Okis, perdón por mi torpeza. Aquí les traigo el legítimo cap, sin errores ehh n.ñ... es que aún no me se desenvolver muy bien por aquí y el cap me salió sin las tildes y/o se comía letras y traducía otras... . woo k mareo, en fin espero k ahora lo lea mas gente y me dejen reviews, k no fue mi culpa u.u es k soy una torpee con la compu ú.ù, xao X3
_*Comienzo*_
Parece un día como otro cualquiera en un planeta conocido como Mobius, todo se veía muy tranquilo. El sol comenzaba a asomarse por el horizonte iluminando un extenso territorio en el que una pequeña ciudad rodeada de varias colinas se levantaba sobre la llanura a unos escasos cientos de metros de la costa. Parecía que la actividad en Hill city empezaba a aflorar lentamente con cada rayo de sol que este les ofrecía.
No muy lejos de allí, a varios kilómetros de la costa una hermosa isla flotaba imponente unos cuantos metros sobre el nivel del mar, la Angel Island. Sobre un templo en ruinas se hallaba la Master Emerald que reflejaba los rayos del sol haciéndola más brillante aún. Recostado sobre una de las gradas del templo una figura familiar obserba con nostalgia el cielo que se iluminaba poco a poco. Era Knuckles el equidna rojo pero ahora parecía algo más crecido y con el pelo más largo. Llevaba una sudadera sin mangas de color verde, unos pantalones pirata azul oscuro algo rotos y desaliñados y sus zapatos de siempre.
- Vaya... parece que las viejas costumbres no se olvidan, ¿eh?- dijo mientras se incorporaba lentamente y dirigía su vista hacia el árbol que estaba detrás de él.
- Oh cariño no seas tan desconfiado, solo quería saludarte.- le respondía una voz femenina desde la rama de aquel árbol.
Después, en un instante la silueta se deslizó hacia el equidna y se detubo enfrente de él. La luz dejó al descubierto a una murciélago de pelaje blanco bastante atractiva. Ya no llevaba aquel traje negro que siempre bestía, ahora llevaba un top negro de tiras que le dejaba al descubierto el ombligo, en el cual tenía un piercing con una piedra muy pequeña y transparente, en el pecho tenía dibujado un corazón rosa, los pantalones también eran negros y cortos hasta los muslos. Se había dejado crecer el pelo hasta los codos, ondulado y blanco como la luna. Un flequillo de pelo le tapaba uno de sus ojos verdeazulados y le daba un toque algo sexy. Lo que no había cambiado eran las botas que siempre llevaba y sus guantes blancos.
- ¿Qué quieres ahora Rouge?- le contesta el equidna sin mucho interés mientras se voltea y camina hacia la esmeralda.
- Solo vine a saludar. Veo que aún sigues guardando ese trozo de pedrusco.- le dice Rouge con tono molesto.
- Te recuerdo que ántes te morías por tener este "trozo de pedrusco".- le recuerda Knuckles con algo de sarcasmo.
- Eres tan borde como siempre, siempre estás ocupado vigilando esa piedra y ya no me haces ni caso. Al menos podrías salir de vez en cuando.
- Lo siento pero no puedo. Últimamente la esmeralda está algo rara, así que no tengo tiempo para distraerme.
- Tu cabeza es la que está rara, siempre encerrado en estas ruinas con un pedrusco como compañía.
- Entonces imagino cómo estará la tuya al venir a visitarme todas las noches.- la cortó con un tono pícaro.
Rouge se ruborizó un poco y desvió la mirada. Con el tiempo Knuckles había aprendido a no caer en las provocaciones de ella y a enfrentarla sin perder la compostura, aunque a menudo conseguía sacarle de sus casillas.
- De acuerdo, tu ganas me iré de aquí si es lo que quieres.- contestó Rouge desinteresada, y se giró para marcharse volando.
- ¡Espera...!- exclamó Knuckles al verla casi despegar.
- ¿Por qué? Ya me has dejado plantada un montón de veces y encima tienes la cara de pasar de mi y no pedirme perdón.- le dijo Rouge mosqueada.
