Los personajes son de propiedad de SM, solo la historia es mia.

Summary: Bella siempre creyó haber encontrado el amor en él, todo era perfecto hasta que conoció al hermano de su novio quien la hará cuestionarse todo lo que creía seguro y la hará caer en la más placentera tentación. M por lemmons.


Capitulo 1

Desde pequeña que siempre estuve enamora del chico mas guapo del colegio, pero sabia que él nunca se fijaría en mi, es totalmente perfecto, hermoso, talento, simpático y capitán del equipo de rugby, además de los dos años que me lleva de diferencia, pero estaba decidida a hacerme notar así que tome las pruebas para porristas y para mi sorpresa quede, no se donde deje mi descoordinación pero logre entrar al equipo.

Nunca me intereso ser popular, después de todo soy lo mas corriente que se puede encontrar, tengo los ojos y el cabello de un aburrido chocolate, mi estatura es mediana y mi cuerpo a mejorado algo con lo de las porristas, definitivamente no era del tipo en el que él se pueda fijar.

Pero para mi gran sorpresa todo cambio con el inicio de este año escolar, fui nombrada capitana de las porristas, al parecer que lo de la popularidad iba bien y eso era algo que no entendía, ya que las que fueron capitanas antes de mi solo eran zorras amargadas y en busca de sexo que se acostaban con todo el equipo, en cambio yo era todo lo opuesto, creo que mis compañeras lo notaron y prefirieron una capitana no tan… zorra, después de todo eso afecta la reputación de todas.

Bueno, a lo que iba, por tradición de la escuela se acostumbra que la capita de las porrista saliera en una cita con el capitán del equipo de rugby para ver si las cosas funcionan, él ha sido el capitán los cuatro años anteriores y nunca las cosas han resultado con ninguna de las capizorras de las porristas así que no tenia mucha fe en que conmigo fuera diferente pero lo único que yo quería era una oportunidad que me notara y quizás viera que era para él.

Grande fue mi sorpresa cuando las cosas si resultaron, le encanto que yo fuera distinta, que no humillara a los demás ni que fuera una hueca zorra, después de todo yo solo vivía mi mundo, mi mundo por él.

Desde eso ya dos meses, han sido los mejores dos meses de mi vida, no nos demoramos ni dos citas en ponernos de novios y es que nos dimos cuenta que éramos el uno para el otro, teníamos una química que nos sorprendió desde el principio, eso si, debo reconocer que ahora que somos novios he cambiado un poco, ahora estoy totalmente enfrascada en mi relación, si antes me detenía a saludar a los demás ya no lo hago, el tiempo que no estoy con mi novio, pienso en él y es todo lo que hago.

Ahora estoy parada frente a mi espejo, contemplado mi imagen, totalmente al borde de la histeria, después de mucha insistencia por su parte accedí a conocer a su familla y no se si es la mejor idea, pero él dice que quiere que conozcan a su "Gran amor" como me llama, aunque nadie lo crea, soy su primera novia, dice que estaba esperando a alguien especial y que por eso nunca lo había intentado con nadie, que cuando me vio supo que era yo, bueno, eso yo lo supe hace mucho tiempo.

El timbre de mi casa me saco de mi entonación, por fin había llegado la hora de verdad, y espero con todo mi corazón no arruinarla, por mi y por él, se que esto le importa mucho, habla demasiado de su familia y se nota lo unidos que son, por lo que me contó, tiene un hermano de mi edad y una hermana mas pequeña, hoy estarán todos para conocerlos.

- ¡Voy! – grite para que no se desesperada, se muy bien que esta tan o mas nervioso que yo, en cuanto abrí la puerta, el dueño de mis sueños estaba ahí, para junto a su auto, luciendo mas sexi que nunca, su jeans desgastado junto a una camisa negra con los primeros botones desabrochados era una invitación al pecado, cerré la puerta de mi casa y me acerque sigilosamente a él.

