Hola mil disculpas por el retraso pero e tenido demaciados problemas personales que me han inpedido de una u otra manera seguir con esta historia, pero no pienso dejarla, eh vuelto y espero ponerme al dia, sin mas les dejo este cap y espero que les guste.

saludos y gracias a mi beta ginebra, nuria te quiero mil.

Ya saben los personajes de SM y la historia de una servidora.


Para muchos podía ser un día como cualquier otro pero para ella era el inicio de una nueva vida, habían pasado semanas desde que se había recluido en su antiguo departamento para no olvidar sus orígenes, no lo había hecho con el fin de ahogarse en la pena sino todo lo contrario, para ella era el inicio de una nueva vida.

Abrió las cortinas de par en par para que la luz entrara en ese pequeño espacio que en un tiempo fue su hogar y que ahora sería solo un recuerdo que se juró no olvidar, ya que el que se olvida de sus errores pasados tiende a volver a cometerlos.

Tomó un pequeño bolso en el cuál echó algunas partencias, solo lo necesario para lo planeado. Ya no necesitaría su ropa, era demasiado escandalosa para sus propósitos, aunque no había decidido dejar del todo su profesión. Sí se juró enfocarlo en otra clase de clientes, ahí estaba el punto de la I y para eso necesitaría cambiara su aspecto y todo su guardarropa.

No pretendía dejar atrás. Solo adaptarse a las circunstancias, durante mucho tiempo se preguntó lo que significaba esa palabra. La psicóloga del ultimo albergue en el que estuvo le hizo referencia a que ella solo había sido víctima de las circunstancias, lo cual en su momento no comprendió pero en este punto de su vida supo lo que significaba y se dijo que ya no sería más victima de la misma sino que la usaría a su favor.

Analizó durante semanas los pros y los contras de su situación y las circunstancias en las que se encontraba, de ahí el hecho de que seguiría en la misma línea de trabajo pero dirigida a otro tipo de clientes de los cuales no solo sacaría dinero sino que también posición y status en las altas esferas del upper side, usaría todas las armas que la vida le dio para conseguir sus objetivos.

Salió del viejo edificio y se encamino al inicio de su nueva vida, lo primero que hizo fue comprar un móvil y llamar a quien sabia le ayudaría con su primera tarea.

_Alice, hola si soy yo, no no pasa nada solo que necesito de tu ayuda_ se quedó en silencio esperando la respuesta, la cual llego un par de segundo después de haber formulado la pregunta.

_Si dime en que te puedo ayudar? Aparte de no estorbar_ Isabela sintió una punzada de remordimiento por como la había tratado el día que habían ido en su rescate, aun así no se arrepentía ya que no quería que nadie viera el estado en el que se encontraba, nadie tenía que saber nunca lo que le había afectado el que él se marchara.

_Lamento lo que paso pero era necesario que me quedara sola para analizar mis opciones y el rumbo que tomaría mi vida de ahora en adelante, espero poder compensarte y como muestra de buena voluntad_ Inspiró profundamente antes de continuar para que pareciera que era un gran esfuerzo lo que diría a continuación_ Te invito a un día de chicas, ya sabes spa, compras ,salón.

Tuvo que retirarse de la bocina o auricular para evitar sufrir daño en el oído.

_¿Estás hablando en serio,? No lo puedo creer! ¿Qué hiciste con mi amiga y quien eres tú? Si que te hizo bien el largo descanso que te tomaste para re direccionar tu vida.

Isabella suspiro no de buen agrado pero sabía que tenía que comenzar a nivelar sus prioridades para lo que tenía en mente tenía que cuidar su aspecto y nadie mejor que Alice para eso, después de todo era lo más cercano a un familiar que tenia.

_¿Dónde te encuentras?, Yo estoy saliendo del departamento ¿qué te parece si tomas el metro y nos vemos en el centro comercial que se encuentra cerca de Park Avenue?

Isabella hizo un cálculo para saber en cuanto tiempo llegaría, tenía demasiada hambre y el olor de los hot dogs le hicieron agua la boca.

-Tengo que tomar dos líneas así que llego como en 1 hora aproximadamente, ¿te parece bien?

