Los personajes de Inazuma Eleven no me pertenecen le pertenecen a Level-5.

Fudou Akio sentía la presión, el corazón lo tenía a mil por minuto, además de sentir que se le cortaba la respiración, estaba enfrente de la chica que había dejado olvidada por una tontería que era culpa de sus amigos, trato de calmarse, pero la mirada de ira de la chica no lo dejaba en paz, esperaba una respuesta que no fuera tan mala, sin embargo Fuyuka Kudou estaba molesta y se notaba.

Ella se levantó de su silla, miro al chico y… le tiro en la cara un pedazo de un pastel de fresa que había ordenado anteriormente, lo cual provoco que él chico se sorprendiera y se molestara por el pastelazo en la cara, él se limpio el rostro, los trozos del pastel que tenía en la cara los arrojo al suelo, luego de eso vio a los ojos a la chica con el cabello violeta.

—Como sea, se que "tal vez "me merecía esto, pero ya me disculpe. —se excusó el chico semi-calvo—. Además sabes que no me gusta el pastel de fresa.

—Llevo casi todo el día aquí sentada, esperándote, y…. tú sabes que me gusta el paste de fresa, que a ti no te guste no es mi culpa, si hubieras llegado a tiempo hubieras estado conmigo para pedir algo que si te guste.

— ¡¿Entonces crees que estoy mintiendo?!

—No, claro te creo tanto que estoy muy feliz. —dijo Fuyuka con obvio sarcasmo que fue fácil de detectar de parte del chico.

—Así, bueno, Fuyuka, ya te explique que no es mi culpa. —aclaró Fudou mientras todos en el restaurante se les quedaban viendo, y de la nada una mesera se acerco a ambos, pero en especial a la chica.

—No debiera perdonarlo. —susurró la mesera a la chica, sin embargo el chico también escucho.

— ¡Usted ni se meta, no es su asunto!

—Ya le dije no le haga caso, después se aprovechan.

—Deje se decir eso señora vieja.

—No estoy casada.

—Entonces… ¿Acepta que esta vieja?

— ¡Claro que no, soy muy joven aún!

—No me interesa, lo que me interesa es que me deje en paz con….

—Su novia.

— ¡No es mi novia! —exclamó molesto el chico mientras su ira aumentaba.

— ¿Entonces… no la quiere? —preguntó la mesera para fastidiar a Fudou.

—Yo no quise decir eso…. ¡Bueno ya basta déjenos solos!

—Como quiera. —dijo fastidiada la mesera mientras se acercaba a la chica y le susurraba algo—. No le haga caso.

— ¡Escuche eso! —gritó molesto el semi-calvo mientras la mesera se retiraba dejándolos al fin a ambos solos.

—Fuyuka mira yo…. —intentó decir Fudou, pero fue interrumpido por la chica quien se levanto de su asiento.

—Fudou, yo…

Y en ese instante Fuyuka Kudou cayó desmayada al suelo en frente de los ojos del chico, Fudou se quedo impactado por tal hecho y se quedo mirando fijamente al suelo donde yacía la chica, sin poder reaccionar por la gran impresión pues no se esperaba eso, mucho menos ver a los responsables de haber hecho eso. El chico semi-calvo miro hacia arriba y vio…. A sus dos amigos con una bandeja en las manos bueno a Sakuma con una bandeja en la mano.

— ¡¿Acaso están locos?! —preguntó alterado Fudou—. ¡Pudieron haberle hecho algún daño serio, haberle roto la cabeza! ¡Estoy furioso! ¡Estoy a punto de matarlos a ambos, pero tengo cosas que hacer! —luego de gritar cargo a la chica y miró a sus amigos con desprecio, para después suspirar e irse del restaurante mientras cargaba a la chica con cabello violeta.

—No lo entiendo, Kido, ¿Siempre nosotros tenemos que tener la culpa?

—Sakuma la golpeaste con una bandeja de plata en la cabeza, ¿Cómo Fudou no se iba a enojar?

