Título: A puertas cerradas.

Autora: Danyliz.

Fandom: South Park.

Personajes/Parejas: Aun sin definirse, la única segura hasta ahora es Craig/Tweek.

Rating: Mature.
Advertencias: SLASHy crack all the way.Y sé que está de más, considerando la serie, pero LENGUAJE MADURO, por favor, recuerden que es South Park y que es parte del encanto.

Resumen: Las chicas del décimo grado han estado muy misteriosas últimamente. Los chicos creen que son parte de una secta secreta… la realidad es aun peor.

Notas de la Autora: Originalmente este fic iba a ser en inglés para mi amiga Laurie que no habla ni pizca de español, pero no sé, me nació escribirlo en mi lengua natal; como dije, es más que nada crack, aunque con tintes románticos, será un verdadero pozole. Espero aun así que lo disfruten y opinen de las parejas (hay tanta diversidad en este fandom, es genial).

Disclaimer: South Park es propiedad de Trey Parker y Matt Stone.


Butters no tenía idea de cómo había terminado aquí. Bueno, si sabía la razón, pero ahora que esta totalmente entumido se pregunta porque siempre accede a los planes de los chicos. Si sus padres se enteran que faltó a clases por esto, lo van a castigar de por vida. Suspirando, Butters espera pacientemente a escuchar voces en la mesa. Finalmente reconoce a Bebe, riéndose de algo que las muchachas dicen. Desde hace un tiempo las chicas de la escuela de South Park estaban actuando extraño. Se sentaban en una mesa, apartadas de todos, murmurando y lanzando miradas furtivas a la mesa de los chicos. Casi como cuando a los 9 años hicieron su lista de los chicos más guapos del cuarto grado. Esta vez, sin embargo, no tenía nada que ver con zapatos gratis; esto iba más allá… y es por eso que ayer los chicos decidieron tomar medidas al respecto:

- Stan, es la cuarta vez que tu novia hippie nos ve raro – Cartman se queja, arrastrando las palabras.

- Primero, ya no es mi novia, y segundo, ya lo sé gordo, no tengo idea que pasa.

- Las chicas han estado haciendo eso toda la semana – Kyle dice agudamente - ¿Creen que quieran vengarse por lo que pasó cuando jugamos Quemados?

- ¡Es su culpa! Son débiles, las mujeres no tienen nada que hacer en juegos de hombres. Suficiente tuvimos con dejar jugar al maricón judío de Kyle.

- Tu eres el que perjudicaba el juego porque no podías ni caminar, culo gordo – Kyle dice con calma.

- ¡Hey! Ya dije que no estoy gordo. Tengo huesos grandes. Las mujeres solo tienen como deber cocinar.

- Y follar, como tu madre, ¿No, Cartman? – la voz de Kenny aun sigue siendo opacada por su gorro asfixiante, pero después de años de escucharlo, ya nadie tenía ningún problema en entenderle.

- ¡Cállate, hijo de puta! – Cartman levanta la voz - ¿Por qué tu familia es tan pobre, eh, Kenny?

- Culón, llevas 7 años preguntándome lo mismo, ¿Qué el cerebro no te da para mas?

- ¡Te pateare las bolas, maldito pobretón!

- Ya cállate, Cartman – Stan interrumpe la pelea. Es raro que no sea Kyle el que se embarca en un duelo de gritos con el rollizo chico; esto muestra el grado de paranoia que todos tienen al ver a las chicas de su grado conspirando contra ellos.

- Leí en una página de Internet que hay una secta de mujeres que le cortan el pene a los hombres – Kyle tiembla ligeramente – creo que esa secta ya llegó a South Park.

- ¿Estás seguro? – Craig ve con desconfianza la mesa de las chicas – no dejaré que ninguna perra me corte las bolas.

- Suena un poco descabellado – Stan murmura – ¿Recuerdas lo que pasó con el Bris de Ike?

- Eso fue diferente, teníamos 8 años – Kyle dice con calma – y ahora sabemos que no es todo el pene… solo la punta.

- En la punta está lo mejor, judío – Cartman dice con calma.

- ¿Y tu como sabes, gordo? Dudo que te puedas ver tu pene con esa panza.

- ¡CÁLLATE, LAME CULOS!

- No creo que sea cierto eso, Kyle – Craig ve con duda a los chicos.

- Pero está en Internet – Kyle dice con convicción – de seguro debe ser cierto.

- El sucio judío tiene razón, si esta en Internet, es seguro – Cartman asiente.

- Gracias culón, no esperaba sentido común en ti, pero siempre es bueno que abras tus horizontes en lugar de tu boca – Kyle suelta una risa sarcástica.

- Tengo un horno con tu nombre, judío de mierda – Cartman ve con furia al pelirrojo.

