Trato de satisfacción
Cap. 17 Nuestro final
- no puede ser… ¡se me perdió el collar!
Tal vez, con esa simple oración había comenzado su día.
Como se le hacia costumbre, todas las mañanas se levantaba con una sonrisa, la cual siempre provocaba su hermano, había descubierto que no había persona que le hiciera más feliz que él, por fin había terminado de aceptar completamente sus sentimientos, y su parte moral ya no la atormentaba más, también aceptaba que algunas veces era difícil ocultar lo que sentían, sin embargo las cosas no podían ir mejor entre ellos dos
Rin termino de organizar su uniforme, sin poder ocultar la emoción en su mirada, ese día cumplía un mes con su hermano, también ese mismo día seria su graduación, lo que en cierta forma también la ponía algo triste, no era fácil dejar de ver a tus amigos prácticamente todos los días, aun así prometió no estar triste, las buenas noticias eran mejores que pensar en una separación, termino de cepillar su cabello, y fue cuando se dio cuenta al pasar sus manos por el cuello que el collar no estaba, de inmediato casi sufrió un infarto, aquella simple cosita significaba mucho para ella, corrió por todo su cuarto buscándolo, moviendo todo lo habido y por haber en el, saco la ropa de su armario, desorganizo su baño, también tiro todos los objetos que tenia en su escritorio, pero no lo encontraba, y ahora su cuarto parecía salido de una guerra, aun así no se rindió, busco aun más desesperada, hasta que entendió que su collar se había perdido, después hizo lo ultimo que pensó, tomo su celular entre sus manos temblorosas, y oprimiendo teclas pudo mandar un mensaje a sus amigas, pidiendo que le ayudasen a encontrar aquel preciado collar
Abajo, esperando a su hermana se encontraba Len, al frente del auto ya listo para ir a su ultimo día en el colegio, escuchando música en su celular, alzo su mirada y se encontraba ahí su hermana, riendo nerviosamente y tratando de ocultarse el cuello, por un momento Rin pensó que su hermano ese día no utilizaría el collar, debido a las múltiples fotografías que tomarían del evento y demás cambios de ropa que debían hacerse, pero al verlo unas intensas ganas de llorar se apoderaron de ella, su hermano tenia puesto el de él, lo que significaba que ella había sido tan estúpida de dejarlo perder, su hermano confundido se acerco a ella, dándole un beso en su mejilla, y abriendo la puerta como todo un caballero, mientras que la chica, asustada retrocedió unos pasos
- ¿sucede algo Rin? – pregunto el chico, a la vez que por dentro se hacia varias suposiciones –
- no, para nada – mintió torpemente – es solo que no quería que llegara este día
- ¿Por qué cumplimos un mes o nos graduaremos?
- porque nos graduamos – sonrió ella, como solo su hermano la hacia sonreír –
- ah, ya me habías asustado – bromeo el chico, mientras que su hermana al fin subía al auto –
El resto del viaje, paso sin contratiempos para ellos, si bien, Rin seguía nerviosa por el hecho de haber perdido el collar su hermano siempre la tranquilizo, aunque él por su parte no sabia lo que sucedía no le gustaba ver a su hermana así, por lo que siempre le animó, porque en su mente ya se empezaba a hacer una suposición de la preocupación de su hermana
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Apenas llegaron los dos hermanos al colegio, la rubia fue asaltada por sus dos amigas, acción que se le hizo cómica a Rin, porque le hacia recordar aquella vez en que sus amigas hicieron prácticamente lo mismo, pero en aquel entonces ella aun no sabia que gustaba de su hermano, y de los problemas que esto traería después
- ¡dinos que encontrarte el collar! – y de nuevo, unas lagrimas amenazaron con salir de sus ojos –
- ¡no lo encuentro, Len se enojara! – grito Rin, alterada –
- cálmate, te ayudaremos a buscarlo, solo danos algo de tiempo
- ¿chicas que sucede? – pregunto Kaito recién llegado, alterando la pasiva atmosfera de las chicas –
- ¡como preguntas eso! – grito Luka - ¡no sabes que el collar de Rin se perdió!