_Si, si está bien, así paso a ver a Jasper a su nueva oficina para decirle que no llegare hasta la noche para que no se preocupe.

Isabella tragó fuerte al imaginarse todo lo que estaría planeando su pequeña amiga para llevarse todo el día en ello. Decidió que después de todo se lo debía por lo que no puso objeción y se propuso degustar su perrito caliente como si fuero alta cocina.

Después de la hora mencionada. Isabella llegó a la entrada del enorme centro comercial el cual contaba con 5 pisos en los cuales se encontraban diversos aparadores de los mejores diseñadores y restaurantes de alta cocina, las puertas se abrieron al momento que el sensor notó su presencia, por lo que comenzó a caminar sobre los pisos de mármol del lujoso lugar.

Al principio se dijo que era demasiado para ella, había demasiado lujo, figuras que daba miedo mirar por miedo a que con un ligero roce se vinieran abajo.

Entró en un par de tiendas pero las miradas desdeñosas de las vendedoras le hicieron ver que no era bienvenida debido a su aspecto, lo que le hizo reír para sus adentros ya que nunca había considerado medir a las personas por la cantidad de dinero que llevaran si no la forma de actuar ante el dinero mismo y los ricos se mostraban tan vulgares en presencia del dinero que pensó nunca serian mejor que ella.

Decidió esperar a Alice en una de las cafeterías que se encontraban en el tercer nivel-,fue el más modesto aunque un simple café negro le costó 5$

La chica que la atendió le ofreció una sonrisa agradable como dando a entender que sabía cómo se sentía y vio que en el broche con su nombre ponía Liza.

_¿Liza me podrías por favor traer un panecillo de arándano para o acompañar mi café?

La chica le devolvió la sonrisa y con un asentimiento se dio la media vuelta y se dirigió a la amplia vitrina donde se encontraban los postres, Cogió uno, lo puso en un pequeño plato y lo colocó en la mesa junto al café.

_Si necesita algo mas, no dude en solicitarlo, estaré encantada en servirle.

A Isabella le agradó mucho más la chica, ya había pasado mucho tiempo desde que alguien le había sonreído con tanto calor humano en el gesto.

Después de un rato se cansó de esperar y decidió que caminar un rato le ayudaría a despejar mas su mente para agregar más ideas a todas las que tenia y así lograr en menos tiempo sus objetivos.

Llegó hasta el extremo sur del mall el cual tenia una vista hermosa de toda la ciudad. Había algunas personas con niños observando como se ocultaba el sol entre los edificios para dar paso a la luna, se recargó en el barandal de uno de los ventanales que cubrían todo lo alto y ancho de la vista, y decidió que desde ahí se veía la inmensidad de la ciudad cuan grande era y al igual que las demás personas miro como el sol desaprecia entre los edificios.

A lo lejos vio un helicóptero que avanzaba en dirección del sol y pareciera que se estrellaría con él si no se detenía hasta que en un momento dado solo fue un punto en el horizonte y después nada.

Se dijo que así mismo pensaba desaparecer su antigua ella para renacer como la luna inmensa grande que nadie pudiera ignorar a su paso, bajo la vista para ver como miles de personas avanzaban en distintas direcciones sumidos en sus preocupaciones.

Se giro y contemplo a su alrededor como ahí también las personas caminaban sin cesar de un lado a otro buscando algo que los hiciera feliz, un perfume, una joya algo que el dinero pudiera comprar.

Miro como las chicas que la habían desdeñado por su atuendo salían de la tienda al parecer era su hora comer, y le dedicaban las mismas miradas que anteriormente le habían dedicado en cuanto cruzó la puerta de la tienda de ropa exclusiva.

Rió para sus adentros ya que no sabían que ellas nunca serian mas que ella ya que no pensaba dejarse llevar por los excesos y jamás mediría alas personas por la cantidad de ceros que tuviera su cuenta.

Tan sumida estaba en sus pensamientos que no vio cuando una persona se le acerco por atrás hasta que esta la sorprendió con estrepitoso chillido muy conocido para su pesar.