—No lo sé, el siempre nos hace lo mismo.

—Pero Fuyuka es una chica.

—Ya lo sé, pero es que…. Yo le quería dar a Fudou, sin embargo me confundí y bueno, ¿Quieres comer algo?

—Claro, ¿Por qué no? ¡Oh, espera ya recuerdo! ¡Estuviste horas hablándome de tu estúpida telenovela!

— ¡No es cierto! Fue menos de una hora y ni siquiera te conté el principio.

— ¿Cómo? ¿Ese no era el principio?

—No de la segunda parte. —comentó el chico con parche.

Ambos chicos iniciaron una conversación sin sentido alguno, eso molestaba un poco al chico con capa, pues ya estaba cansado de escuchar a su amigo, sin embargo, se quedo escuchándolo... porque tenía la necesidad de tomarse una taza de café y como ya estaban en un restaurant, ya no había que estar buscando alguna cafetería.

Él corría rápidamente para poder llegar a su casa, estaba nervioso, molesto, decepcionado, e irritado porque todo en ese día tan especial se había arruinado por sus amigos. Por un momento se paró en seco, volteo a ver a su alrededor y se dio cuenta de que estaba en frente de la escuela Raimon, lo único que se le vino a la mente fue un recuerdo de uno de las muchas veces que había visto a la chica del cabello violeta, pero según Fudou, esa vez fue distinta, fue… especial. Suspiro pesadamente, movió su cabeza de un lado a otro tratando de negar el hecho de haber perdido la oportunidad de ya no poder pasa tiempo con ella.

Sí, Fudou Akio, el chico malo, había desarrollado sentimientos completamente románticos hacia una chica, y no cualquier chica, tenía que ser Fuyuka Kudou, la hija del entrenador más estricto que puede existir. ¿A él le importaba? Realmente no, solo le interesaba tenerla cerca, poder verla, disfrutaba observarla de lejos… así es como él pensaba antes, sin embargo, sintió la urgencia de tener una cita con ella. ¿Por qué? Simple, se dio cuenta de que tenía competencia. ¿Quién? Fácil, Endou Mamoru, el mejor amigo de la chica, aunque odiara admitirlo así era y no podía cambiarlo, pero si había lago que podía cambiar, podía cambiar los sentimientos de Fuyuka hacia él. Y así fue como pasó, el chico semi-calvo logró conseguir acercase más a la chica del cabello violeta, tanto que ambos acabaron sintiendo extrañas sensaciones cuando se tenían cerca.

Mientras pensaba, no se dio cuenta que había avanzado tanto, que llego a la puerta de su casa.

—Espero no haber dejado la puerta con llave. —deseó el chico castaño para luego intentar abrir la puerta y darse cuenta que la había dejado abierta—. Hum… ¡Qué suerte!

Entró, subió las escaleras, abrió con una patada la puerta de su habitación y acostó a la chica en su cama. Volvió a suspirar, vio a su alrededor, notó que su cuarto era un desastre, estaba completamente desordenado, sintió ganas de dejarlo así, pero… ¿Fuyuka estaba allí? No iba a permitir que estuviera que todo pareciera un basurero.

Así que hizo lo que cualquier chico hubiera hecho… comenzó a recoger todo. Trajo una escoba, comenzó a barrer, después de barrer, tomo la aspiradora. Siguió así hasta dejar su habitación limpia, totalmente limpia, miró de nuevo a su… ¿futura novia? Bueno por ahora era Fuyuka Kudou, "la chica de perfecta". Él semi-calvo pensó eso, para después sentir un gran calor que invadió su cara, se había sonrojado por completo, ¿cómo era posible que ahora pensara eso? ¿Ahora era un tonto enamorado?

Se agarro el cabello y trato de no gritar para no despertar a la chica. De nuevo tomo sus manos y se las llevo a la cara. Se sentía sofocado por sus sentimientos, no quería a Fuyuka Kudou… realmente no se desvivía por ella, si no que la amaba y se moriría por ella si fuera necesario.

