POV Bella.

Hoy era otro día monótono, me daba miedo pero estaba cayendo en la rutina, lo único que hago es levantarme, bañarme, desayunar, preparar mis cosas, ir a la escuela, evitar mirar a Edward Cullen, poner atención, no mirar a Edward Cullen, estar con mis amigas, no ver a Edward Cullen, irme a mi casa pero no sin antes evitar mirar a Edward Cullen, por lo regular cumplía todas menos las que se trataban de Edward, si ya se dirán que soy una psicópata, parece ser que sol lo ando acosando, pero por fortuna él no se ha dado cuenta de eso, o eso es lo que yo quiero creer, cuando me cacha mirándolo me hago la despistada y finjo que no lo estaba viendo a él, sino que estaba viendo a Mike Newton, uno de los que están en el grupo de los populares, es desagradable tomar esta opción pero no me queda de otra.

Despierta bella – me dio un codazo mi mejor amiga Alice.

¿Señorita Swan? – si, esa era yo.

Responde – me susurro Alice.

No sé que responderle, ni siquiera sé que me pregunto – le susurre de vuelta.

Señorita Swan – el profesor comenzaba a reprenderme pero lo interrumpieron.

¿Puedo pasar? – se asomo una cabellera rubia.

Adelante señorita Hale – Ella era Rosalie mi otra mejor amiga, ella no estaba con nosotras en esta clase así que suponía que venia a decirnos algo sobre los próximos eventos.

Buenos días – saludo con una radiante sonrisa.

Bueno días – le respondieron la mayoría de los chicos con demasiado animo, a decir verdad Rose era una de las chicas mas guapas de este instituto, no era por alardear pero era rubia natural con unos ojos azules profundos muy bonitos por cierto, su figura era envidiable por todas las chicas, era despampánate y tenia un bonito color de piel.

Les venimos a informar sobre una nueva actividad, que la sociedad de alumnos estuvo de acuerdo por lo de la festividad del 14 de febrero – Rose y Alice se veían emocionadas por algo que yo desconocía, sinceramente a mi no me interesaba nada de lo que tuviera que ver con las actividades, yo simplemente me gustaba estar sola con un buen libro en mis manos – Alice por favor – Alice se levanto de mi lado y comenzó a caminar con su trote grácil de una bailarina.

La actividad es sencilla – sus ojos brillaban de emoción – sé que a muchos de nosotros nos gusta alguien y no se lo han podido decir – me miro detenidamente – este va a ser el momento para que se quiten los miedos y lo intenten.

¿Cómo va ser eso? – pregunto una chica llamada Ángela, ella era muy tímida pero era una buena alumna y una chica extraordinaria.

Es sencillo – continuo Rose – nuestra actividad se llama "Buzón del amigo secreto" – mostro dos casas, una de color rosa y la otra azul – podrán escribirle una carta o un recado a la persona que les gusta y no se atreven a decírselo, y como su nombre lo dice será en secreto.

La actividad comienza hoy tienen tiempo para realizar el recadito que quieren mandarle, pero una vez mandado el primer día se tiene que seguir hasta el 14 de febrero – Alice realmente se veía emocionada – es decir en total tendrán que mandar o recibir 14 cartas.

¿No se podrá decir quien la manda? – pregunto Mike.

Si así lo quieres, lo puedes hacer pero de preferencia no lo hagan – Rose estaba igual que Alice – ya que pueden guardar hasta el día 14 de febrero para decirle a esa persona quien fue el que les estuvo mandando las cartas en estos últimos días.

Las cartas se podrán depositar en los diferentes contenedores que se encontraran regados por todo el instituto – no me interesaba en lo mas mínimo esa actividad, como las anteriores.

¿Cómo sabremos en donde depositar la carta para una chica? – esa era la voz de Tyler.

Es sencillo, si le quieren mandar una carta a una chica solo la tienen que depositar en cualquier contenedor que este forrado de rosa, y si es para un chico de azul – rodee los ojos ante lo obvio que era su pregunta.

¿Y cuando podemos comenzar? – era la voz nasal de Jessica.

Hoy, en la hora del descanso – le respondió Alice.

¿Y cuando se van a entregar? – esa era su amiga Lauren.

