Auror's Academy

Capitulo 5 – Un Primer encuentro Familiar

- Franco!...donde demonios estas?...-Gritaba su gemelo en la puerta de su habitación- Maldita sea Franco!

- toda la academia no se tiene que enterar que me necesitas con tanta urgencia, Draco – siseo Franco

- Por un demonio…mamá…mamá esta en San Mungo! – refuto Draco tragando saliva, con una nota de temor en la voz

- Que!?...- Franco soltó la pregunta, mas no espero respuesta, abrió la puerta de su habitación y tiró sus paquetes dentro, cerro y hecho a correr

- A donde rayos vas? – grito Draco, siguiéndolo

- Donde Ferula Kedavra, vamos donde mama, pero, hay que avisarle…

- tienes razón…

- Por cierto, como lo sabes

Draco, salto los últimos escalones, de la escalera y alcanzó a Franco

- me llego una carta de la elfina…

Doblaron una esquina...

- pero que pasó? – pregunto Franco, mientras derrapaba al intentar detenerse frente a una puerta, regreso y toco la puerta

- no lo se, por todos los cielos! – Respondio Draco – pero sospecho que tiene que ver con papa…-dijo en un susurro

- jóvenes Malfoy…a que se deben semejantes gritos? – pregunto la mujer que acababa de abrir la puerta

- disculpe profesora…pero mi hermano y yo – dijo Franco señalando a Draco y a si mismo– debemos retirarnos, quizás unos días…nos acaba de llegar una carta de que nuestra madre esta en San Mungo…

- ahh…claro…si…me he enterado…- respondio la profesora – pueden ir, pero, solamente esta noche…los sanadores dicen que su madre simplemente necesita descanso.

- bien…en 24 horas estamos de vuelta – dijo Draco y salio corriendo hacia la puerta…la profesora alzo las cejas, mientras lo miraba irse…

- 12 horas…lo entiendo profesora…Supongo que esta al borde del colapso nervioso – dijo Franco señalando a su gemelo…le dirigió una mirada de gratitud a su profesora y corrió para alcanzar a su hermano

- Draco! – vociferó

- mama esta en la 3era planta de san Mungo…supongo que podremos aparecernos en la 5ta planta…

- creo que lo mejor es que vallamos por la red flu…- dijo Franco tomando los polvos de la chimenea

- vamos, Franco…entre mas rápido mejor…solo tenemos 24 horas…- dijo Draco con cara de cabreado

- estamos nerviosos...podemos incindernos…mejor evitemos problemas si? – Dijo su gemelo calmado, ofreciéndole polvos – y por cierto, solo tenemos 12 horas, Ferula-Kedavra dijo una noche, no el día entero…

Draco tomo un poco de los polvos verdes y los arrojo a la chimenea:

- San Mungo. - murmuro segundos antes de desaparecer…

- Franco? – llego una voz desde la escalera

- Emily…-respondio el chico girándose

- a donde vas?- pregunto la chica parada frente a el…

- Mi madre esta en san Mungo…nos llego una carta del elfo…quiero verla…- tomo las manos de la chica entre las suyas- pero principalmente quiero saber que paso…

- entiendo…- sonrió la chica – cuídate y regresa pronto – se puso de puntilla y le dio un beso en la mejilla…el chico le devolvió la sonrisa, le soltó las manos, tomo de los polvos flu, los arrojo a la chimenea y entro en ella, diciendo algo en voz baja…

(N/A lo se…estoy metiendo mucho de estos 2…pero no puedo evitarlo…son tan lindos!.. y los necesito juntos…como sea)

- por que has demorado tanto? – Pregunto su idéntico- estaba a punto de regresar a buscarte…

- me entretuve…con…algo…- respondio...

- subamos, estamos en la recepción… - comunico Draco

- señor...señores Malfoy? –pregunto una chica en el mostrador

Ambos gemelos se giraron rápidamente, para quedar frente a una chica castaña de unos 19 años… que tenia una expresión confundida

- si? – pregunto Draco

- su madre esta, en el tercer piso, sala Emeline Bandurns, pero me dijeron que si aparecía…aparecían les entregara esto…- y le tendió lo que parecía una carta sellada, que Franco tomo en sus manos…

- Gracias,- murmuraron y ambos chicos se alejaron mientras el mayor, Franco, abría la carta…

Se ha abierto una investigación por la tortura de su madre.

