N/A: Este es un Fic que acabo de comenzar, la verdad a mi me tiene bien entusiasmada, y en pocos días logré avanzar varios capítulos. El nombre de este Fic lo escogimos con mi queridísima y mejor amiga, confidente y amante ADA CULLEN ( ella es mi Alice y yo su Jasper *.* ) Te amo demasiado amiga!! Espero que dejen sus Reviews, es la única manera que tengo de saber que les gustó el fic.

.

.

.

Placenteros y Culposos

.

Summary :Por que cuando lastimas el corazón de una mujer, la venganza es dulce y placentera. Bella sufre por quién creyó era el amor de su vida, pero pronto será él quién sufra por ella, solo debe tener cuidado de no caer en su propio juego

Prologo.

Bella POV

-¿Sabes que es lo más triste de tener el corazón roto?

-No. –No me miró, mantuvo su cabeza agachada mirando el suelo.

-Que una vez que el corazón está roto ya no puedes recordar cómo se sentía antes cuando no lo estaba. Por más que lo intentes no podrás recordarlo. Solo el dolor es en lo que piensas…

-¿Por qué lo dices Bella?

-Por nada… Es solo que ahora que lo pienso, ya no recuerdo como se sentía tener el corazón entero.

-Lo siento amiga, pero ya verás como logras reconstruirlo.

-Eso espero Alice. Eso espero.

.

.

Caminé hasta su casa sola y en silencio.

Y así nada más el amor golpea a tu puerta, puedes atender a la primera llamada, pero otras veces esa puerta suena más de una vez.

Atendí a la primera llamada, pero el resultado no fue el esperado, tuve esa puerta abierta muchísimo tiempo, pero nunca logré ver los frutos. Si cariño, la vida no es fácil ¿Verdad?.

¿Pero quién dijo que lo sería?.

A veces aprender a quererse a una misma antes de amar a otro es la clave.

Lo dejé entrar a mi vida, le di cobijo en mi corazón y lo alimenté con mi cuerpo. Pero nada es suficiente.

La siguiente vez que mi puerta volvió a sonar era alguien completamente diferente, lo usaría para reparar el daño que la primera llamada le hiso a mi corazón.

-Edward lo siento. ¿Aun están tus brazos abiertos para mí?.

-Claro pequeña, siempre que tú lo quieras.

Me acurruqué en su pecho y dejé que mis lágrimas cayeran, necesitaba soltar la angustia que me llevaba a los brazos del hombre que no amaba, pero que quería amar.

Así es como comienza la historia de mi vida.

Porque lo que leerás a continuación es mi patética historia de amor.