Hoy mismo, las cartas se podrán depositar desde la mañana, tienen hasta el descanso para hacerlo, no mas tiempo porque si no a nosotras no nos dará tiempo de entregársela a su dueño – El profesor se la estaba pasando bien, mejor para él que siguieran interrumpiendo su clase, y también para mi así me evitaba que me preguntara algo que ciertamente desconocía por no prestarle la atención que se debía.

¿Tienen alguna otra duda? – pregunto Rose.

Si – Ángela volvió a levantar la mano.

Adelante – la animo Alice.

Si en dado caso no llegara a poder mandar todas las cartas como dijiste que tendría que ser, ¿Qué pasara? – se veía angustiada.

Bueno, ese punto no lo habíamos pensado pero si alguien quiere mandar la carta al chico que le gusta – y nuevamente las dos me estaban taladrando con su mirada y yo les respondí rodando los ojos – nos veremos en la penosa necesidad de decírselo nosotras.

¿Pero porque? – muchos protestaron.

Bueno porque se supone que tienen que participar, así que esperamos que participen, el 14 de febrero habrá una fiesta en el gimnasio y quizás se puedan animar a invitar a alguien de sus admiradores o a alguien que les guste – ambas giñaron un ojo.

Faltan 3 horas para el descanso así que tiene tiempo para comenzar – Dijo Rose toda emocionada.

¿Pero como sabrán que hemos mandado todas las cartas? – pregunto otro chico que desconocía su nombre.

Porque tendrán que registrarse en una lista – las protestas comenzaron – no va a ser su nombre eso es obvio – rodaron los ojos – tendrán que poner un sobrenombre.

Eso es ridículo Alice – el profesor me mando una mira escalofriante.

No lo es – junto sus dos manos – es algo que muy pocas personas se les ocurre, y además no me van a negar que es original – y fue ahí en ese momento que se le ocurrió poner su carita de chantaje a la que nadie se puede resistir, y ellos no eran la excepción – ¿Participaran? – pregunto con la voz mas dulce que tenia y de inmediato todos cayeron rendidos a sus pies, sin excepción alguna.

Si – dijeron todos a coro, todos menos yo, ya conocía demasiado bien esa carita para ser inmune a ella.

Nos vemos antes de que terminen las clases – Rose se despidió de los chicos que solo la miraban embobados – gracias profesor.

No hay de que señorita Hale – el profesor dio gracias a Dios porque sonó la campana dando por finalizada la clase – nos vemos mañana chicos – salió antes que todos y todo el alboroto que se armó me desespero, sin esperar a Alice me Salí del salón para poderla esperar afuera.

¿Participaras? – me pregunto Alice al estar fuera.

No, sabes que yo nunca lo hago – comenzamos a caminar rumbo a nuestras próximas clases.

¿Pero porque? – Hizo un puchero – esta es tu oportunidad.

¿Lo harás tú? – le respondí con otra pregunta.

Tal vez – se encogió de hombros.

Esta es tu oportunidad – imite su voz y solo recibí a cambio un manotazo que era de juego pero aun así dolió.

Bella – se quejo.

Alice – le respondí igual.

Espera un momento – hizo que nos detuviéramos en pleno pasillo transcurrido por los alumnos.

¿Qué pasa? – le fruncí el ceño.

¿Quiere decir que si yo participo en mi propia actividad lo vas hacer tú también? – en ese momento lo que mas me daba miedo era su mirada.

No nada mas tu – la corregí – sino que también Rose.

Se lo diré – comenzó a dar saltitos.

Si la convences lo voy hacer, ahora me tengo que ir porque no quiero llegar tarde a mi clase –me despedí de ella con la mano y me fui.

Adiós bella – me grito.

Así como ya saben me llamo Bella, bueno en realidad Isabella pero detesto mi nombre completo suena como muy formal y no me gusta, la gran mayoría de mis conocidos me llaman así bella, y mis amigas es dependiendo su estado de animo, si están enojadas me llaman Isabella, que casi no lo hacen, nótese el sarcasmo, por lo regular se enojaban por que no quería acompañarlas a sus compras de cada semana, si me gustan las compras pero no en exceso como a ellas, y como toda típica adolescente tengo un amor platónico, digo platónico porque el ni enterado de mi existencia esta, como sabrán me gusta Edward, no puedo decir que este enamorada porque es casi nada lo que se de él, Edward Cullen es el chico mas codiciado de todo el instituto de forks, es soltero por supuesto que lo es, ¿la razón? Es porque no dura con ninguna chica, se dice que el solo las utiliza para una sola cosa, pero no lo puedo garantizar son solo rumores, rumores que quizás sean de chicas despechadas que Edward no le interesan en lo mas mínimo.