Las dudas invadieron su mente. ¿Qué tal si ella lo rechaza? ¿Seguirá creyendo qué es un mentiroso? ¿Se tranquilizara o se alteraría? No pudo encontrar ninguna respuesta y tampoco pudo formular una solución. Pues… la chica del cabello color violeta había despertado.

— ¿Fudou...? —preguntó Fuyuka, mientras se acomodaba en la cama.

—Fuyuka…

— ¿Qu-Qué ha-hago aquí?

—Te desmayaste en el restaurant y te traje a mi casa.

— ¿Por qué…?

—No sé me ocurrió otra idea…

—No me refería a eso…

— ¿Eh?

—En primer lugar, ¿por qué me invitaste a salir a mí? No creo ser la gran cosa y… en lo personal, pensé que no te caía bien. —aclaró Fuyuka, dejando completamente en blanco a Fudou.

¿Y es que acaso ella no sabía lo mucho que a él le importaba? A lo mejor, Fudou no se había portado excelente, y tampoco había dejado muy claro cuáles eran sus intenciones, era lógico que ella pensara eso… además llegó tarde a la cita después de que fue él quien la había invitado. Aquello rondaba por la cabeza de la chica de los ojos azules, el chico simplemente la vio y miró hacia la ventana.

— ¿Cómo mantienes una imagen ante los demás que no quieres arruinar? —preguntó el semi-calvo.

—No lo entiendo…

—Es normal, mira, no quería que Sakuma, Genda o Kido se enteraran de que… —intentó hablar, pero un gran sonrojo apareció en su rostro, definitivamente no le salían las palabras, se le habían quedado pegadas en la garganta como espinas.

—Fudou, tú eres alguien al que realmente desconozco, sin embargo, hay algo de ti que no sé… me hace pensar todo el tiempo en tu forma de ser y en tu mirada llena de muchas cosas ocultas.

—Fuyuka…

—No es necesario, si solo fue una locura invitarme a salir o una mala broma, está bien… importa. —habló la de los ojos azules para después levantarse de su lugar y mirar a Fudou a los ojos, bajo su mirada, se levanto de la cama, y se dirigió a la puerta.

Él no lo soporto más, camino hacia la chica, la jaló e hizo que ambos se vieran a los ojos, sus miradas se conectaron y de nuevo fue como si el tiempo se hubiera detenido, como si solo escucharan los latidos de sus corazones.

— ¡Fuyuka Kudou escúchame! Yo… estoy… enamorado de ti.

— ¿Enamorado? —preguntó extrañada la joven para después sentir como el chico se acercaba a ella.

Fudou intento acercarse más de lo normal a la chica, por supuesto que ella no se opuso, se había quedado con la mente en blanco con esa confesión. Sin dar tiempo a pensar en más el chico castaño la besó, y la de los ojos azules, no hizo nada más que corresponder el beso, se dejo llevar por sus sentimientos que llevaba por dentro ahora sus emociones estaban conectadas, lo que ambos sentían en ese mismo instante era una conexión especial incomparable. Y después del beso se abrazaron con fuerza, como si el mundo se fuera a acabar.

—Lamento haber llegado tarde.

—Perdón por enojarme así.

—Te prometo que tendremos nuestra cita.

—Fudou… —llamó la chica para después vele a los ojos y suspirar—. ¿Cómo fue que me desmaye?

—Ah… bueno… —comenzó a hablar el chico, luego recordó lo que pasó y se quedo callado.

—Si no me vas a responder esa… respóndeme esto… ¿cómo se supone qué perdiste la memoria?

—Pues… digamos que Sakuma y Kido ayudaron.

— ¿Te lastimaron?

—Algo así… la verdad, solo recuerdo haberme caído a una alcantarilla por culpa de ese Superman y nada más… luego cuando recupere la memoria… —explicó Fudou mientras recordaba lo que pasó, luego a su mente se le vino algo muy importante—. ¡Mi venganza!

— ¿Qué cosa?