_Bella que bueno que llegaste, mira ahora mismo no tenemos tiempo para todo lo que tenia planeado pero podemos empezar a platicar y ver cuales son tus planes, de ahora en adelante._

_Vaya veo que no has cambiado, y si tienes razón ya me imagino cuales eran tus planes y no tenemos tiempo para ellos, por el momento necesito ropa nueva ya que la que tenia la deje para que la donaran a un albergue además de que no me servia para mis propósitos.

_Me encanta verte tan dispuesta, hay tanto que podemos hacer solo dime que estilo y yo me encargo de todo. No mejor no yo misma te diré que estilo te queda, para lucir más chic y más ala ultima moda, algo sofisticado te quedaría bien.

Isabella vio las vestimentas de su amiga y tuvo que admitir que el conjunto le quedaba a la perfección pero a ella no se le vería igual con sus poco proporcionado cuerpo, tuvo un pensamiento de que tal vez se haría una cirugía para aumentar el busto, pero lo desechó al momento de haberlo pensado, ya que eso requería hospital y era al ultimo lugar que iría.

Se dejo arrastrar por Alice, por las tiendas que encontraron abiertas, no dejaron una sin visitar hasta que llegaron a las que le habían hecho mal gesto por su aspecto a lo que Alice entro al desquite, con su singular buen estado de animo. Y su lengua de dos filos, le pareció que fue ayer cuando la encontró en aquel callejón, a la mano de dios.

Se pregunto en ese momento que hubiera pasado si sus decisiones hubieran sido distintas, si esos ojos castaños no la hubieran ablandado a tal grado de sentirse responsable por su persona a pesar de apenas haberla conocido.

Isabella estaba de pie junto a la ventana, obser vando cómo la lluvia azotaba NY, mientras su amiga la observaba con mirada de preocupación. Sabía que su rostro mostraba la tensión que le producía la decisión que tenia que tomar y, una vez más, había vuelto a perderse en sus pensamientos. Con sólo veinticuatro años, debería tener una visión más despreocupada de la vida, pero la presión que soporta ba era un peso dos veces mayor del que podrían cargar la mayoría de las mujeres. Y lo peor era que solo ella sabia cuanto peso venia cargando, era indispensable que así siguiera en el mundo que pensaba entrar podría tener repercusiones y había demasiado en juego y solo ella era la única responsable, no estaba dispuesta a arrastrar a Alice en ese turbulento juego, sabia que en cuanto Alice se enterara tal vez no le agradaría la idea pero era mejor así.

Ya había hablado con Jasper al respecto y el se haría cargo de los asuntos legales, con un intermediario que jamás sabría de la existencia de Isabella.

Es lo mejor se repetía así misma, pero no acababa de convencerse ya que le parecía demasiado doloroso.

Tan ensimismada estaba que no se dio cuenta cuando Alice entro a su recamara y tenia mucho tiempo viéndola, y se dio cuenta que había pasado demasiado tiempo y no se había percatado de los cambios que habían surgido en Isabella,.

Cuando ellas se conocieron Isabella si bien nunca fue gorda tenia su cuerpo con formas y un brillo en los ojos, que no supo decir ella cuando fue que lo perdió, se reprendió a sí misma por no haberse dado cuenta a tiempo que Isabella la necesitaba, que había tenido que recurrir a la prostitución para poder comer, y ella envuelta en su burbuja de cristal no había estado ahí para ella cuando mas la necesito.

Sintió un nudo en la garganta se acerco a ella para pudiera percatarse de su presencia y a pesar de su estatura le rodeo los hombros e inclino su cabeza en el pecho de Isabella, ella en un principio se sorprendió por el hecho de que no la había notado entrar y el abrazo no la sorprendió tanto ya que sabia lo efusiva que era la enana.

Pero cuando sintió los sollozos y su cuerpo comenzar a temblar se preocupo y trato de deshacerse de su agarre._Perdón_ dijo entre sollozos_ Perdóname, por favor _ logro articular antes de soltarse a llorar mas intensamente.

_Que pasa enana, que tienes_ le pregunto sin recibir respuesta, solo los sollozos que cada vez eran más fuertes hasta convertirse en un verdadero llanto.