Ahorita mismo me estaba dirigiendo a una de las clases que compartía con él literatura cabe decir que a pesar de la fama de don juan que tenia también era uno de los excelentes alumnos. No me sentaba con él esta clase, ¿Lo notaron?, si bueno dije que en esta clase no pero en dos clases mas si me siento con él, pero eso de nada me sirve porque simplemente no se ha dado cuenta de mi existencia, solo cuando la ocasión lo amerita y eso son las actividades que pone el profesor, para no son obligatorias pero quizás para él si lo sea.

Gracias por llegar a tomar la clase señorita Swan – me sonroje ante su comentario.

Lo siento – susurre y pase a tomar mi lugar con Jasper, a pesar de que es mi compañero solo nos damos un escueto "Hola", ya que también es uno de los chicos populares del instituto y mejor amigo de Edward, el amor platónico de Alice y uno de los seis chicos mas codiciados del instituto, era alto, rubio y ojos azules piel pálida pero musculoso, no en exceso pero si lo suficiente para dejarte con la boca abierta cuando salen de los vestidores sin playera, hay veces que pienso que eso lo hacen apropósito porque les gusta ver las reacciones de las chicas al verlos así, Alice, Rose y yo tratamos de disimular que en verdad no nos interesa en lo absoluto lo que ellos hagan pero sabemos las tres que solo son las apariencias que estamos dándoles a los demás.

Hola bella – me saludo cortésmente Jasper.

Hola Jasper – me senté en mi lugar evitando hacer mucho ruido.

Pensé que ya no llegarías – sonrió un poco.

Si, lo mismo pensé yo – le seguí el juego.

Temía quedarme solo en esta tortura – Jasper era un chico divertido, pero como ya dije solo nos hablamos en las clases que compartimos o cuando nos vemos por los pasillos, tampoco somos los íntimos amigos que nos contamos todo.

Que cosas dices – me reí disimuladamente – si hablas de tortura creo que te referías a historia – él y yo habíamos hecho un trato él me iba ayudar en Historia así como yo con Literatura.

Señor Whitlock y Señorita Swan, serian tan amables de prestar atención – genial era la segunda vez que me llamaban la atención por no poner atención.

Si profesor – respondimos los dos al mismo tiempo y nos reímos de nuevo disimuladamente.

Ambos pusimos atención a lo que el profesor estaba diciendo pero nuevamente mi mente estaba viajando a otro lado, sopesando la posibilidad de hacer lo que me había dicho Alice y pensándolo bien no iba a ser mala idea, y como dijeron él nunca iba a saber quien era yo, solo me faltaría pensar cual seria el sobrenombre que utilizaría, y las cartas, que le voy a poner, tal vez piense que es muy cursi lo que le escribiré; pero pensándolo bien apuesto a que yo no seré la única que le escriba y no creo que él le ponga atención en una simple carta de entre muchas de las que va a recibir, pero claro puedo utilizar mi segundo nombre, nadie solo Alice, Rose y mi familia sabe que me llamo Marie ese va a ser mi seudónimo, ni tanto porque así me llamo de verdad pero es algo que eso ni él mismo va a saber.

¿En que piensas bella? – Jasper hizo que regresara a la tierra.

En nada Jasper – él no tenia que saberlo – es que la clase es tan aburrida – solté un bufido.

Vaya – levanto las cejas – hasta que piensas lo mismo que yo – dijo a modo de broma – ¿Bella? – Levante la vista para ver que era lo que le pasaba – sé que no somos amigos – hizo una mueca – pero necesitaba pedir un consejo, ya sabes de chicas.

¿Por qué? – no era por mala onda pero él tiene amigas y puede preguntárselo a ellas, no es porque me molestara solo era simple curiosidad.

Ya sabes a veces es mejor que te de un consejo alguien que casi no te conoce, sin miedo a que te juzguen por lo que haces – se encogió de hombros.

Venga dime – estaba esperando a que continuara pero solo se quedo cayado.

¿Ya sabes de la nueva actividad que están realizando las chicas? – me miro esperando una respuesta de mi parte.