- Amor… - me regalo la mejor sonrisa que pude haber pedido – estas hermosamente espectacular – en cuanto llegue a su lado me rodeo la cintura con sus fuertes brazos, el sonrojo no se demoro en llegar, a pesar de que siempre me halagaba aun no lograba acostumbrarme a que me llamara "hermosa", para esta noche elegí un simple pero a mi gusto elegante, vestido azul cielo, era hasta un poco arriba de la rodilla, con escote en V y un lazo algo mas oscuro bajo el busto, zapatos alto a juego, deje mi cabello suelto con mis ondas porque sabia que le gustaba así y apenas y me maquille, no era lo que se llamaba fanática de la moda pero me gustaba verme bien.

- Eso lo dices por eres mi novio – agache la mirada apenada

- No, eso lo digo porque es verdad… ¿Ya te dije hoy cuanto te amo? – me pregunto al mismo tiempo que acariciaba mi mejilla y acercaba sus deseables y carnosos labios a los míos, yo solo negué ante su pregunta esperando la llegada del beso.

Cada vez que lo besaba era como tocar el cielo, sin demorar mucho su lengua dibujo el contorno de mi labio inferior para poder introducirse en mi boca, con todo el gusto separe mis labios, en cuanto nuestras lenguas comenzaron a luchar la una con la otra, pude sentir como mi cuerpo subía su temperatura, y es que eso y mucho mas era lo que me provocaban sus besos.

Al sentir como sus manos viajas hacia mas abajo por mi espalda un audible gemido escapo de mi boca, en respuesta él solo rió y apretó mi cuerpo mas al suyo, pude sentir con detalle su bien formado cuerpo junto al mío, a pesar de la ropa que nos separaba sentí también como estaba ardiendo en deseo de que esto continuara, subí mis manos hasta enrollarla en sus cabellos y así apegarlo mas a mi, en ese momento sentí como su erección hacia contacto con me estómago al segundo se tensó y gruñó en mi boca, amaba que yo fuera la que le provocara esas cosas, pero él no se quedaba atrás, pude sentir como me mojaba por su contacto y la danza de su lengua en mi boca, si esto nos pasaba con un simple beso, no quería ni imaginarme que pasaría con mas, creo que moriríamos de placer, eso si, felices.

Estaba decidido, iba a entregarme a él, he esperado 16 años por él y ahora que lo tengo se que es el indicado, me ama y me cuida como nadie será capaz de hacerlo, me hace reír y me respeta, es el novio perfecto, se que si, así que por fin siento que estoy completamente lista, aunque él me confeso que no era casto, a pesar de nunca haber estado enamorado, dice que se arrepiente de no haberme esperado, se que es él.

Haciendo acopio de mi poco autocontrol que me quedaba por tan caluroso beso, me separa de él para mirarlo pero al instante me perdí en tan hermosos ojos.

- Mejor nos vamos antes de que lleguemos tarde – dijo como pudo, ya que aun estaba un poco agitado por el beso.

- Si – le sonreí – pero quiero decirte algo – me abalancé y le rodee el cuello con mis brazos, tuve que ponerme de puntillas para alcanzar su gran estatura – quiero que hagamos el amor – le susurre cerca de los labios – estoy totalmente lista – le sonreí para aclararle que lo decía enserio y que no tenia miedo

- Amor – me tomo de la espalda baja – no quiero que te sientas presionada, créeme que puedo esperarte – me sonrió de vuelta

- Es que estoy segura… te amo… y quiero hacer el amor contigo – me levante un poco mas y roce mis labios con los suyos

- Te amo Bella… te amo y me hubiera encanto esperarte… pero se que estar contigo ahora vale cualquier cosa… - sonrió y sacudió un poco su cabeza – y mejor nos vamos o llegamos tarde – me abrazo y respiro en mi oreja – te amo de verdad Bella.

- Yo también te amo Emmett.


Bueno, espero que les guste esta nueva historia y la lean

Besos