo que es algo que la mayoría deseó ver tras "The End of Evangelion" (no lo niego, gran película, pero el final es un asco, al menos RE-TAKE corrigió eso en gran medida) y fue otro factor de peso para hacerme escribir una versión propia los hechos. De hecho, el mismo doujin de RE-TAKE también fue una gran influencia, al mostrarme por primera vez de forma "oficial" a un Shinji decidido y con convicciones fuertes, luchando por algo en específico, creo que el Shinji de mi historia es un pálido reflejo del que vemos ahí. Finalmente, el otro factor que me hizo escribir esto, más referentemente a toda la batalla con los EVAS series y por ende, buena parte de la historia (Shinji crucificado, Asuka lastimada por la lanza) fue un fic llamado Looking Back, escrito por Dante Abbey, donde vemos a Shinji reflexionar sobre esas cicatrices suyas en sus manos mientras que Asuka habla de un "accidente" en donde obtuvieron sus heridas a modo de explicación para no levantar sospechas hacia sus hijas...

Quizás lo que más lamento es no haber podido incluir a... otros personajes ya que al pensar en ellos, era demasiado tarde para incluirlos, lo mismo sucedió para tratar de darle un desarrollo diferente a algunos (Kaworu), pero con mi siguiente fic, espero poder corregir ese error.

Ha sido divertido, muy divertido escribir esto, principalmente las escenas de las batallas, mostrando la supremacía del EVA-01 hasta el final en casi todas ellas. Este fic también ha sido posible gracias a ti lector, al darme el apoyo para continuar en lo que a veces parecía una ardua tarea, titánica, imposible de hacer, pero se cumplió. Y el final... ¿Habrá más ataques de Ángeles o de seres similares?. ¿Qué futuro le depara a los personajes? Eso te lo dejo a ti lector a tu imaginación, aunque claro, cualquiera puede sentirse capaz de querer hacer una continuación de esta historia para satisfacer a ese universo desconocido que cada uno tiene en su interior llamado imaginación (claro, siempre y cuando si lo quiere publicar solicite mi permiso).

Ahora... lo más probable es que continué con Redención, si han leído lo que está en la red, sabrán que no es el fic convencional y me enfoco a una trama mucho más oscura que en esta historia (o en cualquier otra), pero no pienso tocar el teclado para escribir nada sobre ese fic sino hasta Enero o más tarde, necesito un descanso... (por cierto, si alguien se lo pregunta, el Shinji que vimos al final del capítulo 16 de este fic, ES invencible, su contraparte de Redención no tiene nada que hacer con él) así que... hasta la próxima.

Por cierto, lo olvidaba¡Que pasen unas felices fiestas navideñas y un aún más feliz año nuevo!

Comenzado el 15 de Diciembre del 2006

Terminado el 16 de Diciembre del 2006