- Pe.. pero yo...-
- Nada de peros, ya estoy harta de que prefieras más estar aquí que conmigo.- refunfuñó ella.
En seguida Knuckles se sintió avergonzado por su actitud y mirándola con arrepentimiento dijo:
- Vaale, lo siento. Te prometo que te lo compensaré. Mañana por la noche en la cafetería de Vector, yo invito.
Rouge se quedó pensativa un momento y contestó:
- De acuerdo, pero que no se te olvide esta vez.- y diciendo esto alzó el vuelo y se alejó de allí hacia la pequeña ciudad.
Mientras a varios kilómetros hacia el oeste de Hill city donde se extendía un enorme y frondoso bosque la luz del alba penetraba entre los árboles hasta una rama donde reposaba plácida y despreocupadamente un erizo de púas azules. También él había crecido bastante y sus púas eran más largas que antes. Llevaba una camiseta blanca con las mangas rojas, en el pecho había dibujado una espiral azul de la cual sobresalían varias púas, pantalones cortos de color rojo y sus zapatillas rojas y blancas.
Conforme la luz entraba por entre las hojas algunos rayos le llegaban a la cara despertándolo de su profundo sueño, dió un gran bostezo y empezó a estirarse para desperezarse y a abrir los ojos vagamente. El cielo estaba despejado y solo unas pequeñas nubecitas y pájaros que volaban por ahí perturbaban su inmensidad.
- (Inspiración) ¡Ah...! No hay nada como un día tranquilo.- suspiró él. - Sin preocupaciones, ni recados con Amy, ni Eggm...-
Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando a lo lejos se escuchó un estruendo que parecía ser el ruido de un motor de grandes dimensiones. Sin más demora una nave gigantesca atraviesa el cielo a toda velocidad en dirección hacia la ciudad sacudiendo las ramas de los árboles a su paso.
Al llegar a la ciudad la nave se detiene y se oye un ruido de megáfonos que comienza a decir con una voz rasposa y hueca:
-¡Jajaja! ¡Si, soy yo de nuevo, el incomparable Doctor Eggman!- dice riendo diavólicamente.- ¡Si no se rinden inmediatamente haré que toda la ciudad vuele en mil pedazos!
Ante tal amenaza toda la gente que había salido a la calle comienza a correr desconcertada y espantada. Mientras, Sonic sigue en su árbol tumbado y diciendo para sus adentros con fastidio. -"Bah... creo que hablé antes de tiempo"- Y dando un salto baja del árbol y comienza a correr a toda velocidad atravesando el bosque en dirección hacia la ciudad.
- Jejeje, ese erizo ingenuo seguro que se quedará impresionado cuando vea de lo que es capáz de hacer mi Super Egg Air-747, esta vez seré yo el que gane la partida.-
- Eso es lo que dice siempre doctor, pero siempre acabamos volando por los aires- Interrumpe Deccoe.
- Tienes razón, si al menos creara un invento que sirviera de algo valdría la pena.- Afirma Boccoe.
- ¡¡SILENCIO!! ¡Basta de decir tonterias y cargad las armas!-
- ¡Si doctor, enseguida doctor!- responden sobresaltados y en un momento se ponen a teclear en el panel de control.
La nave tenía la forma del cascote de un barco y era de color gris metálico de varias tonalidades, en los laterales superiores tenía un par de alerones articulados y en la parte inferior habían dos granes motores de turbina también móviles. La cabina estaba justo en el centro superior de la nave.
De pronto Bokkun da la voz de alarma.
- Doctor ahí viene.
- Muy bien panda de hojalatas, ¡Fuego!
De pronto cientos de compuertas se abren por toda la nave y un aluvión de misiles, láseres y cañonazos empiezan a llover sobre Sonic, quien los esquiva ágilmente sin mucho trabajo.
-¡Grrr...! Maldito erizo estate quieto de una vez.
Sonic le sonríe desafiante.
- Cuando amanece la gente suele decir buenos dias.- se burla mientras esquiva otra tonga de misiles.
Cerca de allí a la misma altura Rouge volaba observando el espectáculo.
