Disclaimer: Los personajes son de Stephenie Meyer. Yo nada más me entretengo un rato con ellos. La canción pertenece a Jason Mraz y el beteo a Cafesitodeldia(L).

Summary: Ella es lo que has estado esperando por casi cien años. Sabes que esa pequeña y frágil humana es tu complemento. Momento dulce de Edward.


«So I won't hesitate no more, no more.
It cannot wait I'm sure there's no need to complicate,
Our time is short, this is our fate, I'm yours»

(I'm yours – Jason Mraz)

La contemplas, siempre a lo lejos, mientras se dirige a esa fea camioneta. Ella es tan bella, tan perfectamente humana, que no puedes evitar esbozar una sonrisa. Todavía crees que todo esto es una ilusión; piensas que tanta hermosura no es real. Sin embargo, lo es.

Después del accidente con la camioneta de Tyler, te das cuenta de lo agradecido que te sientes de tu naturaleza (te permitió rescatarla antes de que sucediera una tragedia). Ahora, tal vez, ella se siente dolida porque la estas manteniendo bajo la mentira, pero sabes que es lo mejor para los dos. Aunque una parte de ti te indica que eso va a cambiar muy pronto.

Sabes que no hay nada más qué pensar. Sabes que no puedes engañarte más a ti mismo y tratar de ignorar esta avalancha de sentimientos que te recorren cada vez que piensas en ella. Celos, tristeza, emoción… amor. No puedes seguir fingiendo que todo esto no es más que una farsa del destino. La has traído en tu mente desde el primer instante en que la viste y, aún más, desde que comenzaste a sentir todo por ella.

Al mismo tiempo, te da miedo. Ese temor a echar todo a perder, de lastimarla física o emocionalmente (sobre todo la primera opción). Pero tienes esa necesidad inmensa de acercarte a ella y rozar el adorable rubor de sus pálidas mejillas con las yemas de tus dedos y, si es posible, probar sus labios con tu gélida boca.

Escuchas una risita a tu lado (ese melodioso sonido como campanitas) y sabes de quién se trata. Le gruñes levemente, demostrando tu molestia porque sea tan entrometida. Ella se limita a encogerse de hombros, sin inmutarse.

–Deja de darle tantas vueltas, Edward. Sabes que, tarde o temprano, pasará. Lo he visto; está en su destino.

No le contestas, pues sabe que todo eso es cierto. Ella es lo que has estado esperando por casi cien años. Sabes que esa pequeña y frágil humana es tu complemento.


Creo que, de no haber sido por Héctor, jamás hubiera sabido de la existencia de las canciones de Jason Mraz.
Y'all know. Twitter: /c_ linan