La hermana de esta, la encontró tirada en la biblioteca de la mansión, inconsciente

Y junto a ella estaba

Un anillo con el relieve del escudo de los Malfoy…

Temo decirle que su padre, Lucius, ha escapado de azkaban, no sabemos como

Pero se las arreglo para llegar hasta su madre,

Y seguimos sin saber el motivo por el cual la torturó…

Malfoy, esta en peligro tanto usted, como su madre, en cuanto

Se recupere, será trasladada a un lugar seguro, usted estará a salvo

En la academia, pero le pido discreción…sabe que es apreciado

Por lo que hizo en la guerra, si necesita algo, tiene algún tipo de información,

O si tiene alguna inquietud, no dude en venir a mi oficina…

Atte.:

Kingsley Shakebolt

Ministro de Magia

Draco tomo la carta en sus manos y la arrugó en un puño...- Lo sabia…papa esta tras todo esto…ha logrado escapar, maldita sea!

- Vamos, Draco, vallamos a ver a mama…y creo que luego deberíamos ir a ver a Shakebolt…debemos averiguar que fue lo que realmente paso – dijo Franco apretando los puños antes de arrebatarle la carta a su hermano y guardarla en su tunica…si antes odiaba a su padre, ahora lo odiaba aun mas…le aborrecía…le mataría si tuviese la oportunidad… además... ¿que hermana?, obviamente no era Bellatrix, pero ¿desde cuando mama volvía a tener contacto con Andrómeda¿o es que tenia otra hermana? De todas maneras, secretos era lo que mas sobraba en la familia Malfoy

Draco, asintió y empezó a subir las escaleras hasta el tercer piso, Franco le siguió, luego de un rato giraron hacia la derecha, y frente a ellos se hallaba la puerta a la sala Emeline Bandurns.

Draco abrió la puerta, frente a ellos se hallaban 2 hileras de camas, casi todas solitarias, y al final de la primera hilera, Franco reconoció a su madre, aunque estaba muy cambiada…

Sus rubios cabellos, no eran mas que la sombra de lo que alguna vez fueron, sus antes Radiantes cabellos, estaban ahora, sucios, sin vida…si su piel nunca había sido bronceada, ahora estaba mas blanca que nunca, se hubiera podido confundir con la nieve si la hubiera tenido junto a ella…

Ambos chicos se acercaron a su madre, Franco no pudo evitar dibujar una lúgubre sonrisa, su madre, una bella mujer, ahí postrada en la cama, con unas cuantas arrugas, que sospechaban que nada tenían que ver con la edad, sino con uno que otro encuentro con la varita de su esposo o quizás de una que otra preocupación

Draco, tomo la mano de su madre entre las suyas, mientras tomaba asiento en un banco junto a la cama…

Franco se quedo de pie, viéndola respirar suavemente, en eso la puerta del salón se abrió y por ella entro una sanadora…

Una chica de cabellos chocolates claros, que a Draco le hubiera sido familiar si hubiera volteado a ver…

- buenas noches. – Saludo la sanadora.- mi nombre es Katie Bell, y soy la sanadora en turno…

- Bell…Tiempo sin verte.- inquirió Draco con la vista fija en su madre…reconociendo el nombre de la chica

- no eres alguien de quien puedo decir estoy complacida de ver, Malfoy, no después de que casi me matas, - dijo la chica, con tono rencoroso – pero, este es un asunto meramente profesional, así que te tomare como un familiar de mi paciente, no como el ser despreciable que eres…

- lamento, lo que haya ocurrido con mi hermano en el pasado, señorita Bell – inquirió Franco – Franco Malfoy – agrego tendiéndole la mano, la cual la chica estrecho…- Podría decirme como se encuentra? – dijo refiriéndose a su madre

- Esta estable – explico la sanadora – al parecer no fueron muchas maldiciones, pero si muy potentes, y hemos corrido con la suerte de que ha sido transportada rápidamente…

- De que maldición estamos hablando en concreto? – pregunto Draco

- De la maldición Cruciatus…- la sanadora abrió su capeta de notas de la pacientes y leyó - calculamos que máximo unas 7 seguidas…si hubieran sido mas, probablemente no estaría ahí…

- No, seguramente no…- corroboro Draco…

- despertara? – pregunto Franco acariciando la mejilla de su madre…

- dentro de una media hora…- dijo la chica – esta sedada, pueden quedarse cuanto gusten, quizás demore un poco en reconocerlos, o en enfocarlos bien, es de esperar…si necesitan algo, solamente toquen ese botón de allí,- termino señalando una protuberancia en la mesilla…y sin mas se fue a revisar a los otros pacientes…

- así que intentaste matar a esa chica? – preguntó Franco, enmarcando una ceja

- No precisamente…- respondio Draco con la mirada fija en su madre…- intentaba matar a Dumbledore…

- Dumbledore?...supongo que intentabas salvarla…- dijo Franco, refiriéndose a su madre

