Hola!!

Aquí llego, después de tanto tiempo, esperando que no me odiéis mucho por tardar.

Os traigo el último capítulo del año, espero que os guste

Besos

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Diciembre empezó con la perspectiva de dos semanas llenas de exámenes. Los alumnos de séptimo estaban muy nerviosos ya que iban a enfrentarse a los primeros exámenes de preparación para sus EXTASIS. Luego llegaban las vacaciones de Navidad, y con ello la exposición y la visita de los padres

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Hermione se sentía observada. Cada vez que levantaba la vista se encontraba con unos ojos brillantes que la miraban fijamente, inquirientes. Y se estaba cansando.

- ¿Por qué me miras?- saltó, de repente

- Vaya, sí que es verdad que estás alterada

- ¿Y pretendías ponerme nerviosa para averiguarlo?

- Oye, que yo no te he hecho nada- se defendió

Hermione suspiró resignada

- ¿Qué te pasa?

- Nada

- ¿Seguro? Sabes que puedes hablar conmigo- Hermione asintió con la cabeza.

Bajó la cabeza para seguir con sus deberes de pociones y, a veces, levantaba la cabeza para mirar a Crisy, que la observaba preocupada.

"Vale, distráela. No va a parar hasta sacarte lo que te pasa.- se dijo- Pregúntale... lo que sea... ¡Sam!" era un tema al que llevaba tiempo dándole vueltas en la cabeza, pero se había controlado para no preguntar. Aunque le costase.

- Oye, no quisiera ser... entrometida pero... tengo curiosidad. ¿Qué ha pasado con el padre de Sam? Nadie habla de él y bueno, tengo curiosidad- Crisy sonrió

- Me extrañaba que tardases tanto en preguntarlo- Hermione bajó la cabeza avergonzada.- Es una larga historia. La verdad es que no estoy casada. Bueno, desde pequeña siempre había querido ser profesora, ¿sabes? Y soñaba con ir a la universidad a estudiar magisterio. Ya sabes todas esas cosas que se dicen sobre la universidad, ¿no?

- Sí, también era mi sueño, pero sólo por el hecho de ir. Nunca he tenido cien por cien claro lo que quería hacer- Crisy asintió y prosiguió con su historia

- La verdad es que no sabían seguro si sería bruja, porque de niña no había dado muestras de magia y, como mi padre es muggle, dudaban. Pero entonces me mandaron la carta de Hogwarts, y vine a estudiar. Cuando terminé aquí, quise cumplir mi sueño de ir a la universidad, y ahí fue donde conocí al padre de Sam. Robert Barnes. Todo pasó muy rápido, y cuando me di cuenta, estaba embarazada y él se había largado con una barbie, rubia de bote y con tetas de silicona- dijo, dolida- Como es lógico, me deprimí. Y estaba muy avergonzada por haber sido tan estúpida. Pero mi madre fue muy comprensiva y, durante el verano, me obligaba a salir de casa. Me llevaba al parque, hacíamos yoga y sobre todo, íbamos a ver a mi tía Cissy. Yo tenía un concepto malo de ella, que era una estirada, y me caía mal. Pero, de ir a visitarla, tuvimos un acercamiento y le cogí mucho cariño.- Hermione la miraba con la boca abierta de sorpresa.- Sam nació a finales de noviembre y, realmente, no sabía que nombre ponerle. Draco lo escogió.- Crisy sonrió- Luego me insistieron en que siguiese con la carrera de magisterio, ya que sacaba notas bastante buenas. Y bueno, la verdad que me resentí un poco con los muggles, por eso en vez de dar clase en un instituto, vine a dar clases a Hogwarts.

- ¡Guau!- exclamó Hermione. Estaba sin palabras. Había esperado... bueno, realmente no se había planteado nada, pero había quedado muy sorprendida. Y no sabía que decir.

- Sí. Bueno, eso es todo. ¿Me vas a contar que te pasa?

- Yo... no quiero hablar de ello.- Crisy enarcó una ceja- Y además, ni siquiera lo sé.

- ¿Tiene que ver con Draco?

- ¿Qué?- Hermione se sorprendió de que dijese eso.- ¿Por qué piensas que tiene algo que ver con Draco?

- Pues... no sé. Bueno, es mi primo, si pasase algo con él querría saberlo

- Lo único que pasa es que estoy confundida, y eso me pone de mal humor

- ¿Confundida con respecto a Draco?- "¿Por qué insiste tanto?"

