¿Saben señoritas y caballeros? soy grosera en mis fic, es que algunas veces me aburre mantener un vocabulario lindo y de princesita en la vida normal, hay veces en que tengo que dejarme llevar y darme un descanso, por eso quizá mis fic son así.

Este es el tercer capitulo todo normal, después será más hot, créanme perras. (Les digo así con cariño =), no se sientas ofendidas o ofendidos por favor)

El inglés sólo lo miraba con odio pero involuntariamente su corazón empezaba a bombear con fuerza y a agitarse con demencia dentro de su pecho, además recordó que hace pocos segundos lo que había pasado, esos labios gringos marcando terreno, su lengua húmeda y traviesa profanando su boca e incluso esa manera en la que quería dominar su cuerpo, el que quisiera abusar de él, el que quisiera violarlo analmente de nuevo… ¿Cómo aquello podía calentarlo? incluso conseguía que su verga se parar-

No, aún no. Sus mejillas se oscurecieron por el tono rojo, eso aún no podía pasarle, no el que se pusiera erecto, eso claro que podía ocurrir pero lo que no debía suceder es que gustara de aquellas palabras, no debía excitarse, además no es como si él, un educado y brillante inglés quisiera que le abrieran las piernas y que luego… lubricaran su entrada con una húmeda lengua para meter un grande y erecto pene en su ano. Y no quería gritar como una perra, no quería jadear bajo su cuerpo, no quería sexo gay.

Eso se decía, pero aún así se calentaba.

-Te amo.

-Muere, muere…-susurró- Eres un maldito gay y no quiero tener nada que ver contigo, ve a violarte a otro.

Giró su cuerpo hacia una dirección contraria a la de ese chico planeando que ese encuentro fuera el final de su historia, de todo lo que se pudiera escribir entre ellos dos, sentir y disfrutar a su lado, pero ese estadounidense atentando contra su destino insistió, con una sonrisa heroica y con una fuerza extraña tomándole de una de sus muñecas, esas no eran las últimas líneas de esa historia, era el principio.

-No, a ti no te viole…- trataba de encararlo, pero el inglés se removía hasta que sintió la mano del americano tomándole el rostro –Tú aceptaste, tú me deseas, deseas que te lo haga de nuevo y muchas otras noches, como deseo volver a tenerte en mi cama Arthur.

-¡Para! ¡Stop! ¡Llamaré a la policía y te acusare de violación!

-No es violación cuando el otro lo disfruta- lo arrinconó a la pared juntando sus entrepiernas produciendo diferentes y pronunciados jadeos al comenzarse a mover.

-N-No hagas que me ponga duro… no aquí, no en la calle maldito animal-carraspeó ronco.

-¿Entonces quieres una charla? sólo eso te pido a ti y a tu sexy culo…-le apretó las nalgas con morbosidad, esos pitillos tan apretados eran irresistibles.

El inglés aceptó más enojado que la mierda y casi caliente, no podían estar violándoselo en la calle y él… muy a finales dejándolo, se sentía algo extraño cada vez que esos ojos azules lo miraban y devoraban, quería sentirse más cerca, quería estar desnudo en una cama mientras ese chico se lo cog-

No, puta mierda de quien sea que lo cagó, porque a ese chico no lo parieron, lo cagaron. No quería tenerlo cerca, pero allí estaba como un imbécil en una cafetería bastante gay pidiendo unos refrescos y el tarado estadounidense al otro lado de la pequeña mesa mirándolo con deseo.

-Y…

-¿Quieres saber que pasó esa noche?- preguntó con una sonrisa ese americano.

Traía ropa grande, pero no porque fuera muy gordo, quizá era su estilo, era joven y quizá más que ese inglés, tenía una soberbia sonrisa a veces y una que otra vez una infantil con una picardía oculta. Era un chico interesante.

-No, realmente paso la oferta.

-Pues te contaré al ver que insistes tanto.

Ese chico aparte de idiota era sordo, perfect.

El americano se cambió de silla para estar junto al inglés a quien ya la cabeza le hervía, era un chico, no, un crío tan jodidamente molesto.

-¿Un poco de distancia es mucho pedir?

-Eso no es lo que me decía antes Artie…

-Arthur, me llamo Arthur ¿qué tienes en contra de la puta h, la u y la r? bueno, sólo cuéntame y lárgate.

El americano se acomodó más cerca mientras el mesero les dejaba los refrescos en la mesa, Alfred le agradeció con confianza como si pasara en ese bar con regularidad aunque era obvio, era un bar gay y el inglés se quería matar por estar dentro de éste.