- a Len no le gustara oír eso – dijo susurrando el de cabello azul –
- ¿tu lo haz visto? – cuestionaron entre todas, con desconfianza –
- no, de ser así Gakupo y yo les hubiéramos dicho
- ¿en que historia me están metiendo? – pregunto Gakupo, apareciendo sin idea de la situación –
- ¡deberías de saber, Rin perdió el collar! – chillo Miku –
- creo que buscar seria lo mejor – decía él, asustado por la reacción de las chicas –
- ¡crees que no lo pensamos! – gritaron ellas, ya más desesperadas –
- ¿se puede saber por qué me dejaron solo?
- porque se perdió el…
Paro Miku a mitad de la conversación, al darse cuenta que Len había llegado a la escena, pero sin enterarse de la situación, por lo que los demás chicos se hicieron los desentendidos y cambiaron rápidamente el tema de conversación, lo que en efecto dejo más que desubicado a Len, con lo que el chico comprobó que le estaban ocultando algo, en ese momento, todos salieron en direcciones diferentes, con la excusa que irían a buscar "eso" que necesitaban con urgencia, Miku fue con Kaito, Luka con Gakupo, y al final, volvieron a quedar los dos hermanos, pero ahora, Len tenia una mirada de seriedad
- ¿Qué me están ocultando? – dijo el chico, cruzando sus brazos –
- nada, ¿Por qué lo piensas?
- estas rara, no, todos están raros
- han de ser imaginaciones tuyas – sonrió falsamente Rin – ¿damos nuestro ultimo recorrido al colegio?
Y sin esperar una respuesta, la chica lo tomo de las manos, comenzó a caminar, rememorando sucesos, haciendo que poco a poco Len dejara su semblante de seriedad y regresara de nuevo a su sonrisa habitual
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Podía decir fácilmente que Luka era una persona pasiva, porque desde siempre la había conocido así, pero ahora, la chica dejaba entre ver una nueva faceta de si misma, una no muy calmada pero tampoco exagerada, lo que en definitiva asustaba a Gakupo, además de que ahora se veía envuelto en una odisea para buscar un collar, internamente estaba preocupado, después de todo se trataba de el collar una de sus amigas, sin embargo, ahora en ese momento estaba pensando en algo más, él también tenia sus problemas, ese día terminaba su vida escolar, y no había podido si quiera decirle a su persona amada lo que sentía, parecía que nunca lo fuera a lograr, y menos ahora, que Luka parecía una posesa buscando ese collar, ¿pero él también merecía algo de atención, no?
- oye Luka, me gustaría decirte algo – decía apenado el chico, según él, no podía esperar más para decirle sus sentimientos –
- ¿es importante? – paro ella su búsqueda – porque también te quería decir algo, aunque ahora, parece que estamos ocupados en otra cosa
- es importante, pero no te preocupes, puedo esperar
Esa respuesta no sonó ni medio convincente, y la expresión de tristeza del chico tampoco, la verdad, era que Luka necesitaba hablar con él, todas las posibilidades de una relación entre ellos dos se habían dado, sin embargo, cada vez que iban a hablar de eso sucedía algo más o simplemente se arrepentían, sea cual fuera la razón, ellos dos no estaban juntos, y si bien, él no sentía lo mismo que ella, no se quería con un típico "que hubiera pasado si…"
- creo que parar un momento la búsqueda para hablar no es malo – dijo ella, poniendo total atención a lo que fuera a decir su amigo –
- hace un tiempo te quería decir algo – empezó él, nervioso – no se como decirlo, porque pensé que lo había dejado claro, pero supongo que no fue así…
- ¿dejar en claro, que cosa? – ahora si, podría decir que estaba confundida –
- que me gusta alguien, pero al parecer yo no le gusto ella, ya que nunca lo demuestra y le incomoda cuando digo algo lindo
- ¿de quien estamos hablando? – seguía sin entender la chica –
- Luka – el chico se dio un pequeño golpe en la frente - ¡estoy hablando de ti!
