Mil gracias a todas y todos los que han seguido esta historia desde el comienzo, también gracias alos que recién la han conocido y que se han dejado cautivar por la trama.
En verdad, aunque los personajes no me pertenecen, me divertí mucho escribiéndola y leyendo sus comentarios al respecto, no pensé que llegara a ser tan larga.
Espero sea de su agrado y dejen sus opiniones al respecto digo, quién sabe, quizás y hasta me anime a hacer una segunda parte.
¿Mejor?... ¡imposible!-¿Me habla a mi?-inquirió extrañada.
-¡Sí, a ti!-respondió exasperado.
*********fffffffffffffffffffffffffffffffffffffffff fff**************
-¡Maldición!, he olvidado decirle como localizarme- dijo para sí mismo y regresó al lugar. Al bajar de la nave su sorpresa fue grande al ver a aquella mujer junto a su amigo: al fin la había encontrado.
-Tú eres...- pronunció anonadado.
-Hola. Tu amigo me ha contado sobre ti...
-¿Estas segura?- inquirió con sorpresa el príncipe.
-Es lo más lógico Vegeta... era inevitable después de todo este tiempo.
-De todos modos, será mejor que estemos completamente seguros.
-Claro, además de guardarlo solo para nosotros, no quiero que ese tal Broly o Turles se entrometan en esto, esto que es algo tan íntimo-sonrió con un brillo especial en la mirada.
-¿Eso quiere decir que te agrada la idea?- abrazándola.
-Es lo mejor que pudo haberme sucedido-respondió dándole un dulce beso.
Y en eso...
-¡Vegeta, Bulma!-entrando de repente y sin tocar antes.
-¡Ahhg!, ¡maldito Kakarotto, toca la puerta antes de entrar!, ¡además no tienes nada que hacer aquí, es un lugar privado!
-Relájate Vegeta, solo vine a verlos porque escuché que Bulma está... -puesto en silencio por Vegeta quien le tapó la boca enseguida.
-¡Cállate insecto!...
-Vegeta tiene razón... es algo que queremos guardarlo para nosotros dos solamente, así que por favor, no se lo cuentes a nadie.
-¿Ni a Milk?
-Ni a Milk- repuso Bulma.
*************gggggggggggggggggggggggggggggggggg*** ****************
En otro lugar...
Yamcha aún no podía creer que había logrado dar con aquella mujer.
-¿Te comieron la lengua los ratones?-inquirió ella con una sonrisa.
-No... es solo que...
-¿No lo esperabas?
-Así es, no esperaba encontrarte... tal vez para ti y sea un loco, pero de verdad quería encontrarte.
La mujer solo sonrió dulcemente y el beisbolista la secundó.
-¿De dónde vienes?-inquirió ella.
-De, de la Tierra...-contestó torpemente- ¿has escuchado de ese planeta?
-Claro, de hecho... -bajando la mirada por un momento- conozco a una persona de ese lugar.
-¿Y tú?
-Yo... yo vengo desde muy lejos... por ahora solo busco un lugar diferente y cálido en el cual pueda vivir.
-Eres muy linda... -pronunció sonrosado.
Yamcha estaba encantado, aunque no sabá muy bien que decirle. Pero no era el único dominado por el romanticismo. Había una pareja en especial que disfrutaba del momento.
-¿Casarnos?-inquirió la dulce chica del cabello azul.
-¡Si!, imagínate, tú y yo hacia el altar... a mi me gustaría-levantándose de la banca en la cual estaba sentado.
-Pues... sería lindo... -dijo un poco pensativa al tiempo que jugaba con una ramita del árbol bajo el cual estaban.
-Y por eso...-poniéndose de espaldas.
-¿Por eso...?
-¡Te traje esto!-mostrandole una cajita color marrón y dándole una flor.
-Oh... me gustan las flores-sonrió y tomo la flor para luego olorla- pero, ¿qué hay en la... la... ¡achuuu!-estornudando y cambiando la coloración de ojos y cabello.
-No, Lunch, no de nuevo...-pronunció derrotado.
-¡Tableeeeeeeeeeeeeee!-exclamó efusivamente y asfixiándolo con un abrazo.