-Era una fiesta como ninguna otra, estaba conversando con un amigo mío, un danés. Y fue allí cuando te vi a ti mi travieso inglés, moviendo tus caderas, excitado al máximo, eras el alma de la noche, todos te miraban con ganas de violarte e hiciste que yo no pudiera apartar de mi vista tu cuerpo, estabas tan acalorado, tu verga estaba parada y apretaba tus pantalones, tu culo se marcaba y uno que otro afortunado te lo estaba tocando al igual que tu pene… yo quería…

-Stop, please stop-decía impactado al ver como lo narraba. -¿Podrías dejar de ser tan mariconamente explicito?

-Bueno, bueno -infló sus mejillas. - ¿En que iba? ah, sí, quería masturbarte… meter tus dedos en tu ano, pero estaba demasiado lejos, el alcohol me llenaba la sangre, quería ser el héroe que te salvara de todos esos pervertidos para luego llevarte a una pieza y convertirme en tu villano.

-Bromeas…-el inglés estaba pálido.

-¡Caminé heroicamente hacia ti!

-¡Degeneradamente querrás decir!

-Y luego llegué, allí estabas, tus ojos se estaban nublando, en cualquier momento ibas a caer y yo seguía con esas ganas locas de cogerte.

-¿Alguien te ha dicho que estás enfermo?- el inglés no podía creer lo que sus poco virginales oídos escuchaban.

-Por eso invente una escusa, diciendo que era tu hermano menor.

-M-Me estás asustando.

-¡Estaba borracho! ¡Ajajaj!-se reía como si la shit fuera muy graciosa, claro, como a él no le dieron por el orto. –Y te hablé, me respondía disparates… toque tu polla, me gruñiste al oído, no fue una conversación muy profunda, te acercaste a mí y agarraste mi pene con ferocidad, luego me miraste y dijiste "Fuck me, now"

-¡Ese no era yo!- el inglés estaba alteradísimo y rojo como tomate.

-Oh claro que eras tú, lo bueno empieza ahora. Te diste cuenta de que todo estaba mal cuando estabas casi desnudo en tu propia casa, nunca había querido follarme a alguien tanto como a ti a decir verdad, me contaste que eras hetero pero que aún así querías que te la metiera con brutalidad.

-Mother fucker- susurró perplejo.

-Bueno Artie, eso fue resumidamente lo que pasó después de la fiesta, ahora te diré como tuvimos sexo.

-No te atreverás -susurró con algo de nerviosismo.

-Oh claro que sí, tú eres mi puto amante, podemos hablar del sexo normalmente…-se acercó más acariciando sus muslos, el inglés trató, sólo trató de no mandarse un numerito allí, por eso no le gritó garabatos a diestra y siniestra.

-Ahh…ahh yo-u…-gimió al sentir una mano hurgar entre sus calzoncillos, lo estaba masturbando allí, no podía ser tan hijo de puta.

-Relax…

-S-Suéltame bastardo…-sus mejillas se sonrojaban y su verga poco a poco se erguía con calor al sentir los dedos del americano apretar su virilidad, sentía su pecho arder mientras su cuerpo comenzaba a tiritar por las sensaciones que producía ese chico en él.

-No, mientras te cuento como lo hicimos…te masturbare, verás que te divertirás como nunca "Sr. hetero".

Y con eso la conversación continuaría pero era claro que Arthur no estaría dispuesto a que le corrieran mano de forma tan descarada, eso creía, pero todo con aquel estadounidense era extraño y pervertido y lo que pasaría en unos cuantos minutos después no sería la excepción. Era un sentimiento nuevo, uno encantador y caliente, a él… lo ponía ese americano.

Y él se juraba hetero, se lo juraba claro, hasta que Alfred F. Jones entró en su vida.

Próximo capitulo hay manoseos y narraciones gay por parte de nuestro poco héroe americano, está caliente y con ganas de cogerse a todo sexual británico que se pueda llamar "Arthur Kirkland" y tenga cejas grandes. Si tienen algún inconveniente díganmelo =)

Este fic va rápido y esa es la idea, follaran como nunca y rara vez no tendrán sexo, pero lo importante es como el simple sentimiento de "quiero follar" pasa a ser amor.

Tengo un fic que se llama "Sexo gay" que es un solo capitulo y es un lemon, pero creo que tengo que arreglarlo, está muy M.

Y ya estoy escribiendo el cuarto capitulo de "Camp gay" =) prepárense.

PD: Con esto dirán ¿Cuándo mierda se hicieron el tatuaje? pronto lo sabrán igual x)