- Mi confusión no desembocará en una vena psicópata, tranquila- intentaba esquivarla

- Bueno, como quieres que te deje en paz seguiré corrigiendo trabajos

Hermione asintió volviendo a sus deberes de pociones

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- Hermione, respira. Contigo histérica me cuesta desayunar- se quejó Ginny por milésima vez

Hermione había conseguido arrastrarla a la biblioteca en la hora del desayuno. Tenía un examen de pociones y, como era costumbre, los alumnos apuraban hasta el último segundo para estudiar. Ginny había conseguido salvar unas tostadas de su plato antes de verse irremediablemente condenada a no disfrutar de un tranquilo desayuno

- Pero es que...

- Nada de excusas. Esto está lleno de gente, ¿por qué no estudias con... Neville?- intentó evitar nombrar a Ron y Harry

- Él se pone más nervioso que yo- aludió

- Bueno, yo quejándome no soy de gran ayuda, ¿verdad?

- Pues la verdad es que no

- Bien- corroboró Ginny, alejándose poco a poco- Búscate a alguien para estudiar, alguien de tu curso

- ¡No!- denegó Hermione- Estudio mejor sola

- ¡Pues que se te de bien!- le deseó, antes de desaparecer

Hermione respiró hondo para intentar calmar los nervios, y siguió copiando su resumen

Unos libros cayendo sobre la mesa bruscamente le hicieron pegar un brinco

- ¡¿Pero qué haces?!

- ¿Has estudiado?

- Sí, y tú también, así que deja de dar vueltas y siéntate

Draco se sentó en frente de Hermione moviendo nerviosamente las piernas

- ¿Desde cuándo te pones nervioso por un examen?- no recordaba haberlo visto nervioso nunca

- Desde siempre, solo que tú nunca lo has visto, y como se lo digas a alguien...

- Y si se lo digo a alguien, ¿qué me harás?

- Ahora no tengo tiempo de pensar en eso- sacó sus apuntes y se puso a estudiar

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- Bueno, creo que ha salido bien, ¿no?- le comentó Pansy a Hermione, cuando salieron del examen

- Hasta que no me den la nota no me quiero hacer ilusiones- sentenció Hermione

- ¿Tú qué tal, Blaise?- preguntó, ignorando el cometario de Hermione, que seguro que había aprobado

- Justito

- ¿Draco?

- Igual que siempre

- Lo que viene a ser: "No estoy de humor para comentar el examen"- imitó Pansy a Draco, agravando su voz. Las chicas rieron y Draco las fulminó con la mirada.

Harry, Neville y Ron los adelantaron por el pasillo, después de mandarle una mirada ofendida a Hermione, que bajó la cabeza, dolida.

- Pasa de ellos, son unos niñatos- le recomendó Pansy. Hermione asintió forzando una sonrisa.

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Durante las 2 semanas de exámenes, la tensión era evidente.

Entre los alumnos, nerviosos por sus exámenes.

Entre Hermione y Harry y Ron cada vez que se cruzaban por los pasillos.

Y entre Draco y Hermione.

Aquel acercamiento que habían tenido a principio de curso parecía lejano y difuso. Todo volvía a ser como en los años anteriores, sólo que sin peleas ni insultos.

Ahora, lo que faltaba por hacer, era preparar la exposición de Navidad.

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- A ver- preguntaba Draco por milésima vez- ¿por qué quieres colocar la exposición en el hall?

- Para que así nadie se pueda escapar de verla- repetía Hermione con voz cansina

- ¿Y no va a ser un poco...abultada? Somos muchos alumnos, va a quedar un poco apretado.

- ¿Y dónde sugieres que lo coloquemos?

- Pues por los pasillos

- Sí, y la gente se va a poner a dar vueltas por los pasillos para leer chorradas, ¿verdad?- contestó sarcásticamente

- ¿Chorradas?- Draco se quedó parado- ¿Desde cuando te quejas de los deberes, mandatos de superiores o lo que sea que es esto?

- Creo que desde que le tengo que contar mi vida a todo el mundo

- Eres una exagerada, ¿te lo había dicho ya?