¿Lo del amigo secreto? – Alice y Rose eran las encargadas de hacer las actividades, eran populares por eso pero a ellas no les gustaba eso así que se alejaban mucho de los que solo buscaban regocijarse en su "Fama" por así decirlo, ellas no se hablaban con ninguno de los que eran del equipo de futbol, había excepciones pero por nada del mundo les hablaban a Jasper, Emmett y Edward. ¿La razón?, la misma sobre los rumores, y además porque gustan de ellos.

Si esa – se puso serio nuevamente, como si estuviera sopesando la idea de continuar con lo que le estaba rondando en la cabeza.

¿Qué pasa con ella? – no hablaba y así yo no podía entender que era lo que le estaba pasando.

¿Vas a participar? – la pregunta que me hizo me tomo por sorpresa.

Quizás – me encogí de hombros – ¿Lo vas hacer tú? – pregunte con algo de duda.

No lo se – se veía frustrado.

¿Te gusta alguien? – era una pregunta ilógica.

Si, pero ella no me hace caso – eso si me desconcertó.

¿Quién no le haría caso a Jasper Whitlock? – pregunte sorprendida.

Ella – no me decía él nombre y no lo quería forzar para que así lo hiciera.

Pues no lo pienses más y díselo, para eso esta esa dichosa actividad – me encogí de hombros y dirigí mi mirada al frente.

No es tan sencillo – hablaba en susurros.

Bueno ya sabes él que no arriesga no gana – era ilógico que lo dijera porque yo misma hace unos minutos no sabia si realmente escribirle, pero era una situación diferente porque sé que a él nadie se le podría resistir, así que no entendía su problema.

Gracias – me sonrió – es un gran alivio platicar con alguien.

De nada – le sonreí.

Al salir de la clase me dirigí al salón de computo, no me iba a arriesgar a escribir la carta a mano, si es que Edward Cullen llegara a leer mi carta no quería que se diera cuenta tan fácilmente que yo también me moría de ganas por que me dirigiera de menos una mirada. Iba a seguir el mismo consejo que le había dicho a Jasper, "El que no arriesga no gana". Me fui a sentar en una de las sillas mas alejadas de todas para que nadie se diera cuenta a quien iba dirigida mi carta y también para que nadie viera quien era para que así no le fueran con el chisme de que era yo una de tantas. Al pasar media hora de concentración considere mi carta presentable, solo la imprimí teniendo cuidado de que nadie se diera cuenta, tendría que ir a comprar un sobre pero ahorita ya no me daba tiempo.

Toma – me lleve tremendo susto al escuchar la voz de Alice en los pasillos.

Dios, pero que susto – mi corazón estaba bombeando mucha sangre haciendo que latiera demasiado rápido.

No exageres – rodo los ojos – ten – me tendió un sobre.

¿Qué es esto? – sonrió.

Es un sobre – dijo como quien no quiere la cosa.

Sé que es un sobre, pero ¿Por qué me lo estas dando? – le pregunte.

Porque sabia que lo ibas a necesitar – el sobre era de un azul metálico, muy hermoso por cierto – ya sabes para que metas ahí tu carta y puedas depositarla en uno de los contenedores.

¿Cómo sabes que he escrito una carta? – la mire sospechosamente.

Bueno – tomo aire – porque la traes en la mano – cuando dijo eso la oculte de su vista – y dos por que sabia que no ibas a desaprovechar la oportunidad para no hacerlo.

¿Ya la hiciste tú? – entrecerré los ojos.

Por supuesto – me la enseño ya dentro de su sobre de un verde bosque.

¿Y la de Rose? – pregunte.

Aquí esta – me enseño un sobre Rojo – y no te preocupes por los sobres dejare uno cada día en tu casillero, del mismo color.

Puedo comprar yo uno gracias – su sonrisa se ensancho aun mas.

Que dices – me miro.

¿Por qué tiene que ser del mismo color? – pregunte.

Bueno porque así tu carta va a ser muy original, sé que muchas de las chicas usaran el sobre blanco y los chicos ya sabes que no todos son tan detallistas – se encogió de hombros.

Pero es muy llamativo – me queje.

Es su color favorito – me sonroje al instante.

¿Y el de ellos es el verde y rojo? – pregunte retóricamente.