-¿No estas enojada?
-¡Eres miooooooooooooooooo, eres mi chico maloooooooo!-
-Pe... pero... me asfix... me asfixias... cariño...- trató de decir mientras su rstro se tornaba azul.
-¡Vamos a robar este palacio!, ¡si, seguro tienen algún valioso tesoro escondido para mi!-sacando su típica metralleta.
-¡Alto ahí Lunch!-imitando la voz de Vegeta- ¡dame eso, mujer!-arrebatándole el arma y doblando el cañon.
-Tu... ¡eres un chico malo!-abalanzándose sobre él.
-Si... pero, tengo un regalo para ti, ¿no quieres verlo?
-Bueno... ¿por qué no?
-Mira-sacando de nuevo la cajita y abriéndola, en el interior estaba un lindo anillo- ¿quieres ser mi esposa?-tomándole la mano y viéndola a los ojos.
-Mi chico malo... yo... a... acep... ¡achu!-cambiando de nuevo-¡lo siento!, lo sien... to-pronunció al ver el anillo.
-¿Te casarás conmigo?
-¡Oh, Table!, ¡claro que si!-dándole un dulce beso.
En eso los interrumpieron.
-¿Interrumpimos?
-¡No!, claro que no-sonrió Lunch.
-¡Acabo de pedirle matrimonio a Lunch y ha aceptado!
-¡Oh!, valla, felicidades muchachos, ¿no estas feliz Vegeta?, ¡tu pequeño hermano se casa!, ¡que lindo!
-Jum... a mi me da lo mismo-consu pose de brazos cruzados.
-¡Casense pronto para que así Lunch se embarace pronto y nuestros hijos alcancen a tener la misma edad!- exclamó entusiasmada y con brillo en la mirada, los otros la vieron con preocupación.
-No, no, creo que primero debemos esperar un poco-dijo Luch.
-Yo opino lo mismo que Lunch.
-Mujer, ¿no se supone que no ibas a mencionarlo tanto?
-Vegeta tiene razón Bulma, aquí cualquiera podría escucharnos.
Mientras tanto Yamchay la pelirroja...
-Ya fuimos a comer, ya dimos un largo paseo pero... aún no me has dicho tu nombre, y soy Yamcha.
-¡Ah!, es verdad... yo soy Zangya, gusto en conocerte Yamcha.
-Es un bello nombre... pero, ¿no nos hemos visto antes?
-No lo creo... pero, ahora el pasado no importa.
-Tienes razón-sonrió.
-Eres realmente agradable-dijo la mujer.
-Gracias, pero no es dificil serlo con alguien tan especial como tu.
-Tu realmente eres amable.
-No, no siempre fui así. Alguna vez me comporte como un verdadero idiota, pero al final... aprendí la lección cuando una persona muy especial a la que hice daño encontró a alguien que de verdad la merecía.
-¿Era linda?
-Si... tan bella como tú.
-¿Aún la amas?
-Siempre habrá un lugar especial para ella en mi corazón, pero... ya lo he superado. Bueno, he hablado mucho de mi, ¿qué hay de ti?
-Uhmm...-suspiró- Digamos que fui víctima de las vueltas de la vida, aunque no me quejo, soy de los que creen que las cosas tiene una razón de ser.
-Yo igual, quizas...-
-Si todo eso no hubiera ocurrido no nos hubieramos conocido-interrumpió ella para sorpresa de él.
-¿Sabes?, creo que este es el inicio de algo muy especial... -acarciándole la mejilla.
''''-¡Y en la noticia gigante de hoy les tenemos una bomba!-dijo entusiasmado el conductor.
-Así es Turles, ¡ha llegado la hora!
-¡Digámosla juntos!
El par sonrió condientesbrillantes antes de decir al unísono:
-¡La princesa consorte está embarazadaaaaaaaaa!, ¡habrá un nuevo integranteen la familia real!-dijeron al unísono.
-Y no solo eso-dijo Broly.
-Sino que además: -agregó Turles.
-¡El menor del principado va a casarse con una terrícola!-volvierona decir al mismo tiempo.
-Tal parece que los terrícolas están de moda en Vegita-dijo Turles.
