Epílogo.

Querido Scorpius:

Te amo, no lo puedo evitar. Me dolió que me engañaras, pero quiero que sepas que todo está bien. Te perdono.

Con amor, Rose.

Scorpius siempre leía esa carta que Rose le había dado cuando se reencontraron ese día en el tren. Todo había salido bien, los Malfoy ya estaban fuera de peligro y Rose y él habían hablado durante horas, escapándose de los padres de ella con ayuda de Albus.

-¿Podrías ayudarme con este libro?- pidió Rose a su novio, señalando un libro grueso que estaba fuera de su alcance. Estaban en medio de los últimos exámenes que presentarían antes de salir del colegio.

Scorpius le sonrió de manera encantadora y se lo dio, no sin antes darle un beso en los labios. Ella lo miró mal.

-¿Sólo piensas en besarme? ¡Estamos en medio de los exámenes más importantes de nuestras vidas!

Scorpius puso los ojos en blanco y, sin decir nada más, fue directo a la mesa que estaban utilizando. Dejó todos los libros que Rose le había pedido y se sentó con los ojos cerrados.

-Lo siento- le susurró Rose al oído. Se había acercado detrás de él y lo abrazaba por la espalda-. Estoy algo estresada. Aún no recibo respuesta de la Academia de Sanadores.

Scorpius se dejó mimar un rato. Estaba cansado y sólo la presencia de Rose lograba tranquilizarlo.

-¿Sabes qué?- dijo Rose de pronto-. Vamos a los jardines, te apuesto a que están solos ahora.

Scorpius llevó los libros de Rose, pues sabía que la chica no dejaría de estudiar ni un minuto. Su último examen sería al día siguiente, así que eso les dejaba al menos veinte horas antes de ser completamente libres.

Rose se recostó en el césped al lado de Scorpius, sólo para observar su apacible rostro y dejar besos en él de vez en cuando. Tiempo después, él abrió los ojos y la observó un largo rato, como si se quisiera grabar en la memoria cada una de sus pecas.

-Te amo, Rose- le dijo con suavidad.

-Y yo a ti- respondió ella con una sonrisa sincera, dejándose abrazar y besar por él.

-¿Sabes ya si estás dentro de El Profeta?- preguntó ella con interés.

-Tengo que empezar desde abajo, pero creo que podré hacerlo bien- respondió él sin dejar que su nerviosismo se notara. Rose le dirigió otra sonrisa, feliz de que podría cumplir su sueño de ser escritor.

-¿Y Sophie?

-Se mudará a Londres- contestó Scorpius negando con la cabeza-. Cualquiera diría que es para ver a su primo favorito, pero no, me dejó en claro que viene por su novio, ¿quién diría que Albus la manosea en vacaciones?- dijo con fastidio, ganándose un golpe de parte de Rose.

-Al menos Kate aprendió su lección sobre la venganza. Yo la aprendí antes que ella- dijo tanteando el terreno.

-Todos nos equivocamos- dijo Scorpius encogiéndose de hombros.

Rose lo besó con lentitud, abrazándose más a él.

-Entonces, Merlín, ¿conservas las cartas?

-Igual que Morgana- contestó Scorpius con una sonrisa cálida.

Rose lo besó de nuevo, les gustaba recordarse cómo habían llegado a estar juntos, para no olvidar nunca que tenían que ser sinceros el uno con el otro.

-¿Sabías que Lily sale con Scamander ahora?- preguntó Rose luego de mucho tiempo.

-Al menos ahora podré hacer que me hable, es incómodo estar con los Potter y que ella me evite. Ya sabes… después de que hablé con ella y dejé todo en claro.

Rose asintió. La verdad era que no quería hablar de eso, tenían toda una vida por delante y un último examen que realizar.

Este fue el último. Espero de verdad que sepan perdonar mi tardanza, por eso aquí les dejo tres seguidos recién salidos del horno. Si no contesté a sus reviews no fue porque no quisiera, sino porque no sé qué tiene fanfiction que no me llegan los correos de alertas ni nada :s

Por cierto, ya leyeron "Preferencia personal" es uno de mis favoritos, se los recomiendo mucho.

FELIZ 2012, recuerden atraer sólo lo positivo a sus vidas.

Un abrazo a todos!