- Hmmm, creo que sí

Se sumieron otra vez en el acostumbrado silencio

- Y... bueno... al final, ¿dónde colocamos la exposición?- lo rompió Hermione

Toc, Toc, Toc, llamaron a la puerta

- Debe de ser Crisy- se levantó Draco a abrir la puerta

Pero estaba muy lejos de ser la cálida visita de Crisy.

Draco recibió a Ron y Harry con una mirada fulminante, y se echó a un lado de la puerta, ignorando sus miradas asesinas, para que Hermione los viese.

Se quedó estática en el sitio. No esperaba recibir esa visita. Respiró hondo preparada para la batalla y asintió, con lo que los chicos entraron y se dirigieron al salón.

- Draco, por favor, ¿nos dejas solos?

- Claro. Un placer.

Cuando desapareció por las escaleras, Hermione se apresuró a preguntar

- ¿Qué queréis?

- No hace falta ser tan desagradable- le recriminó Harry. Hermione ignoró su comentario, ya que los tres sabían que no tenía derecho a pedirle buenos modales

- ¿Me vais a hacer perder mucho tiempo?

- Verás, yo... bueno, nosotros... esto... veníamos a... disculparnospornuestroestúpidocomportamientoinfantil- soltó Ron, de un tirón. Hermione lo miró desconfiada

- ¿Y ese cambio tan repentino?

- Es que... bueno... sin ti las clases son muy aburridas...

- Y no sabemos ni por dónde empezar a estudiar...

- Y nadie hace el chocolate caliente como tú...

- Hermione, te echamos de menos. Nosotros sólo somos dos bobos- admitió Ron- Parece que lo único que hacemos es ocupar espacio. Contigo al menos servimos de algo. De poco, porque no damos para más, pero de algo.

- Nos falta el centro. Es... como el Sistema Solar sin Sol. Por favor, perdónanos. Vuelve con nosotros.

- ¿Vais a seguir controlándome?- preguntó, cautelosa

- Hemos comprendido que no tenemos derecho a prohibirte que entables relación con... seres que nos desagradan a nosotros- explicó, despacio, Ron. Hermione relajó el rostro

- Que si a ti re parece agradable, nosotros no somos quién para meternos en tu amistad con el hurón albino- completó Harry. Se mantuvieron en silencio esperando su respuesta a la disculpa

- Me parece increíble que hayáis podido memorizar eso. Si me lo hubiesen contado, estaría segura de que lo llevabais escrito en la mano- pero no era una agresión. Estaba sonriendo, y los chicos se relajaron.

- Bueno, Ginny se tomó muchas amenazas... digo... molestias, para que no metiésemos la pata.

- Pues creo que le ha salido bien- admitió Hermione, sabiendo lo difícil que habría sido ir hasta allí y disculparse.

Hermione corrió hacia ellos y les abrazó, cortándoles la respiración

- ¡Os he echado de menos!

- Hermione, no podemos respirar- le dijo Harry, con un hilo de voz

- Lo siento- se disculpó

Se quedaron parados un momento, sin saber que decir

- ¿Bajamos a comer?- preguntó Hermione

- ¡Sí!- exclamó Ron. Hermione y Harry le miraron con una sonrisa- ¿Qué? Tengo hambre- se justificó

Riendo, bajaron a comer. Ginny se les unió en el Gran Comedor.

Hubo un momento en la típica charla sobre Quidditch en la mesa de Gryffindor en la que Hermione y Ginny pudieron hablar

- ¿Qué te ha parecido mi guión?- preguntó Ginny, regodeándose

- Un poco exagerado y... humillante, ¿no crees?

- También creo que fue divertido, educativo y una muy buena penitencia- completó Ginny, con una sonrisa

- Eres malvada- Hermione le sonrió

- Gracias

Hermione sintió un tirón en la túnica, y se giró, para encontrar a Sam con su nueva muñeca

- Mya, ¿y Draco?- le preguntó

- Pues...-Hermione dirigió la vista hacia la mesa que compartía con Draco, pero no estaba allí- no lo sé- concluyó- ¿No ha bajado a comer?- Sam negó con la cabeza- Se habrá quedado durmiendo en la Sala Común- Sam asintió

- ¿Me acompañas a buscarlo?

- Bueno- se disculpó con una mirada se sus amigos, que asintieron resignados.

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Bueno, no ha sido gran cosa pero es lo que hay jejeje

Espero que os haya gustado

Feliz Navidad y Feliz Año Nuevo para cuando llegue

Muchos besos

Gracias por leer

OQM