—Es que... para vengarme de lo que me hicieron esos dos… este… practique mi don de la venganza.

— ¡Fudou! ¿Qué tal si se lastiman con lo que hiciste?

—Bueno, pues no sé si ya la vieron o si todavía está igual.

—Tienes que ir e impedir que algo malo pase.

—Pero… estoy ahora contigo…

—Sé que hoy no tuvimos un buen día, pero me sentiría mejor si hicieras esto por mí. —admitió Fuyuka mientras sonreía tiernamente provocando un pequeño sonrojo.

—Bien… lo hare... acompáñame hay que detener la trampa.

Así la pareja salió de la casa, comenzaron a correr y correr…

Junto a él habían muchos periodistas y personas importantes, pues era una persona de la alta sociedad, además de ser considerado influyente entre las grandes masas. Era ese tipo de persona estricto que le gustaba llevar el control de su vida, era el padre de Kido Yuuto, quien iba a tener una reunión y una conferencia en su casa, sin embargo cuando abrió la puerta de su casa termino llevo de miel.

— ¡¿Qué es esto?! ¡Yuuto! ¡¿De nuevo dejaste entrar a tus amigos raros a la casa?! —preguntó alterado el señor para después caminar y jalar por accidente un hilo que activo unos ventiladores que provocaron que saliera volando plumas, las cuales le cayeron al padre del chico con goggles, y por si fuera por accidente se subió en una patineta, con la cual no se podía equilibrar y lo llevo hasta la piscina donde termino mojado—. ¡Yuuto! ¡Estarás castigado por diez años! ¡¿Escuchaste?! ¡Diez años!

Todos los reporteros y personas que estaban de más allí se comenzaron a reír por tan pintoresca escena, definitivamente el momento más vergonzoso para cualquiera. Los gritos que emitía el señor Kido se escuchaban por toda Inazuma, tanto era su frecuencia que, Sakuma lo escucho, por lo que ambos chicos salieron del restaurant y tuvieron que ir para la casa del millonario.

Unos cuantos minutos pasaron para que llegaran Kido Yuuto y Sakuma Jirou. Y cuando vieron al padre del de las rastras, se quedaron en shock. Puesto que, el chico con los goggles sabía perfectamente que iba a ser castigado de por vida o por lo menos lo suficiente como para querer que la tierra se lo tragara mientras que Sakuma intentaba procesar la información que venía a su cerebro y logró comprender… que era una broma de su antipático amigo.

—Kido, creo que Fudou es el responsable de esto.

—No creo que importe… de igual forma estoy castigado.

—A lo mejor tu padre te cree y solo hace que metan a Fudou a la cárcel. —dijo sonriente el del parche mientras sonreía bobamente, pero de igual forma solo se ganó la mirada asesina del centrocampista.

—Dudo que eso pasé.

— ¡Yuuto! Quiero que de inmediato me expliques… ¿por qué estoy cubierto de toda esta porquería? —exigió de manera brusca el padre del de goggles.

—Bueno, señor técnicamente ya no tiene nada pues cayó a la piscina y por eso está mojado. —interrumpió infantilmente, Sakuma.

— ¡No es contigo, muchacho!

—Oh… que amargado. —reprochó el del parche.

—Papá yo… este… —intentó aclarar el chico con rastras, sin embargo, esta vez no tenía una explicación—, no sé…

Su padre estaba a punto de regañarlo más, pero a tiempo llevo el semi-calvo junto a la chica. Y al parecer habían corrido mucho, pues tenían la respiración agitada y parecía haber recorrido mucho para llegar a su destino.

— ¡Señor cara de pez! —exclamó casi sin aliento, Fudou.

— ¿Qué? —preguntó ofendido y confundido el padre Kido.

—No tiene que regañar a su hijo, yo soy el culpable de que este lleno de… porquería, mire el punto es que él no tiene nada que ver con esto, yo lamento esto. —explicó con un poco de desesperación el castaño.