Admitía que esa era la confesión más rara de toda su vida, por su cabeza, pasaron todas las chicas del colegio, nunca conto con que fuera ella, pero al pensarlo detenidamente, sus recuerdos volaron a aquel fin de semana, donde tuvieron que compartir habitación, en ese momento no lo entendió, sin embargo, aquella conversación que tuvieron antes de dormir había sido una declaración, no tan directa como la que acaba de suceder, pero si con las mismas intenciones, la chica sonrió ampliamente, ahora era momento de dar su respuesta
- me alegra saber que soy la persona de la cual gustas, sin embargo, ¿Cómo esperabas que lo fuera a saber?
- ¡siempre hablaba contigo de ello!
- ¡exacto, nadie habla de la persona que le gusta con la persona de la cual gusta! Das a entender que es otra chica
- entiendo mi error, ¿tomo nuestra conversación como un "lo siento, pero no me gustas"?
- ¡Gakupo! – chillo la chica – ¡tu también me gustas!
El chico soltó un suspiro, más que todo porque su declaración improvisada había salido bien, sin embargo, a aquella atmosfera de romanticismo le faltaba algo, por lo que tras segundos de pensarlo, acerco a Luka hacia si y la abrazo, la chica no dudo en corresponderlo, y tomados de las manos habían olvidado todo lo que hacían para comenzar con el tema de si serian o no novios, aunque para los dos la respuesta estaba más que clara
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Por un momento había olvidado su objetivo de ese día, encontrar el collar que Len le había regalado, su hermano sabia como hacerle olvidar sus problemas, por eso le adoraba, hasta ese momento su recorrido por el jardín del colegio había sido excelente, recordando momentos inolvidables y creando nuevos, los dos hermanos se habían prometido nunca preocuparse por cosas sin importancia, y después de eso su relación había mejorado demasiado, más que todo porque antes de aquella promesa Rin solía darle mucha importancia a su relación frente a otras personas, sin embargo, su hermano la enseño que no era importante darle demasiado drama al asunto, ya que no lo tenían en secreto completamente, sus amigos lo sabían, además de eso los apoyaban, acciones la cual le tranquilizaron, y le ayudaron a mejorar en todos los aspectos
Los dos gemelos caminaban por el jardín de su institución, sonriendo y hablando, cuando de repente se escucho un gran grito, los dos voltearon a mirar, encontrándose con prácticamente toda la población femenina de hasta tres grados inferiores que ellos, Rin no las reconoció inmediatamente, sin embargo, Len trago en seco, ya que todas hacían parte de un no muy lejano pasado, donde era conocido como el chico más popular de su institución y otras distinciones que había ganado con el tiempo
- ¡no nos puedes dejar Len! – casi chillo entre lagrimas una chica –
- ¡no te gradúes, sin ti este colegio no es nada!
- ¿con todas estas chicas te acostaste? – dijo totalmente impresionada Rin –
- ¡claro que no! – decía él, sin saber que hacer – con algunas solo tuve citas
- ¡Len vuelve a ser el mismo de antes! – gritaron todas a coro –
- chicas, en unas horas me graduó, de nada les servirá, además, ya deje esa vida, tanto a mi como a alguien más le incomodaba
- ¿a quien más? – cuestiono la que parecía ser la líder de las demás – ¿Qué acaso ella te quiere solo para ti?