Draco lo sabía…cerro los ojos…

- si – respondio, - papa metió la pata, el señor tenebroso quería venganza…me uso de por medio, pero no era lo suficientemente importante para siquiera mandarme a matar, así que me encomendó algo completamente imposible…obviamente, si yo fallaba a parte de matarme a mi, mataría a mama también, dudo que a papa, era uno de sus favoritos después de todo…

Draco se dedico a contarle a Franco, las formas en las cuales había intentado matar a Dumbledore, y en el camino como había dicho la sanadora, Katie Bell, casi matarla…

- Un collar? Draco, si lo hubieras colocado correctamente, lo hubieras logrado sabes? – dijo Franco

- si pero ahora estaría en azkaban – dijo una voz femenina. Cargada de somnolencia.

- Mama! – gritaron ambos – como estas? – interrogo el mayor tomando una mano de su madre, la que su hermano no sostenía, entre las suyas

- Creo que ayer me veía un poco mas joven – dijo con una sonrisa, parpadeando un par de veces, Franco sonrió, mas Draco se escondió tras una mascara de frialdad, típica de el.- Franco, Hijo, me alegra verte…- dijo Narcissa Malfoy abrazando a su hijo mayor…

Draco soltó a su madre, se puso de pie y se paro junto a la ventana…

- Draco, mi niño, hace mucho que no sabia de ti…donde estabas?

- Estudiando, madre – respondio el chico con la mirada perdida por la ventana…no podía evitar sentirse celoso de cómo trataba su madre a su hermano…

- y tu, Franco cuando regresaste de Bulgaria? – cuestionó la mujer con los ojos vidriosos

- hace unas de semanas, madre

- cuando te escribí ¿estabas aquí? – pregunto la mujer perfilando una ceja…

- si, tenia 2 semanas de estar aquí… - respondio Franco con una astuta sonrisa

- y cuando regresas? – cuestiono fríamente la rubia, parpadeando nuevamente

- no regresaré a Bulgaria, también estoy estudiando…

- fue una sorpresa, en el momento no tan agradable, pero estamos estudiando juntos…- menciono Draco en la misma posición que tenia minutos antes..

- y que es lo que tanto estudian?

Franco Sonrió ampliamente, en una sonrisa que estaba cargada de una emoción y se podría decir que hasta un tanto angelical…y su madre, abrió los ojos como platos de repente, comprendiendo algo…

- Aurores!? – Cuestiono más para ella que para sus gemelos – tú querías ser auror, me lo dijiste – señalo a Franco – y si están estudiando juntos, pues tú también serás auror – termino señalando a Draco

Él se dio vuelta lentamente, y simplemente asintió…

- siento no haberlo dicho antes, pero, quería que fuera una sorpresa llegar acá, pero el tren se retrazó…y cuando me encontré a Draco, he de aceptar que las cosas se pusieron difíciles – dijo el mayor de los gemelos

Draco se carcajeo un rato…

- si – dijo – Franco llego a intentar imponer su autoridad en mi vida…

- Tienes cierta fijación con eso de la sangre. Acéptalo, necesitas mirar mas allá de un apellido – dijo Franco cambiando a un semblante serio, Draco penso que era por como trataba a Granger…

- Debemos hacerlo, hijo – dijo la madre de los chicos.

- Que sucedió? – pregunto Franco yendo al grano. Y Draco se enderezo y borro su sonrisa, mostrando nuevamente su semblante frio

- a que te refieres? – pregunto desconcertada su madre

- al ataque. Obviamente – atajo el mayor-

La Rubia se movió incomoda en la cama

- y no creas de que escaparás de responder, madre – dijo Draco con una mirada amenazadora

- bien, fue su padre…

- eso lo sabemos – respondio el rubio menor.

- Andrómeda estaba contigo, mamá? – pregunto Franco

- Andrómeda? – cuestiono su gemelo

Su madre asintió – Andrómeda, estaba en casa, si

- que hacia allí? – pregunto Draco

- Eso es asunto de tu tía y mío, Draco…

- Es tu contacto con la Orden del Fénix, verdad? – cuestiono astutamente Franco – la tenias cerca para cualquier eventualidad, pero no estaban en la misma habitación cuando el ataque…

Su madre lo miro, largamente, sopesando las palabras de su acusación, luego de un rato, asintió lentamente

- Si…desde que Draco, traiciono, a su padre, a Bellatrix y al mismo señor tenebroso, actué como espía para la orden del Fénix, sabes, que nunca estuve de acuerdo con mi familia, o con su padre- dijo señalándolos a ambos con un gesto de la cabeza – pero, lo amo, y no puedo abandonarlo…

- entonces, Lucius, te descubrió – dijo Draco

- al parecer se dio cuenta en azkaban…- respondio la rubia con la cabeza gacha – su tía estaba buscando algo en su habitación cuando su padre se apareció en la biblioteca donde yo estaba…

- Vino por venganza – susurro Franco – te advierto, madre, que ésta, Lucius Malfoy, me las pagará – agrego suficientemente alto, con una nota amenazante en la voz- me las pagara caro, y no descansaré hasta verlo pudriéndose en la celda mas inmunda de Azkaban, es hora de que pague todo lo que ha hecho – terminó saliendo de la sala donde estaba su madre, dejando a un hermano inexpresivo y a una madre sorprendida.

