¡Sí! nueva historia.

Los personajes de la serie de anime / manga de Naruto, no me pertenecen. Son propiedad exclusiva de Masashi Kishimoto. Yo sólo tomo sus personajes para Crear una historia sin fin de lucro.

¡Disfruten!


¡No!

— ¡No!

Fue la única palabra que retumbó en la estancia. Y todas las personas presentes se voltearon a verlos.

— ¿No?

— No…

Y es que lo que parecía ser una conversación normal de amigos tomando helado en una gelatería, se estaba tornando algo… extraño. Todos vieron como el chico se inclinó sobre la mesa de forma amenazante.

— ¿Segura?

— ¡Segura!

— Vamos…!No seas fresa Sakura!

— Dije que no. ¿Quién crees que soy?

— Es un favor de amigos, hazlo por nuestra "amistad".

— Por lo mismo digo no. ¡Por nuestra amistad¡

A Sasuke se le había metido entre ceja y ceja pedirle a su mejor amiga que le enseñara "ciertas cosas".

— Sakura…

— ¡No!

Llevaba ya tres meses saliendo con una chica —todo un record para él según Sakura— y se le había presentado una oportunidad única. Ésta noche, los padres de Karin saldrían, y él, no quería quedar mal… después de todo sería su "primera"… — o más bien segunda vez si todo salía como él lo planeaba—. Y no se le ocurrió nada mejor que pedirle a Sakura —su amiga de la infancia— que le enseñara. Él sabía muy bien que ella ya había comenzado su vida sexual, no por nada eran amigos, siempre se contaban todo y accedían a cumplir favores o encubrimientos.

Excepto hoy… y excepto esto.

— Vamos, nos conocemos de pequeños. Te he visto semi desnuda desde pequeña. Solíamos bañarnos juntos.

Y era cierto. ¿Pero que importaba eso? Para Sakura no era más que un chantaje barato.

— Sasuke…—soltó con reproche— lo más desnuda que me has visto, ha sido en bañador. Y no, no lo haré.

De todas las tonteras, disparates, antojos, y malcriases que Sasuke había pedido a Sakura. Ésta era la primera vez que lo rogaba con tanto ímpetu; esto realmente era verdaderamente importante para él, verdaderamente quería quedar bien parado frente a su novia.

— Sakura realmente necesito esto… realmente necesito que me ayudes. Por favor…

¿Por favor? ¿Sasuke lo pidió por favor? La chica no podía creerlo…

Bien, eran amigos de la infancia, más de alguna vez se vieron semi-desnudos. ¿Sería tan malo ayudar a Sasuke?

No. No lo era… ¿Cierto?

— Está bien…— aceptó con un suspiro vergonzoso— ¡pero me comprarás aretes bien caros Sasuke Uchiha!— Ella no lo miró a los ojos.

— Lo haré, Sakura. Lo haré. — sonrió triunfal.

Sasuke pagó los helados en silencio. Sakura inició el camino de regreso a su casa, y él la siguió en silencio. Completo silencio…

— Pasa… — sonó como una orden. — mis padres no llegan hasta en la noche.

Sasuke asintió seriamente, se adentró hasta la sala, dejó su mochila sobre el sofá y subió las escaleras.

Sakura hizo lo mismo. Su fuero interno seguía debatiéndose, sobre si era correcto o no lo que estaba a punto de hacer. ¿Acaso rompería la balanza de la amistad con esto? ¿O reforzaría el lazo entre ellos?

Tal vez ambas…

Estaba a punto de descubrirlo.

La puerta blanca de la última habitación del pasillo se cerró; las cortinas púrpura también.

Silencio.

Luego… sólo se oyó el caer de las ropas y el crujir de la cama.

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Wooo!!

La Continuación se viene buenísima.