- Mira que es cabezota ese Eggman, no se cansará nunca de recibir palizas.- y se aleja hacia el este de la ciudad a un pequeño barrio con edificios de apartamentos.
La pelea entre los dos sujetos no parece llegar a nada. Eggman lanza misiles sin parar pero ninguno da en el blanco, y Sonic intenta llegar hasta la nave pero esta está muy alta. Un rato después Sonic parece cansarse y comienza a darle puñetazos a los misiles para desviarlos hacia la nave, pero de pronto Eggman aprieta un botón en su panel y una especie de campo magnético los destroza ántes de impactar contra él.
- ¡Jajaja...!¿De veras crees que podrás derrotarme esta vez Sonic? Pues te advierto que ahora seré yo quien ría el último.
- No me digas, esto es solo el calentamiento.- dice intentando sonar normal.
Sin mediar palabra Eggman lanza más ataques que Sonic golpea y esquiva con menos entusiasmo que antes. En un momento dado el erizo se cansa del juego y salta hasta el tejado de uno de los edificios.
- ¿Qué te pasa Sonic, no te gustan mis regalitos?- le dice con un tono burlón.
- No gracias, no es de mi talla.- le contesta Sonic con una sonrisa.
- Pues te daré algo que seguro te va a encantar.- Pero antes de que Eggman pudiera lanzar otro ataque un avión pequeño y veloz se cruza delante de él preparándose para atacar.
- No estoy de humor cuando me despiertan por la mañana tan temprano.- le dice desde la cabina un tanto molesto un zorro amarillo de dos colas.
No se había quedado atrás, él también había pegado un estirón. Llevaba una camiseta azul cielo con las mangas blancas, en el centro tenía el logotipo de dos colas amarillas; pantalones vaqueros de un tono marrón oscuro y sus zapatillas blancas y rojas.
-¡Tails llegas justo a tiempo!-
-¿No creerías que te ibas a divertir tu solo, no?- dice mientras dispara algunos misiles hacia la nave de Eggman. Los misiles chocan con el escudo sin aparentes resultados.
- ¡Jajaja.. esta vez vengo preparado para todo lo que me echeis! ¡Jamás conseguireis atravesar este escudo super reforzado!- Alardea confiadamente.
Tails muestra una sonrisa de satisfacción y dice.
- Bueno, creo que va siendo hora de probar los nuevos ajustes que le hice al Tornado X.- y apretando un botón en su cabina una compuerta en el inferior del Tornado X se abre y aparece el orificio de un cañón que absorbe energía rápidamente y la concentra en una esfera que lanza segundos después hacia la nave. La esfera de energía choca contra la barrera y la hace desaparecer dejando la nave al descubierto.
-¡Bien Tails,ahora me toca a mi!-
-¡Entendido!- el zorro le lanza un anillo mágico a Sonic que lo agarra de un salto.
Tails se acerca a Sonic y este salta sobre el avión para coger impulso y dirigirse hacia la nave. En el aire se enrosca y comienza a girar a toda velocidad hasta que impacta contra el cascote del armatoste quebrándolo por la mitad.
- Do... doctor, creo que tenemos un problema.- tartamudea Deccoe exaltado.
¡¡CRASH!! la nave se parte y el erizo la atraviesa. Le sigue un inmenso "¡¡CABOOM!!" y sale despedida en millones de pedazos.
-¡Sabía que esto pasaría, es humillante!- Se lamenta Boccoe.
-¡¡Callad malditas latas de conserva!! Grrr... ¡¡Me las pagaras Sonic, algún día me vengaré!!- Y desaparece en el cielo con su navecita de siempre.
-¡¡Viva nuestros héroes, vivaaaaa!!- Aclama la gente aplaudiendo.