-No solo en Vegita, también en las localidades aledañas-intervino Broly.
-Es verdad, sino, pregúntenle a Aurora 18, la mano derecha de la ahora reina Misa- mientras decía esto apareció una imagen de 18 de la mano con Krilin en una playa de Vegita.''''
-¡Maldita seaaaaaaaaaaaaaa!-
-¡Cálmate Vegeta!, ¡eres un exagerado, de todos modos todo el mundo se va a enterar cuando mi estómago crezca!
-¡Pero van a comenzar a molestar desde ahora!, ¿acaso no entiendes?, ¡tonta!
-¡No me insultes mono estúpido!
-¡Eres una mujer vulgar e insolente!, ¡a mi no me hables así!
-¡Soy tu esposa y te hablo como se me da la gana!, ¡y si tan vulgar soy no te hubieras casado conmigo!
-Hola-entrando de imprevisto.
-¿¡Ahora qué quieres!?-cuestionaron en perfecta sincronización y mirándolo de la misma terrorífica manera.
-Ajay... solo vine a preguntarles si ya no es necesario guardar el secreto-con una gota de sudor en la frente.
-¡Por supuesto que ya no es necesario Kakarotto!, ¡gracias a que esta mujer no sabe cerrar la boca!
-¡Eso no es cierto!, ¡eres un exagerado!- dijo Bulma.
-¡Yo no soy ningún exagerado!
-Vamos, tranquilos ^^
-¡Niega que eres una bocona, Kakarotto está de testigo, niégalo frente a él!
-¡Por supuesto que no lo soy!, ¿¡no es así Kakarotto!?
-Este...-pronunció el acorralado saiyajin.
-¡Eres un amargado!
-¡Yo no soy ningún amargado!
-¡Pregúntale a Kakarotto que te ha sportado desde siempre y te aseguro que no lo negará!
-¡Eso no es verdad!, ¡anda Kakarotto, contesta!
-A decir verdad... Vegeta, a veces eres...
-¿¡De qué lado se supone que estas Kakarotto!?
-Vamos Vegeta, no es para tanto.
-Jum... insecto...
-¿Y qué nombre le pondrán al pequeño?
-No lo se, va a ser un heredero de la realeza, debería ser un nombre que demuestre su poder y supremacía...
-Trunks, mi pequeño bebé se llamará Trunks-contestó sin titubear Bulma.
-¡Trunks!, ¿pero qué clase de nombre es ese Bulma?
-Es un bonito nombre, buena elección Bulma-
-¿Verdad que sí?
-¡Kakarotto!, ¡eres un insecto!
-¿Y ahora qué?-dijo el saiyajin.
-¡Deberías apoyarme a mi!
-Pero Vegeta, creo que Bulma tiene razón.
-Da igual, no debería de preocuparme por alguien que es más debil que yo.
-Eso no es verdad Vegeta, la última vez que competimos te gane con gran facilidad-
-¡No es verdad, yo te deje ganar!
-Por supuesto que no, yo gané.
-Mi hijo será mas fuerte que el tuyo.
-Eso lo veremos-respondió Kakarotto.
-¡Trunks hará papilla a tu hijo en un futuro!
-¡Gohan será el ganador de cada batalla!
-¡Eso solo pasará si Trunks lo deja ganar!
-¡Cuando el padre ha ganado todas las batallas el hijo siempre hace lo mismo!
-¡Esas veces fueron pura suerte Kakarotto!.
Bulma los observó discutiendo y sonrió. En ese momento descubrió lo que era la verdadera felicidad, desde que llegó a Vegita nunca más volvió a sentirse sola, tenía nuevos amigos y lo mejor de todo, tenía a su tan anhelado príncipe azul, muy poco ortodoxo pero seguía siendo un príncipe y lo amaba, y el pensar en la llegada de su hijo no hacía otra cosa más que llenarla de alegría.
Fue así como todos cambiaron sus vidas y lograron su momento de paz a su manera.
De nuevo, agradezco que hayan leído todo y bueno, solo me queda invitarlos a seguir el resto de mis fanfics.
Por ahora, es el fin de esta historia, ¡nos leemos pronto!