—Hum... el problema está en las amistades que tiene mi hijo… me preocupa que se vuelva como… tú…

— ¿Qué tengo de malo? —preguntó de forma estúpida el chico malo y obviamente su respuesta fue contestada por la mirada asesina del de las rastras.

—Así que pienso mandar a Yuuto a un lugar muy lejano.

— ¡Papá yo…!

—No intentes contradecirme, ya he tomado la decisión.

— ¡Señor papá de Kido, no puede llevárselo lejos! Él es mi amigo. —intentó convencer el chico con cabello color cian claro—. ¡Si quiere podemos mandar a Fudou a la cárcel o tome un curso para el manejo de la delincuencia!

— ¡Sakuma! —gritó molesto el semi-calvo.

— ¡Piénselo! —insistió el del parche.

— ¡Qué no!

—Disculpé señor… —habló esta vez, Fuyuka quien parecía tener una mirada un poco triste—, sé que Fudou no es el mejor chico del mundo, pero tiene que saber que él jamás se disculparía con alguien y menos con el padre de su rival, quiero que se dé cuenta que su hijo no tiene malas influencias, créame todo mundo lo aprecia y el es un gran chico, por favor no lo mande lejos.

Hubo unos segundos de silencio, al parecer la chica del cabello color violeta había logrado convencerlo, quizá su ayuda funciono. El padre de Kido los vio a los cuatro y suspiro, se dio cuenta de que su hijo no había hecho ninguna mal amistad, tal vez estén algo locos, pero no va más lejos de ello.

—Si mi hijo tiene una amiga como tú que es tan generosa y amable, puede que no sea tan malo. Bien le daré otra oportunidad. —dijo el padre de Kido para después retirarse.

— ¡Yeah, Kido, Fudou, Fuyuka, todos seguiremos siendo amigos! —exclamó alegre el del parche.

—Sí… —murmuró el de los goggles mientras comenzaba a pensar que tenía buenos amigos que deseaban su amistad, ahora pensaba que tenía que disculparse con su amigo semi-calvo, pues fue él quien comenzó tremendo lio.

— ¡Bueno! Si ya no hay nada más, me voy. —comentó Fudou para empezar a retirarse, peor antes de ello se acerco a la chica—. Fuyuka, te prometí una cita y la tendrás, pero por ahora estoy algo cansado, nos vemos mañana.

—Está bien, Fudou, adiós. —se despidió la chica de los ojos azules mientras miraba como su chico amado se retiraba.

—Fuyuka… sentimos haber arruinado tu cita con Fudou. —se disculpó Sakuma.

—Entonces… ¿es verdad eso de que perdió la memoria?

—Claro, y también lo lamento.

—Chicos, no importa, de igual forma hoy no fue un día totalmente malo.

—Pero lo arruinamos… —susurró el chico con cabello color cian claro.

—No, Sakuma, yo lo arruine. —corrigió el de los goggles.

—En serio, no tiene porque sentirse mal, ahora sé que un poco más acerca de Fudou, no es tan malo. —confesó Fuyuka mientras comenzaba a sonrojarse.

— ¡Huy! Eso significa que la parejita pasó un tiempo romántico juntos~. —comentó Sakuma, solo para molestar un poco a la chica—. Apuesto que Fudou declaro que te amaba… ¿o no? —y esa pregunta había hecho sonrojar a la chica, porque en sí era verdad.

—Sakuma no digas eso. —regañó Kido.

— ¡Ah! Es verdad… Fuyuka lamentamos el golpe.

— ¿Qué golpe? —preguntó confundida la joven.

—El golpe que te dimos en el restaurant. —aclaró de forma inocente, Sakuma.

— ¿Fueron ustedes? —preguntó un poco molesta la chica.

—Este… sí. —contestó avergonzado, Kido.

—Hum… puedo arreglar eso. —comentó de forma extraña Fuyuka, para después tomar de los brazos a ambos chicos y lanzarlos en la piscina—. ¡Chicos nos vemos otro día! Disfruten el agua~.