- ¿Y e-entonces las chicas son de esa secta? – Butters interrumpe la futura discusión.

- No hay otra explicación, yo las he visto detrás de la escuela, escribiendo algo. Tenemos que detenerlas – Cartman aprieta los puños.

- ¿Y qué sugieres, gordo? ¿Que vayamos y les digamos que sabemos que son miembros de una secta satánica? – Kenny dice con calma.

- De hecho la secta no es satánica – corrige Kyle – por lo que leí, solo odian a los hombres porque tienen mejores oportunidades y creen que quitándoles el pene les quitan todo el poder. Después se los comen.

- ¡IACKKKK! – todos los chicos en la mesa hacen muecas de desagrado.

- ¡ASCO! – Cartman grita – pudiste dejar eso de lado, judío morboso.

- Yo solo mostraba los hechos… por cierto Stan, ¿Qué Wendy no te mordió una vez el pene cuando te lo estaba chupando?

- ¡AMIGO! – Stan enrojeció totalmente - ¡Eso era secreto!

Todas las miradas estaban ahora en Stan.

- Y no me lo estaba chupando – Stan murmura – se me cayo algo y ella me ayudaba.

- ¿Qué se te pudo haber caído en el pene para que ella te ayudara con los labios? – Kenny levanta una ceja que nadie pudo ver.

- ¡Nada que te importe! – Stan le grita, picando el pecho de Kenny en forma de advertencia.

- Calma, Stan – interviene Kyle – solo lo dije para que veas que quizás Wendy estaba apenas siendo candidata para entrar a la secta. Fuiste afortunado de que no te pasara nada.

- Si, escucha a tu novia – Cartman se ríe – pudiste haberle quitado su diversión.

- ¿Envidia, culón? – Kyle desafía a Cartman - ¿Te pesa que a Stan le pueda chupar las bolas y a ti nunca te las haya chupado?

- Claro que me las chupaste – Cartman lo fulmina con la mirada.

- No, no lo hice.

- ¡LO HICISTE, JUDÍO MARICÓN! – Cartman comienza a ponerse rojo de furia.

- ¿Quieren dejar eso? – Craig golpea la mesa con fuerza - ¡Están asustando a Tweek!

Todos ven al rubio tembloroso, que se resguarda detrás de Craig.

- ¿Y que vamos a hacer? – Token pregunta – no quiero que alguien se coma mi pene.

- Nadie va a tocar tu pene, Token – Cartman dice con burla – va a saber horrible, siendo un pene negro y todo eso.

- Si queremos ganarles y no dejar que nos corten las bolas – Kenny dice para evitar otra pelea – tenemos que saber que planean.

- Podemos matarlas – sugiere Cartman.

- No seas imbécil – Kyle suspira – no podemos matarlas a todas, nuestros padres se darán cuenta.

- Si, no des ideas estúpidas, Cartman – Stan apoya a Kyle.

- ¡HEY! No veo que ustedes propongan cosas – Cartman se cruza de brazos.

- Podemos grabarlas…

La voz temblorosa hace que todos guarden silencio. Butters ve a todos con aprehensión.

- B-bueno… yo solo decía…

- De hecho no es mala idea, rubiecito – Kenny dice con malicia, invadiendo el espacio personal de Butters de manera seductora - ¿Quieres un beso como recompensa?

- N-no – Butters palidece – g-gracias…

- En serio Kenny, eres un pervertido – Kyle niega con la cabeza.

- No es mi culpa que no quieras darme una mamada – Kenny dice con melancolía – Stan, deberías compartir a Kyle, mira que esos labios…

- Coño Kenny, deja de hacer esas bromas, por eso empezó el rumor de que Kyle y yo andábamos – Stan le dirige una mirada de furia a Kenny.

- ¿Era un rumor? – Craig dice con duda – pero pensamos que por eso terminaron Wendy y tu.

- ¿Qué? ¡NO! ¡Wendy quería salir con otras personas!

- Si, Stan se volvió emo por casi un mes – Kyle sonríe – vio 'Chicago' 7 veces y me obligó a escuchar el soundtrack de 'Moulin Rouge' durante dos semanas.

- ¿Ven? Por cosas como estas decimos que andan – Kenny se burla – son mas gays que Cartman.

- Si… ¡OYE! – Cartman toma de la chamarra a Kenny - ¡YO NO SOY GAY, ESTUPIDO POBRETÓN!

- ¿Y como vamos a grabarlas? – Clyde finalmente habla.

- Tengo una idea – Stan dice, atrapando la atención de todos – mañana nos escabullimos antes del almuerzo y…

Por eso Butters está pegado debajo de la mesa, con una pequeña grabadora. Era su misión descubrir que planeaban las chicas… por el bien de los penes de los chicos de décimo grado de South Park. Definitivamente es un mal momento para tener comezón en la nariz.