- es lo más probable, ya que es mi novia – miro de reojo a Rin, sonriendo – pero se a quien pueden acudir, a David que ahora pasa a tercero
Con aquella simple respuesta, las chicas se fueron de lugar una a una, algunas desilusionadas, algunas aun rogando, y otras a buscar al chico del cual Len se refería, el rubio siguió de nuevo su camino, dejando a las que aun insistían perplejas, era oficial, había dejado de ser el play-boy de su institución, y no sentía responsabilidad alguna por su pasado, por otra parte Rin decía que entregarle tal responsabilidad a un chico tan tierno e inocente como David había sido malo de su parte, sin embargo Len dijo que se defendería de las chicas que lo buscaban, y más aun si terminaba enamorado de su hermana, lo que a Rin le causo gracia ese comentario, entro con la rubia de la mano al colegio, buscando a sus amigos ya que debían ir a organizarse para la ceremonia, los dos miraban con tristeza los salones donde habían pasado su vida, pero al mirar por una ventana se quedaron sorprendidos por lo que veían, y en cierta forma la escena se les hizo cómica, por lo que se quedaron viéndola un rato
- ¡Daisuke quédate quieto! – había gritado Gumi, tratando de tomar al chico por los hombros –
-¡no me pondré ese birrete, me queda horrible! – se defendía él –
La de cabello verde se sentía en desventaja, después de todo el chico era mucho más alto que ella y tratar de ponerle el birrete era más difícil de lo que pensó, además de que esa mañana el cabello del chico había amanecido rebelde, lo que favorecía sus argumentos de que el birrete se le veía horrible, la chica aun así trato de ponérselo, aunque él no quisiera de todos modos era obligatorio utilizarlo en la ceremonia, tras largos segundos de forcejeo entre los dos la chica logro hacer que el de cabello gris se arrodillara, así para que quedara a una altura semejante a la de ella
- ¿no te peinaste esta mañana? – dijo fastidiada Gumi, por el cabello enredado del chico –
- ¡lo hice, pero se esponjo más! – decía entre quejidos al jalar de su cabello –
- lo hiciste mal, descuida ya se que hacer – de su propio cabello saco dos pinzas negras, dispuesta a organizar el de él –
- ¡no me pondrás eso, es de niña! – grito casi al instante, tratando de pararse de nuevo, pero sin lograr hacerlo –
- servirá para organizarlo, además por el birrete no se vera
Daisuke estaba tan desesperado por su cabello que ni le importo, simplemente espero un momento y dejo que la chica hiciera lo que quisiera, después cuando hubo acabado Gumi saco un espejo de su bolsillo, mostro al chico su gran idea, ella tenia razón, aunque por dentro Daisuke se sintiera completamente apenado de llevar dos pinzas de chica en su cabeza, estaba feliz de tener su cabello controlado y el birrete bien puesto, se levanto del suelo y agradeció a la chica
Desde que había dejado de hablar constantemente con Miku y sus amigos se había dedicado a conocer más a Gumi, específicamente desde el día en que ella le escucho y pudo desahogarse, descubrió que ella a pesar de lo hecho esa noche del baile era muy buena persona, fácilmente los dos se habían vuelto grandes amigos, lo mismo sentía la chica por su parte, los dos entre si habían creado una gran amistad
- oye Gumi, tenemos que ir por las togas – dijo el chico, comenzando a caminar – en un rato será el ensayo además…
Paro de hablar al sentir como la chica le tomaba de la camisa, la miro de reojo, dándose cuenta que tenia la cabeza baja, raro en ella, si tomaba en cuenta que esa reacción nunca se la había visto, se acerco, agachándose a su nivel, mirándola a los ojos, tenia ese destello característico de tristeza de las personas, aparto el cabello que caía por su rostro, debido a que sus característicos visores habían sido reemplazados por el birrete, nunca la había visto tan triste como en ese momento, y la verdad era que no le gustaba
- ¿no te quieres graduar aun Gumi? – fue la primera pregunta que llego a su cabeza –
- no te quiero dejar de ver – susurro, recibiendo un pequeño golpe en su nariz del chico –
- no te dejare de ver, no será tan frecuente como ahora, pero no pienses eso – la chica sonrió, alegre por sus palabras – ahora, vamos al ensayo
De nuevo, comenzó a caminar, con sus manos en sus bolsillos, Gumi podía llegar a ser muy tierna cuando quería, pero también podía llegar a preocuparse por cosas sin importancia, volteo a mirar a la chica, la cual veía el cielo por ultima vez, él sin prestarle atención siguió caminando, sabia que tarde o temprano la chica llegaría a su lado para caminar juntos, sin embargo, seguía caminando y ella no aparecía, sintió una molestia en su pecho, por un momento se sintió dejado de lado
- ¡Daisuke! – ni bien la chica termino de gritar su nombre el mencionado volteo con preocupación en su mirada – ¡me gustas!