No, pero son uno de los nuestros – me respondió como si nada.

¿Y yo porque no puede escoger simplemente uno que me gustara? – le fruncí el ceño.

Porque sabía que ibas a elegir el mismo que te estoy dando en este momento – rodo los ojos.

Bien – doble cuidadosamente la carta para poder meterlo en el sobre y esconderla de la vista de todos para que no se dieran cuenta de quien era – vamos a depositarla antes de que me arrepienta.

POV Edward.

Estábamos en el mes del amor y la amistad, no me gustaba mucho estas fiestas y mas porque ahora se les había ocurrido hacer una actividad del "Buzón del amigo secreto", este consistía en mandarle una carta a la persona que te gustaba por 14 días consecutivos, en ella le declararías tu amor y blah, blah, blah. No estaba interesado en participar en esa actividad, no me llamaba la atención, siendo sinceros no tenia a quien escribirle creo que por eso es que no me llamaba la atención, todas las chicas que están en el instituto ya habían pasado por mi, a excepción de Alice, Rosalie y su amiga que se me había olvidado su nombre, no era muy bueno recordando nombres, y si recordaba los de ellas es porque eran las únicas que estaban metidas en eso de las actividades de la escuela. Justo para el 14 de febrero se iba a organizar un tipo convivio con todo y baile, se suponía que era la chica la que elegía con quien ir al baile, no estaba dispuesto a que pasara lo mismo que los años anteriores, esta vez simplemente no me presentare.

¿Y entonces? – Jasper me estaba pidiendo una respuesta a una pregunta que yo no había escuchado – ¿Qué dices? – se veía entusiasmado.

¿Sobre que? – esa pregunta solo ocasiono que se riera de mi.

Te estaba diciendo que iba a participar en la actividad – rodo los ojos.

¿Para que? – no le encontraba lógica a lo que me estaba diciendo.

¿Cómo que para que Edward?, pues es mas sencillo que así se lo diga – claro, mi amigo Jasper se había enamorado, no nos había querido decir de quien y yo respetaba su privacidad.

No le veo el chiste, tu puedes tener a la chica que quieras – me recargue en mi silla, estaba por comenzar la clase de literatura.

Si, pero ella es especial – sus ojos le brillaron, no tenia nada en contra de esa chica, al contrario me alegraba que hubiera logrado enamorarlo, solo que a mi no me gustaba esas cosas del romanticismo, no creía en nada de eso, que te hace cambiar y que solo quieres estar con ella y nada mas, eso solo lo veía como una perdida de tiempo yo prefería ser libre, no tener una novia que solo me esté celando y queriendo saber en donde estoy.

Entonces solo hazlo – creo que no le pareció mi respuesta porque me frunció el ceño.

Algún día te vas a enamorar – me amenazo.

Esas cosas no son para mí y lo sabes – yo no caía tan fácilmente, creo que por eso habían inventado muchos rumores sobre mí.

Ya lo veremos – se fue a su lugar que compartía con una chica que sinceramente se me había olvidado su nombre, y eso que compartía clases con ella y además de eso también la banca.

Gracias por llegar a tomar la clase señorita Swan – ella, esa era la compañera de Jasper y mía, creo que no era educado hablarle sin saber como se llamaba de menos ahora podía recordar que era Swan, su nombre era corto pero aun así no me llegaba a la cabeza.

Lo siento – susurro la chica algo sonrojada por el comentario que había hecho el profesor.

Se acercó a su lugar y compartió unas cuantas palabras y miradas con Jasper, no sabia de que estaban hablando pero por lo que pude observar era que se estaba riendo disimuladamente para que el profesor no se diera cuenta de eso, quizás era ella la que había robado el corazón de Jasper, no la conocía pero solo esperaba que no fuera ella, no tenia nada en contra pero creo que ella no es la correcta para él, él necesita alguien más, no a ella.

Señor Whitlock y Señorita Swan, serian tan amables de prestar atención – la voz del profesor hizo que mis pensamientos regresaran de donde se habían ido, ni cuenta me di que mis puños estaba cerrados fuertemente, tanto que cuando los abrí dolió.