Y con eso último la futura novia de Fudou se fue.

—Que mal humor se traen las mujeres. —opinó molesto el amante de los pingüinos.

—Tenía derecho a hacerlo, es decir arruinamos su cita y encima la golpeamos en la cabeza.

— ¡Oh, pero no tenía que hacer eso! ¡Puede tener otra cita y ya! —gritó enfadado el del parche sin darse cuenta de que le había dado una idea al de los goggles.

— ¡Eso es! Planearemos otra cita para Fudou y Fuyuka. —propuso Kido Yuuto.

— ¡Que idea tan genial! Eso compensara el día y la cita tan porquería que tuvieron.

—Bien, necesito que me ayudes.

Ambos chicos salieron de la piscina y comenzaron a planear la nueva cita. Ahora ambos planeaban disculparse con su amigo, porque a pesar de todo, su amigo semi-calvo intentó ayudar. La amistad entre ellos era única y no se podía perder por una confusión porque todo empezó por una confusión.

Al día siguiente, Sakuma y Kido habían hecho que Fudou y Fuyuka se reunieran en una plaza de la ciudad de Inazuma algo elegante, así que anteriormente les habían pedido que llevaran algo de ropa elegante. De esta forma ellos compensarían el daño que habían causado anteriormente. Cuando la pareja llego estaban algo confusos por lo que iban a hacer.

— ¡Fudou y Fuyuka! Kido planeo esto para disculparse por lo de ayer. —explicó entusiastamente, Sakuma.

—Lamento mucho lo de ayer, realmente fue mi culpa, y como compensación arregle que tuvieran un almuerzo en uno de los mejores restaurants de la ciudad así que disfrútenlo y tengan un buen día.

—Muchas gracias, Kido. —agradeció con un poco de pena, Fuyuka.

—Hum…. ¡Muy bien, Superman, aceptare tus disculpas porque te todas formas yo también te he hecho cosas malas! Además la comida gratis siempre es bienvenida.

—Fudou… —regañó la chica del cabello color violeta.

—No tienes porque regañarlo, Fudou es así por naturaleza. —habló el de los goggles.

— ¡Que tengan una cita romántica… parejita~! —exclamó alegremente el del parche.

—Sí, bueno, vamos a entrar…

La pareja entro al restaurante, se sentían algo incómodos y la más incomoda era la chica quien estaba algo apenada por todo eso, no imaginaba que los amigos de su chico malo fueran tan, tan generosos, bueno también eran sus amigos, pero el punto era que eran tan amistosos, ellos representaban el significado de la amistad. El chico noto un poco el nerviosismo de su chica, así que no dudo en tomarle la mano, a lo que lógicamente la chica contesto con una sonrisa que provoco el sonrojo de él. De ahora en adelante ambos se apoyarían pues después de esa cita se convertirían en una pareja formal. Fudou Akio ya no volverá a decir "Olvide nuestra cita".

Notas de la autora (?):

Bien, sé que tuve que actualizar desde hacía mucho tiempo y que no es largo ni nada de eso, bueno sé que es más romántico xD. Hum~

¡Lamento desde el fondo de mi corazón y mi alma la tardanza! Sé que no tengo perdón, pero la verdad la escuela me dejo acorralada… tanto que termine… eh… no tengo que decirlo además pase por muchas cosas desagradables… ¡Bueno, ya me verán más aquí! Dentro de estos últimos dos meses supongo que me verán más aquí.

¡Y como compensación por este fic subi otro Fuduka~! Qué bueno me lo pidieron desde hace tiempo y hasta ahorita tuve tiempo de subirlo~ Ahora mis demás fics los actualizare con el tiempo…

¡Gracias por leer este fic y por dejar reviews! ¡Ustedes son mi inspiración!

Si les gusto, si se les hizo romántico, si les dio risa, si les gusto la mayor parte, si quieren un capítulo especial extra dejen reviews.

Ahora quiero hacerles dos preguntas :DDD

¿Quieres un capítulo especial extra?

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