Eso le había dejado más que perplejo, aun así inconscientemente una sonrisa apareció en su rostro, la verdad era que nunca creyó que la amistad que sobrellevaban significara algo más importante para Gumi, la chica a lo lejos se preguntaba internamente una y otra vez de donde sabia sacado tal valor para gritarlo de esa manera, y aun peor había dejado sin palabras a su amigo, lo sabia, tal vez con esa declaración terminarían con su amistad, la chica cerro fuertemente los parpados, recriminando su imprudencia al haberlo dicho, abrió los ojos lentamente, con lo cual una sonrisa y algunas lagrimas de felicidad escapaban de su rostro, corrió lo más rápido que pudo hacia su amigo, a lo lejos, Daisuke la esperaba con los brazos estirados, dispuesto a atrapar a Gumi en su salto, lo cual tuvo que improvisar a ultimo segundo, ante la reacción de su amiga
Si bien nunca espero una confesión, sabia que los sentimientos que tenia hacia ella no eran los de una amistad normal, también eran mucho más fuertes que cualquiera que hubo sentido antes, sabia que también le gustaba, por ello no la iba a rechazar, aquello había terminado con su amistad, para comenzar con una nueva etapa entre los dos
- sabia que terminarían juntos – había dicho Rin desde la ventana, para después seguir caminando tomada de la mano con su hermano –
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- ¡ese collar se perdió! – grito Miku, tras haber buscado por todo el colegio –
Por fin se había rendido la chica, después de dos horas recorriendo el colegio una y otra vez, Kaito por su parte se había rendido una hora antes, estaba aburrido de buscar sin éxito, trato de calmar a su novia, lo cual logro por un momento, los dos se sentaron en un pasillo desierto de su institución, Kaito lo reconoció, había sido el mismo pasillo donde una vez golpeó a Len, debido a su comportamiento engreído y porque en aquel entonces no podía reconocer que gustaba de una chica, después se entero que aquella chica era Rin, por lo cual se sintió un poco culpable después, sin embargo, si nunca hubiera hecho aquello no se desatarían algunos sucesos y no habrían terminado juntos, Miku se acostó en el pecho de Kaito, por primera vez en el día se sentía relajado, con su novia y un momento solo para ellos, claro, antes de que aquello llamado colegio acabara en sus vidas
- tal vez alguien más ya lo encontró, como Luka o Rin
- no lo creo, si nosotros no lo encontramos no lo hará nadie
- podríamos tomar un descanso, además creo que vamos tarde para la ceremonia
- pero… el collar… - casi lloro Miku, haciendo pucheros –
- creo que Rin será capas de manejarlo, Len también lo entenderá, creo que es momento de que estemos todos juntos, es nuestro ultimo día
- supongo que tienes razón Kaito
La chica se levanto, tomando de la mano a su novio, por otra parte, Kaito recordaba todo el tiempo que había pasado con sus amigos, por un momento sintió nostalgia, suponía porque dejaba sus mejores recuerdos y vivencias, también de todas las locuras que había hecho con sus amigos, especialmente casi crear un incendio en el laboratorio, pero eso ya era historia
Ahora, podía decir que se tenia que aferrar más que nunca al futuro, porque eso era lo que venia, Miku vio al chico más distraído que nunca, por lo que sin saber que hacer, le mordió tan fuerte como pudo un brazo, haciendo que saliera de su ensimismamiento, de paso que gritara de dolor y lograr que le viera como la cosa más rara del mundo
- ¿Por qué me mordiste? – le dijo, casi como exigiendo una respuesta –
- no me gusta verte así – dijo ella, un poco asustada –
- perdón, solo que me sorprendió tu mordida
- ¿estas bien, en que pensabas? – cuestiono la chica, parando su recorrido –
- no es nada, en serio
- se cuando mientes, y lo estas haciendo ahora
- ¿Cuándo salgamos de aquí, me seguirás queriendo como el primer día?