De pronto de entre la muchedumbre aparece Cheese y comienza a revolotear alrededor de Sonic y Tails gritando "chiu chiu" de felicidad. Abriéndose paso a través de la gente aparecen Cream y Amy que se dirigen a Tails y Sonic simultáneamente. Ambas al igual que ellos también habían crecido bastante: Amy aún se ponía su diadema roja y se había dejado crecer un poco más el pelo, llevaba puesto una camiseta de manga larga de color rojo y una falda cortita del mismo color. También sus botas rojas y blancas haciendo jueco con el resto de su vestimenta . Cream tenía un vestido naranja con una raya amarilla en la cintura y con un dibujito de Cheese bordado en el pecho, aparte de sus zapatos naranjas y amarillos a juego.
- ¡Habeis estado fantásticos!- exclaman con brillo de admiración en sus ojos.
-Bah... tampoco fue para tanto.- se jacta Sonic.
- Si, tiene razón. Eggman está a años luz de derrotarnos.- le sigue Tails.
- Pero aun así yo estaba muy preocupada por ti.- dice Amy aferrándose al cuello de Sonic.
- Vale ya Amy tranquila, quitate de encima que me ahogas- contesta asfixiado intentando zafarse.
- Bueno, Eggman se ha llevado otra buena paliza. Esperemos que no nos moleste de nuevo- dice Tails poniendo el tornado en marcha.
- No lo creo...- dice Sonic sin interés -pero estaremos preparados.- exclamó con una sonrisa.
-!!Grrrr...¡¡ ¡¿Cómo ha podido ese erizo derrotarme de nuevo?! ¡Tengo que dar con la forma de desacerme de él de una vez por todas!-
-Si se empeñase más en crear inventos que funcionasen bien en vez de lamentarse tanto no tendria que pasar por esta humillación todos los días- le recuerda Deccoe.
-Shhhh.. no le hagas enfadar más de lo que ya está o acabaremos en la chatarrería.- le susurra Boccoe.
-No, Deccoe tiene razón. Ya estoy más que arto de que siempre hagamos el ridículo.- declara Bokkun.
Eggman comienza a dar vueltas por su laboratorio ojeando la inmensa pantalla y tecleando en su computadora.
-Necesitaré crear máquinas mejores para acabar con él... solo tengo que ajustar esto... y esto otro...-
De pronto, los disquetes que tenía apilados a un lado de la mesa se caen y cuando se agacha para recogerlos encunentra un pequeño disquete que no había visto nunca antes escondido debajo de unas rendijas en el suelo. Se agacha para recogerlo y al observarlo ve que tiene pegada una etiqueta que pone algo, pero está borroso.
-Mmm... ¿qué es esto? Parece un código o algo así- dice examinando el extraño disquete mientras se acaricia el bigote algo dudoso.
Por curiosidad decide meterlo dentro de su computadora para escanearlo y averiguar qué contenía, pero cuando lo hace la computadora empieza a emborronarse y aparecen muchos dígitos y claves que cubren la pantalla por completo. Eggman se queda perplejo, "¿qué era todo eso?" pensó. Podría ser que el disquete estubiera estropeado, a fin de cuentas se veía bastante viejo. Al instante la pantalla se torna negra y aparece una sección en el centro que pone "introduzca la clave", Eggman se queda pensativo.
- Conque una clave, ¿eh? Mmm... veamos cual puede ser.-
Eggman teclea varios códigos pero ninguno da resultado, cuando de pronto le viene a la cabeza alguien.
-Mmm... probemos con M-A-R-I-A - dijo tecleando la clave. Al instante soltó un ¡JA! y sonrió exageradamente al ver que el archivo se abría y podía entrar. Comenzó a buscar entre los archivos que habían pero ninguno era de su agrado. En un momento dado se sorprendió cuando observó en un archivo que ponía "planos secretos". En él se indicaban los lugares en los que su abuelo Robotnik tenía ubicadas varias bases en las que había estado experimentando y creando sus inventos. -Mmm... puede ser interesante.- Más cuando comieza a inspeccionar lo que allí se encontraba suspiró con una cara de decepción. Sólo habían planos de vehículos, naves de proyectos y varios planos sobre máquinas experimentales aún sin acabar que parecían poco útiles. Ante esto solo suelta un suspiro.
- Bah... esto no tiene nada que me sea de utilidad.
-Mire doctor, ahí abajo hay uno que no ha mirado todabía- le señala Bokkun.