_Dime que esta mal Alice por favor me estas asustando_ Le dijo pero en lugar de intentar desasirse la apretó mas a ella para tratar de calmarla.

La arrastro con ella hasta la cama y la hizo sentarse junto con ella una enfrente de la otra para poder ver su rostro y de esa manera intentar descubrir que le sucedía.

Después de un largo momento por fin Alice se calmo, y poco a poco se separo de Isabella pero siempre con la cabeza gacha. Isabella le levantó el rostro con las yemas de los dedos y al mismo tiempo tomo una caja de pañuelo de papel y se lo puso en su regazo, Alice lo tomo y comenzó a limpiarse las lagrimas que todavía caían por su rostro pero con menos intensidad que al principio.

Una vez que por fin se calmo Isabella le trajo un vaso de agua para que terminara de calmarse. Y espero a que se lo terminara, para comenzar el interrogatorio.

_Ahora si, puedes decirme que tengo que perdonarte?.

Alice respiro hondo y con los labios aun temblorosos comenzó a explicarse_ Bella nos conocemos desde hace mas de una década y aun así con todo lo que hemos pasado juntas, no fui capaz de ver que estabas en problemas. Tu siempre as estado para mi tanto en las buenas como en las malas, me as apoyado en los momentos más oscuros de mi vida y yo…_comenzó a temblarle la voz de nuevo_ y.. ,No pude darme cuenta de cuanto me necesitabas, de lo mucho que estabas sufriendo, de la necesidad que tenias.

_Pero es…. _ Comenzó Bella pero Alice levanto la mano para acallar su replica.

_No trates de negar, lo que es obvio a la vista de todo el mundo, hasta Jasper se dio cuenta antes de mi no se como fue que deje que llegaras a tocar fondo, y no hacer nada.

Isabella la escucho en silencio y aunque intento detener su diatriba Alice constantemente se lo impedía, de una u otra manera, Isabella respiro hondo y la dejo terminar.

_Sé que te sientes mal por no haber estado ahí, pero si te sirve de consuelo fueron mis malas decisiones las que me colocaron en esa situación pude haber recurrido a ti, para que me ayudaras y en lugar de eso como siempre decidí hacer esto sola y ve como resulto._ Respiro hondo para poder seguir._Intentaré de ahora en adelante apoyarme mas en ti cuando sienta que ya no puedo, y me este metiendo en problemas, ok? _Dijo en tono conciliador, y ala vez con un sentimiento de culpa, ya que sabia que pudo haber pedido ayuda pero era demasiada su soberbia que prefirió las calles a depender de nadie.

Y ahora despues de haberle prometido que intentaria acudir a ella cuendo estuviera en problemas estaba haciendo justo lo contrario al haber recurrido, jasper y a un perfecto desconocido antes que a ella.

Se abrazaron un largo rato en el cual Isabella en silencio pedía perdón a su única amiga, estarle mintiendo pero ala vez se sentía aliviada de no tener que involucrarla mas en el asunto.

Ambas salieron de la habitación hacia la cocina donde se sentaron a contarse anécdotas de su juventud, y entre risas y de vez en cuando lagrimas se paso la mayor parte de la noche, cuando por fin se fueron a dormir una de las dos sentía tranquila por creía que el mañana lo arreglaría todo y la otra solo se fue a intentar dormir otra noche con la esperanza de no tener pesadillas y con la incertidumbre de sí el mañana seria el comienzo del fin o el fin de lo que comenzó hacia mucho tiempo atrás.

Después de revolverse en su cama sin poder dormir Isabella decidió levantarse. Contempló las estancias abiertas y demasiado grandes antes de andar hacia las puertas de cristal que conducían al balcón. Las abrió, salió fuera, estremeciéndose ante el aire fresco, observando mientras los copos de nieve creaban una cortina de blanco ante ella.