La chica solo asintió, besando a Kaito, no entendía bien que clase de pregunta había sido esa, pero le alegro que él hablara de esa forma, porque realmente demostraba cuanto se querían los dos, siguieron caminando hasta llegar a la enfermería, pararon un momento para apreciarla, después de todo ahí se habían hecho novios, en el atardecer y en un momento de intenso drama, aun así, frente a todo eso había florecido un gran amor, uno que los dos estaban orgullosos de tener
- Miku hace un tiempo quería decirte algo – dijo apenado el chico, mirando hacia otra parte –
- ¿Qué quieres decirme? – decía poniendo aun más atención a él –
- yo… te amo – casi soltó sin pensar –
Se sintió impresionada, aquello había sido lo más adorable que dijo en su vida, Kaito no era muy cariñoso con ella, de todos modos estaba acostumbrada a eso, y así lo adoraba, porque ella era adorable por los dos, y que él le dedicara esas palabras debía significar que realmente lo sentía, la chica le abrazo, mientras él aun esperaba por su respuesta
- realmente me debes de querer – soltó ella, sonriendo –
- fue cursi, lo se – se sonrojo él –
- me gusta lo cursi – dijo ella – también te amo
Satisfecho por la respuesta, la beso en los labios, fue el tipo de beso de los que nunca comentarían, porque aquel sentimiento era solo de los dos, volvieron a caminar hacia la ceremonia, ya era momento de graduarse
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Como en cualquier ceremonia normal de graduación los padres de todos estaban presentes, también se sentía cierto aire de nostalgia, melancolía por parte de los presentes, algunas chicas acosando al pobre David, todos los chicos dispuestos a graduarse se encontraban en el escenario de la institución, hablando entre ellos esperando a que diera comienzo la ceremonia
Por una parte las chicas le reportaban a Rin todos los esfuerzos que hicieron para encontrar el collar, sin embargo la rubia se llevo una gran desilusión al saber que no sirvieron de mucho sus esfuerzos, por otro lado los chicos llegaban ya con sus birretes y togas puestas, sonriendo entre ellos
- ¡Luka te felicito! – decía Kaito, abrazando a la de cabello rosado –
- ¿Por qué lo dices? – se miraron entre si todos –
- ¿Luka no les dijo? – cuestiono Len, alzando una ceja –
- verán – comenzó a explicar la chica – cuando fuimos a buscar "eso" sucedió aquello…
- ¡somos novios! – grito Gakupo, atrayendo la mirada de algunos –
- ¡por fin! – dacia Miku, saltando y abrazando a los dos recién emparejados – yo también tengo algo que decir ¡Kaito dijo que me ama!
- ¡Miku! – chillo el chico, al ver como sus amigos comenzaban a reír –
- ¿algo más que quieran confesar? – pregunto Gakupo, al ver todas lo sucedido en tampoco tiempo –
- bueno – sonrieron los gemelos – digamos que alguien más también tiene novia
Los demás los miraron perplejos, mientras los dos hermanos señalaban hacia la entrada del lugar, por esta recién entraban Daisuke y Gumi, tomados de la mano y sonriendo, estos dos casi de inmediato corrieron hacia donde se encontraban los demás, para anunciar su ahora noviazgo, los chicos se hicieron los que no sabían nada y se abrazaron entre si, como si fuese la ultima vez que lo harían, todos juntos como los amigos que siempre fueron y debieron ser, al cabo de unos segundos comenzaron a llamar a todos los chicos, para las fotos escolares y con sus diplomas de graduación, todos comenzaron a sentirse aun más emocionados, mientras que sin descanso, se tomaban fotografías con los amigos, con su novio o novia, con su familia, y hasta una foto en grupo
Miku corrió a abrazar a su familia, recibiendo las felicitaciones de su padre y las lagrimas de felicidad de su madre, por otra parte Kaito era el centro de atención de su familia por todas las fotos que le estaban tomando, cerca de él Gakupo sonreía con su familia, para segundos después llegar los padres de Luka y esta a felicitar a sus hijos por su recién noviazgo, Gumi por su lado abrazaba a sus padres, mientras también presentaba a Daisuke a la familia, por otro lado el chico hacia lo mismo con sus padres, también presentando a Gumi a su familia, y por ultimo los gemelos, los cuales fueron a abrazar a sus padres, tomándoles grandes cantidades de fotografías, para al final llegar todos los chicos juntos y tomarse una foto de ellos juntos, una que seguramente iría enmarcada por cada una de ellos y puesta en algún lugar donde siempre la pudieran ver
Los dos hermanos entre la emoción del momento se escabulleron, caminaron entre las personas, tratando de no llamar demasiado la atención, aunque fácilmente podrían decir que se habían vuelto expertos en no hacerlo, los dos chicos salieron caminando al jardín, aun faltaba su momento de felicidad juntos
Caminaron tomados de las manos, observando todo el panorama, hasta que llegaron al único árbol de cerezo del lugar, que por esa época del año estaba florecido, con todas las flores rosadas por el lugar, y con cualquier brisa de aire fresco volaban por el viento
- realmente puedo decir que soy feliz contigo – dijo Len, abrazando a su hermana –
- yo también diría que nunca he sido más feliz en mi vida – dijo Rin, mordiendo su labio inferior – Len, tengo que decirte algo
- ¿será tal vez, que perdiste el collar?