Si profesor – respondieron los dos al mismo tiempo ocasionando que volvieran a reír juntos, deje de prestarles atención para dirigir mi vista al pizarrón, de vez en cuando podía notar que Jasper seguía hablando con Swan y esta a su vez le respondía pero una que otra vez con el ceño fruncido, nunca había sido un chico metiche o curioso pero ahora mismo quería saber de que era lo que estaban hablando ellos dos. Por estarles prestando la atención que debía de haber sido para la clase ni cuenta me di cuando se termino, solo hasta que Jasper llego a mi lugar para que los dos nos fuéramos a la siguiente.

¿Nos vamos? – me pregunto.

Edward – la voz de una chica me hablo a mis espaldas, Jasper y yo dirigimos la mirada para ver de quien se trataba.

¿Qué es lo que necesitas Jessica? – mi voz sonó cortante, tanto que hasta me sorprendí de ellos.

Solo quería saber si tenias intención de pedirme que saliéramos – Jasper solo rodo los ojos.

Yo no puedo Jessica – estaba tratando de ganarme tiempo para ponerle una excusa.

¿Por qué no? – pregunto sorprendida por qué la rechace.

Tenemos un trabajo pendiente que hacer – se me adelanto Jasper.

Bueno – hizo una mueca – quizás sea para la próxima.

Tal vez Jess – no quería que se hiciera ilusiones conmigo, no estaba para tener una relación.

Nos vemos Edward – me dio un beso en la mejilla, que sino es porque me muevo juro que me besa – Adiós Jasper – se fue meneando sus caderas.

Adiós Jessica – le respondimos Jasper y yo al mismo tiempo.

¿Qué ocurre? – me sorprendió su pregunta.

¿De que me hablas? – me había perdido de un tema de conversación.

¿Por qué no saliste con ella? – sus ojos se agrandaron.

Hoy no tengo ganas – hice una pausa – quizás mañana la invite, vámonos.

Las clases siguientes se pasaron muy deprisa y el descanso ni que se diga, todos andaban muy emocionados por lo de la dichosa actividad, incluso Emmett y Jasper, aunque claro Emmett no había mandado ninguna carta estaba ansioso por ver cuantas le llegaban a él, Jasper solo estaba nervioso porque su chica le hiciera caso y bueno yo, a mi no me interesaba eso, simplemente ya me quería ir a mi casa a descansar de todo este caos que se había creado gracias a la dichosa actividad.

¿Cuántas crees que reciba? – pregunto Emmett muy emocionado.

Tal vez no recibas ninguna – decidí que era el momento indicado para molestarlo.

Muy gracioso Eddy – ush como detestaba que me llamara así.

¿Creen que la lea? – esta Jasper muy nervioso, cosa rara en él.

Sin duda – le respondió Emmett – ¿Qué sobrenombre utilizaste?

Eso no se dice Emmett – lo regaño Jasper.

Ándale dime – alegaba Emmett, yo solo veía como se estaban comportando los dos

Chicos – se acercó a nuestra mesa Mike, Tyler, Erick y Ben.

Que onda – dijimos los tres a coro.

¿Ya mandaron sus cartas? – creo que las chicas tenían razón en algo, algunos hombres son mas chismosos que las mujeres.

No mandamos ninguna, nosotros esperamos a que lleguen las nuestras – Emmett le respondió con una sonrisa marcada en el rostro respondiendo por Jasper y por mi.

Que mal – dijo Tyler.

¿Ustedes si mandaron? –les pregunte para sacar tema.

Claro – dijeron los cuatro.

¿Se puede saber a quien la mandaron? – pregunto Emmett curioso.

Bella – dijeron Tyler, Mike y Erick al mismo tiempo.

¿En serio? – pregunto Jasper, yo no sabia quien era esa chica – ¿Los tres se la mandaron a la misma chica? – Jasper estaba que se moría de la risa.

Yo no sabia – dijo Mike.

Pensé que yo iba a ser el único – siguió Tyler.

A mi no me interesa que ustedes también se la hayan mandado a ella – se encogió de hombros Erick, les quería preguntar de que chica estaban hablando pero decidí que eso no era algo que me importara.

Da igual – me encogí de hombros – tal vez no les haga caso – Emmett y yo nos reímos pero Jasper se quedo serio, quizás por que él era el único de nosotros que había mandado su carta.

¿Y tu Ben? – le pregunto Jasper cuando Emmett y yo nos calmamos.

Yo se la he mandado a Ángela – esa era otra de las chicas que yo desconocía.