- no lo permitas, Draco por favor, - Rogó su madre – no dejes que tu hermano cumpla su venganza – agrego agachando la cabeza nuevamente

- lo siento madre, no puedo cumplir con lo que me pides, - respondio Draco altivamente – estoy totalmente de acuerdo con Franco, tiene que pagarlas todas de una buena vez…

- Por Merlín, Draco, es su padre – hablo en un gritito Narcissa

- Estrella era su hija – Grito Draco – nuestra hermana, y el…No dudo ni un instante en matarla, simplemente por que el imbecil del mestizo, creía imprudente tener una bebe.

Narcissa tenia lagrimas en sus grisáceos ojos, si era cierto, Lucius había matado, a su hija, a su bebe, a Estrella, porque Tom Sorvolo Riddle, les había dado entender que un bebe, era una estupidez, una insensatez.

- Franco nunca se le perdonó, jamás lo hará…- dijo Draco – y yo tampoco, madre…

Draco, salió de la sala Emeline Bandurns, y se encontró con un Franco, de mirada perdida, con el odio reflejada en ella.

- Creo que debemos dejarla descansar un poco – susurró Draco

Franco sacudió levemente su cabeza y lo miro, sin rastro alguno de aquella mirada cargada de odio.

- vamos a ver al ministro…

- Kingsley¿Para que? – pregunto Draco

- quiero que encuentren lo mas rápido posible a Lucius, quiero que se pudra en azkaban, y quiero venganza…- murmuró Franco.- y Shakebolt es mi boleto para lograrlo…

Draco poso su mano en el hombro de su gemelo

- también quiero a Lucius de vuelta en azkaban, pero, no vale la pena molestar a Kingsley si no tenemos algún tipo de información de donde podría estar escondido…o que pudiera ser útil para encontrarlo – dijo astutamente el menor de los hermanos…

- bien, entonces regresemos a la academia, nada hacemos aquí. – casi grito Franco mientras se acercaba a las escaleras, Draco se quedó de pie unos segundos, viendo ir a su consanguíneo

- "cuan diferente hubieran sido las cosas, si hubiéramos logrado escapar con Andrómeda, como se lo propuso a nuestra madre…quizás, hasta Estrellita estuviera con vida" – Pensó el rubio bajando también las escaleras.

Franco le había contado una vez, en la academia, que Andrómeda, su tía, le había ofrecido a su madre, Narcissa, que tanto ella, como sus hijos, Draco, Franco y la recién nacida Estrella, escaparan a un refugio que prepararían para ellos, la orden del fénix junto con Dumbledore, pero que Narcissa se había negado rotundamente a abandonar a Lucius…

Cuando llego frente a la chimenea, no habia ni rastro de Franco…

- Malfoy – dijo una voz

- si? – se giro el rubio buscando – Bell, dime a que se debe el placer? – pregunto astuto el chico. Haciendose sabedor de que la chica le aborrecia

- Placer? No me hagas reir Malfoy…- dijo elevando una ceja la sanadora – no…venia a pedirte que le entregaras esto a tu hermano…- termino tendiendole un pergamino, fuertemente atado.- ni intentes leerlo, Malfoy, solo tu encantador gemelo puede hacerlo

- y que te hace creer que se lo entregare, Bell? – pregunto el

- eres demasiado entrometido, querras entregarselo a tu hermano, que lo abra y te diga que contiene…- susurro la chica

Draco, disimulo muy bien lo sorprendido que estaba, si, eso era precisamente lo que haria, pero jamas lo aceptaria frente a la ex Gryffindor.

-no Bell, se lo entregare, por que estoy de bastante buen humor – dijo tomando el pergamino y guardandolo en el bolsillo de su capa.- nos veremos cuando des de alta a mi madre.-murmuro al darse la vuelta

- espero que no. Malfoy – dijo la chica desapareciendo por el pasillo

Draco hizo un fallido intento de abrir el pergamino, al no lograrlo suspiro y se introdujo en la chimenea.


Siento la demora, el colegio está de locos, espero que les haya gustado esto...

nos vemos en el prox. capitulo