Suspiró mientras se envolvía entre sus brazos y se frotó con ellos, incapaz de entrar todavía. Aquí se sentía protegida, en el gélido viento y la nieve cayendo. Y se preguntaba si podría excluir la repentina oscuridad deprimente que la rodeaba. Girándose, volvió a entrar en el apartamento, cerrando las puertas detrás de ella. El teléfono sonó en la mesita de noche y contestó enseguida para evitar que Alice despertara. Cogiendo el inalámbrico miró el número que se mostraba. El móvil de Emmett. No tenía ganas de hablar con él esta noche. O esta mañana. ¿Por qué destruir los recuerdos de una bella amistad con una relación que sabia de antemano que no-funcionaria ya que solo uno de los dos amaría, y el solo amaba una imagen que evocaba un recuerdo? Puso el teléfono otra vez en la base y le bajo el volumen para que solo pudiera vibrar.

Sacándose la bata la dejó al pie de la cama y deslizó las sandalias de los pies. Acomodó las sabanas que se habían desacomodado mientras el teléfono seguía vibrando.

Miro hacia los ventanales y pudo ver los primeros rayos del sol entre los edificios.

La noche había acabado demasiado pronto. Intentó sonreír ante el pensamiento, pero en cambio una lágrima cayó lentamente por su mejilla


Habían pasado varios meses desde que había salido de NY y añoraba regresar a la gran manzana a parte de que había descuidado los negocios que ahí tenia sabia que por el bien de la empresa y su muy planeada vida personal tenia que poner tierra de por medio antes de que pasara a mayores no había pretendido sentir tal necesidad del calor de un cuerpo femenino como lo sintió en cuanto tomo la decisión de dejarla partir.

Subió la cortina de la ventanilla para ver como se asomaba en el horizonte la ciudad, y sus rascacielos pero le había servido de mucho que sus negocios en Chicago habían tenido necesidad de sus estrategias para negociar y luego había tenido que partir a Europa para poner las cartas sobre la mesa con la familia Volturi quienes desde que el tenia uso de razón eran la realeza en lo que se refiere a la mafia se sabia incluso que el mismo Al Capone en su tiempo temió ser visto como enemigo suyo.

Por lo que prefería no ponerse de por medio a menos que deseara morir lento y dolorosamente a manos de los múltiples, asesinos y verdugos del familia de Volterra.

En cuanto se subió al auto que lo esperaba dio indicaciones para que lo llevaran a su antiguo departamento necesitaba darse una ducha y descansar había decidido que se tomaría unos días para él y nada de negocios ya había tenido bastante de eso en Chicago.

_Sam me tienes lo que te pedí?

Le había regresado su puesto a Sam después de un acto heroico de su parte pero ahora aparte de ser uno de sus guarda espaldas era su chofer e investigador.

_Si, señor todo esta en el folder que esta debajo de su asiento.

Edward se inclino para meter la mano debajo del asiento y tomo el folder, y reviso cada una de las hojas y fotos que ahí venían. Noto un gran cambio en su apariencia siempre le habia parecido guapa pero ahora respladecia con esa ropa y el peinado el color de cabello era el mismo pero tenia un brillo especial que resaltaba el color chocolate con sus ojos. Y entonces lo vio, justo alado de ella en una mesa sentados muy juntos el tenia su brazo sobre el respaldo y la mano caia sobre su hombro la miraba de una manera muy significativa para que solo fueran amigos y ella se veia comoda con el.

Con la cara crispada con los nervios pregunto._Quien es Emmett McCarty?

Sam noto el timbre irritado de su voz y con mucha cautela tratando de medir el estado de animo por el retrovisor contesto._ Si gusta seguir leyendo el informe ahí viene toda la información de él y su trabajo.

_Ya sé que aquí viene toda su vida, lo que pregunte es que es él para ella, que relación tiene, y de donde salió, anteriormente ella no tenia a nadie mas que a la compañía de Whitlock.

_Eso todavía se esta averiguando pero en realidad la relación es con Whitlock.

_Que tiene que ver con Whitlock?

_Todavía necesito confirmar la información pero al parecer fueron compañeros en el colegio.

Al seguir ojeando el contenido del folder descubrió una foto de Isabella del brazo de Emmett muy sonriente al parecer salían de algún evento, ella tenia una de sus manos sobre el bícep de él y lo miraba con ojos de ternura, como si mirara a alguien muy querido.