Le gustas – le dijo Jasper.

No lo se, pero no pierdo nada con decírselo – sonrió imaginando algo que yo desconocía.

Bien, es hora de irnos a nuestras clases – me levante de mi lugar para llevarme conmigo mi bandeja fue en ese momento que sentí la extraña sensación de que alguien me estaba observando, fije mi vista en varios lados hasta que note un par de ojos color chocolate que miraban fijamente a Mike, una de sus admiradoras pensé y nuevamente me dirigí a la salida.

Nos vemos después chicos – se despidió Emmett que en ese momento tenia trigonometría.

Nos vemos en la salida Edward – a Jasper en este momento le tocaba química – haber con cuantas cartas sales Emmett – Jasper se estaba burlando de él pero sabíamos que si iba a recibir cartas, de menos una pero la iba a recibir, las chicas andaban detrás de él desde que supieron que Emmett había terminado su relación con Victoria – lo mismo va para ti galán – me dio un pequeño codazo.

Ya veremos – suspire de cansancio, haber cuantas cartas recibía hoy, si es que llegaba a recibir, lo mas probable es que fueran de las mismas chicas de siempre, que solo buscan ser mis novias pero ya he dicho que eso no es para mi.

Me dispuse a seguir caminado para ir a tomar mi siguiente clase, biología era una delas clases que mas me agradaban, llegue antes de que el profesor llegara, en mi lugar ya estaba la chica de la cual no sabia su nombre pero si su apellido, y eso porque lo había escuchado hoy sino, no podría haberlo recordado. Me senté en mi lugar sin hacer mucho ruido para no desconcentrarla de lo que estaba haciendo, me quede observando por la venta que ni cuenta me di de que ya había llegado el profesor hasta que escuche la voz de Alice.

¿Profesor podemos pasar? – gire mi cabeza para verla a ella y a Rose fuera del aula con unas bolsas en cada mano.

Adelante pidió el profesor – creo que era mejor para él que interrumpieran su clase.

Gracias – las dos se pusieron al frente – es hora de entregar las cartas – sonrieron las dos, genial lo que faltaba que en mi clase favorita vinieran a entregar las dichosas cartas – empezaremos por las chicas.

Fueron pasando nombre por nombre entregando las cartas había unos que recibían hasta dos cartas por persona, me puse mis audífonos, no quería saber quien había recibido y quien no, vi como mi compañera se levantaba con un sonrojo a recibir sus cartas, era sorprendente ver que traía mas de cinco cartas, regreso a su lugar con la cabeza agachada y el sonrojo mas pronunciado que antes, estaba tan perdido en la música que cuando sentí el ligero toque de mi compañera me sobresalte logrando que ella se sonrojara y bajara la mirada, me quite uno de los audífonos para escucharla mejor.

Te hablan – susurro, gire en todas direcciones para saber quien era la persona que me estaba hablando.

¿Quién? – tuve que preguntar al no ver a nadie.

Es para que pases a recoger tus cartas – dijo en un susurro, no pude apreciar bien su voz, pero si entendí lo que me estaba diciendo.

Oh – me sorprendí al ver a Alice y Rose ahí paradas esperando a que pasara por mis cartas – gracias – no agregue nada mas porque no se me sabia su nombre que oso, me levante con cuidado para pasar por ellas, era sorprendente ver cuantas había recibido, no me quería ni imaginar de quienes eran, solo unas cuantas de ellas me llamaron la atención pero en especial una la de un sobre azul metálico, quería saber que era lo que venia dentro pero no me quería ver tan obvio, tendría que ser paciente y esperar a llegar hasta mi casa, en fin no creía que fuera la gran cosa, ese pensamiento hizo que mis ganas de leer esa carta desapareciera así como había llegado, al tomar mi lugar pude notar que mi compañera estaba sonrojada, en sus manos tenia una carta, quizás sea por algo que había leído, pero ¿Qué me estaba pasando?, de cuando acá me interesa saber que es lo que les pasa a las personas que en mi vida les he hablado, me gire bruscamente y de nuevo ese sobre azul metálico había captado mi atención. ¿De quien será?, ¿Qué es lo que dirá?, varias preguntas me estaban rondando en la cabeza, pero simplemente decidí omitirlas, tendría que esperar a que llegara a casa para leerlas, si es que me acuerdo.