A lo que la chica se separo lentamente de él, agachando su cabeza, se sentía mal de haber perdido algo tan importante, esa era la posesión más preciada que tenia, y la había perdido tontamente
- ayer en la noche – siguió hablando Len – te encontré dormida en el sofá de la sala, te veías incomoda, por lo que te lleve entre brazos a tu cuarto
Si bien, aquellas acciones habían sido inmensamente tiernas para la chica, no sabia a que venia al caso, Len al ver su semblante de confusión trato de buscar algo en sus bolsillos, sonrió abiertamente mientras tomaba una mano de su hermana en la suya y depositaba el collar de Rin
La chica por un momento sintió felicidad extrema, se lo coloco casi de inmediato, mientras volvía a abrazar a su hermano
- creo que cuando te lleve se te cayo – dijo apenado Len –
- ¿Por qué no me dijiste antes? – cuestiono la chica, al ver el rubor en las mejillas de su hermano –
- te lo pensaba decir – refuto este – solo que siempre que lo iba a hacer me cambiabas el tema, además llegue a pensar que ya no me querías, por lo cual debías olvidar el collar
- ¡Len, yo te quiero demasiado! – grito Rin, sonriendo – ¿sabes cuanto tiempo lo estuve buscando, casi lloro por el!
El chico se sintió alagado por esas palabras, en poco tiempo los dos habían logrado lo que nunca habían hecho, quererse hasta que la falta del otro les afectara, Len recorrió son sus dedos la mejilla de su hermana, mientras que esta inconscientemente cerraba los ojos ante el tacto suave del chico, y la beso, un beso sencillo, porque ellos no necesitaban más para demostrarse lo que sentían
Porque los dos sabían que faltaba mucho por recorrer, felicidad, tristeza, amargura, necesidad, todos esos sentimientos los conocerían poco a poco con el tiempo, las lagrimas derramadas, las sonrisas compartidas, las peleas, el apoyo de sus amigos, eso había logrado convertirlos en lo que eran hoy, todo eso era su historia, y aunque fuera el final de una hermosa etapa vivida por ellos vendrían más, donde estarían juntos, sin importar que, eso siempre estaría en sus corazones… y pensar que su amor empezó por un simple trato de satisfacción.
*The End*
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Notas de la autora:
¡Y señoras y señores, Trato de satisfacción se termino!
Si me vieran ahora, estoy a punto de llorar, tengo los ojos llenos de lagrimas, porque este es mi Fanfic favorito, además de ser el primero que termino, lo ame desde el principio, y siempre di lo mejor de mi para que haya sido a gusto de todos, a esas personas que me llegaron a apoyar así haya sido una vez ¡gracias a todos!
Me siento infinitamente agradecida, porque realmente descubrí el gusto de escribir, porque saber que siempre habrá alguien que te apoya, ese sentimiento no tiene precio
Bueno, pasando al último capitulo del Fanfic, quise darle un final feliz, porque así debía ser, todos, no solo los hermanos necesitaban su momento, todos lo tuvieron y todos terminaron feliz, Miku y Kaito, Luka y Rin, y por ahí una vez me pidieron una parejita, Daisuke y Gumi, esta ultima pareja me gusto, probablemente los siga poniendo juntos, y claro mis favoritos, Rin y Len, respecto a este capitulo también, puede que tenga una imagen del ultimo capitulo dibujada, así que, próximamente entren a mi perfil, ahí estará un link de donde estará la imagen, o díganme por PM donde se las podre enviar
Y bueno, ahora si, este es el final, ¡de nuevo, gracias a todos aquellos que me apoyaron, este siempre será mi Fanfic clásico!
¡Y este es el final, adiós a todos!