-¿He? que extraño, pone "alto secreto"- dice confuso. Pero al abrirlo aparece una especie de videoconferencia en la que se puede apreciar con dificultad la silueta de Robotnik
-¡¿Abuelo?!- dice sobresaltado. La conferencia comienza:
-Este es mi archivo secreto... Aqui se encuentran mis mayores logros tecnológicos que he creado hasta ahora ante... (...)- se entrecorta y vuelve a verse de nuevo. -(...)durante varios años. He estado durante todo este tiempo encerrado en mi laboratorio secreto creando los planos de varios de mis prototipos para las personas que me contrataron que se encuentra escondido... (...)- se vuelve a cortar y, al rato regresa -(...) oculto detrás de la computadora principal. Allí se encuentran mis mayores creaciones jamás inventadas... (...)- se vuelve a cortar y esta vez no parece volver.
_¡Aahh no!- se sobresalta Eggman, pero la computadora se emborrona de nuevo y aparece una señal que dice -"datos defectuosos, datos defectuosos" terminando por apagarse. Eggman enfurecido vuelve a encender la computadora de nuevo pero los archivos del disquete ya se habían borrado.
-¡Maldición! Ahora ya no sabré donde se encuentran esos planos- Gruñe enojado, pero al instante recuerda el pedazo de video en el que decía "...detrás de la computadora principal." Eggman para descubrir a qué se refería sin pensárselo se agacha buscando algún interruptor o un compartimento secreto en donde pudiera ubicarse alguna palanca o algo parecido. Al llegar al borde de la maquinaria observa un pequeño enchufe en la pared que parece desgastado y roto.
-¿Uhm? Que extraño. ¿qué hace un enchufe en un lugar como este?- se pregunta extrañado.
Pero al tocar la tapa ésta se despega y se cae dejando a la vista un montón de cables de colores. Solo uno de color gris le llama la atención pues estaba fuera de su sitio y tenía la sensación de que se se veía más desgastado que los otros. Eggman lo enchufa y en ese momento nota como toda la pared se mueve, como si se fuese a caer sobre él. Sobresaltado se aparta de ella lo más rápido que pudo y al darse la vuelta contempló como la computadora y la pared se rodaban a un lado dejando visible una pequeña gruta llena de escaleras que conducían a algún lugar más abajo.
-Vaya, quién iba a pensar que mi abuelo escondería un laboratorio justo debajo de esta montaña. Si que era astuso- Sonrió complacido, y se dirigió hacia esa gruta.
Conforme bajaba las escaleras algunas luces del techo se encendían parpadeantes, de otras salian chispas pues estaban fundidas y eran bastante viejas, las paredes estaban llenas de musgo y parecía que se iban a caer de un momento a otro. Al llegar abajo del todo una puerta de metal con un candado le corta el paso. Intrigado manda a uno de sus robots romper el candado, este se cae y la puerta se abre lentamente y con un horrible chirrido que helaba la sangre. Aún asi se adentró a aquella habitación y obserbó con detenimiento. Estaba sorprendido, parecía un laboratorio. Era bastante amplio pero poco iluminado y sobre las paredes de metal reposaban varios estantes llenos de cajas viejas y herramientas de trabajo. Al fondo estaba todo lleno de ordenadores, archivadores, maquinaria y cápsulas llenas de una sustancia verde, aparte también habían montones de piezas de robots y varios papeles sobre unas cuantas mesas que allí habían. Parecía como si los que estubieron allí tuvieran prisa por marcharse, muchas cosas estaban desordenadas y tiradas por el suelo. Se fue adentrrando más y más ojeando aquel lugar con detenimiento hasta que llegó al fondo de la habitación donde encontró una pequeña cápsula con un líquido extrano de color verdeazulado fluorescente. Se acercó aún más y al hacerlo vió como el líquido emitía un montón de burbujas, se empezaba a formar una sombra y a aparecer la silueta de algo o alguien.
-¡¡HAAA!! ¡¿Quién eres?! ¡¿Qué quieres...?! ...¿Tú? No... no puede ser...
Continuará...