Apretó los dientes mientras el enojo aumentaba en su interior, oscuro y salvaje. Un enojo que luchaba por mantener contenido, simplemente porque había otras emociones, igual de intensas, igual de oscuras, que venían con ello.

Cuando abandonó la limosina inspiró un duro y salvaje aliento y se prometió que iba a permanecer tan lejos de esa compañía como fuera posible. Porque le hacía desear, y lo que deseaba, lo sabía, ella nunca se lo daría. Y aunque se lo diera de ninguna manera lo podría tomar.

Se metió a su departamento y decidió tomar un largo baño, dejo el folder en el escritorio de su despacho el cual se encontraba en la primera puerta ala izquierda, decorado como la oficina de un contable con innumerables libros de contabilidad y administración colocados en orden sobre un librero de madera de encino con grabados estilo Louis XV. El librero ocupaba toda la pared que estaba detrás del escritorio por lo que la persona que se sentaba en él le daba la espalda.

Tenia una mesa para té en la esquina derecha donde se encontraba un juego de cafetera y todos los utensilios para preparar el mismo así como una vajilla de para 4 personas, la mesa era de madera con las patas curvas y la superficie tenia una placa de mármol que le habían enviado como regalo hacía algunos años.

Sobre el escritorio una computadora de ultima generación junto al teléfono era todo lo que adornaban el mismo, era demasiado austero, para una persona con semejante cantidad de dinero.

El intruso entra en el departamento con una llave que le había sacado ala original años atrás con la que podía entrar al departamento en los horarios que sabia que no había nadie.

Lo había visto salir hacia menos de una hora y sabia por su agenda que no regresaría hasta después de la medianoche, por las altas ventanas se veía el sol ocultándose tras los edificios anunciando el crepúsculo.

El intruso se movió por el departamento a sabiendas de que no había nadie que pudiera impedir su entrada, sabia de antemano que estaría solo para lo que había venido.

Observó, y consideró lo que vio. Edward Masen no era un hombre conocido por sus debilidades, y no era un hombre conocido por su estupidez. Lo había demostrado muchas veces, una y otra vez. Y su familia había sido una de las que lo habían subestimado y habían pagado caro su error.

El no conocia la derrota sin llevarse a su contrincante entre las patas. Por lo que debería de ser más astuto que él y más hábil en el modo de escabullirse.

Era un hombre que sería muy difícil de destruir, y se había fijado esa meta desde hacia mucho tiempo, tiempo paladeo esta palabra en su boca y sintió el degustar del triunfo anticipado.

Destruir a Edward era esencial. Ponerle de rodillas, obligarlo a sufrir. Eso era todo lo que importaba. Tenia que pagar por el sufrimiento que había inflingido al atravesarse en su camino.

¿Pero dónde era el mejor lugar para golpear?

Lo que Edward había hecho descansaba exclusivamente en sus hombros y él era el único que tendría que sufrir por aquello. Tenía que sufrir por ello; no había otra opción. Lo vería destruido y en agonía la muerte era demasiado buena para él.

Edward no era un hombre que conociera el remordimiento. No era un hombre que entendiera el sufrimiento que otros tenían que tratar. Porque no se preocupaba por nadie excepto de sí mismo. Si sólo, si sólo hubiera una debilidad para encontrar. Entonces se haría justicia. Entonces, Edward entendería que jamás debió intervenir en su camino.

El objetivo era destruir a Edward Masen. Ahora, debía encontrar la herramienta.

En cuanto tomo el folder y comenzó a leer supo que había encontrado la herramienta y el sabor de la venganza volvió a subir a su paladar y lo pudo degustar con mas intensidad que antes.

Tomo fotos de la mayoría de los documento y los dejo todos donde los había encontrado sabia que para llevar a cabo su cometido tenia que ser demasiado meticuloso con todo lo que toco y dejo el departamento tal y como lo había encontrado a su llegada. Salió cual serpiente entre los pasillos arrastrándose a través de la oscuridad por los rincones más oscuros y menos transitados y así el se perdió en la penumbra de la noche en la gran ciudad.


Bueno chicas que les parecio espero les haya gustado, y epero su comentarios tanto buenos como malos para mejorar los fallos, nos vemos en el proximo.

XOXO