Agua Templada
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Notas del Ninja: Hola, chicas, disculpen la demora… La verdad es, que como con muchas otras historias, la musa ha escapado. En otras palabras ya se me acabo la gasolina para terminar esta historia. Si alguna de ustedes, chicas podrían compartir alguna idea de cómo terminar esta historia se los agradecería mucho; pueden dejar sus comentarios/ideas en el área de reviews o enviarme un mensaje privado… se los agradecería mucho! .!

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Jun Pyo se detuvo un momento para observar a Jan Di. Ya habían cenado y los dos solteros amigos suyos habían salido, Jan Di estaba muy cayada, probablemente preguntándose cómo estaba Ga Eul. Era algo cruel el que decidieran dejarle a Yi Jeon la primera noche, pero después de todo los amantes necesitaban estar a solas…

"¿Estas bien?" Le pregunto Jun PYo, haciendo que Jan Di volteara.

"¿Hmm?"

"¿La comida no te gusto? No has comido mucho."

"¿Jun Pyo?"

"¿Estas enferma?"

"¡No!" Marido y mujer se observaron por un momento y Jan Di se echó a reír. "Ven, siéntate a mi lado." Le dijo Jan Di, acomodándose en el asiento a los pies de la enorme cama matrimonial de su habitación; silenciosamente Jun Pyo se acercó y se acomodó cerca de Jan Di, tomando la pequeña mano de la joven. "Jun Pyo, estuve hablando con tu madre, y luego con mis padres, y he tomado una importante decisión, pero primero debo confesarte algo."

Jun Pyo se acomodó un poco en el asiento, obviamente nervioso, y sin mirar le asintió a Jan Di para que continuara. "Hace unos días, estuve buscando algo en nuestro baño, en casa." Y de uno de sus bolsillos saco un frasquito, haciendo que los ojos de Jun Pyo se abrieran como platos. "Y encontré esto." Jun Pyo le quito el frasco y se levantó del asiento.

"No suponía que encontrarías esto." Le dijo bruscamente, y metió el frasco en uno de los cajones de su ropero. Jan Di lo observo, sus hombros tensos, su espalda quieta mientras se mantenía quieto probablemente sin saber que decir. "Olvidemos el tema, ¿sí?"

"Jun Pyo, aun no termino."

"¡Solo olvídalo!" Le dijo con más fuerza de voz de lo necesario, haciendo que Jan Di cerrar sus ojos mientras el trataba de controlarse. "No las… no las tomo todo el tiempo, es solo para cuando no puedo dormir."

"Lo entiendo."

"Así que puedes olvidarlo."

"No quiero."

"Jan Di, no lo hagas más difícil por favor."

"Solo te quiero ayudar."

"Entonces olvídalo."

"¡No creo que es la mejor manera, solo déjame terminar!"

"¡No quiero escucharlo! ¡Siempre es lo mismo, terminamos discutiendo por estupideces cuando deberíamos estar haciendo otras cosas!"

"Bien entonces, ¡olvidare que estas en depresión por mi culpa!"

"No es tu culpa, ¡ya olvídalo!" Jan Di lo observo en silencio; ¿el acababa de aceptar que estaba en depresión? Jun Pyo la miro, esperando su contestación, hasta que se repitió a si mismo lo que había dicho. "No es depresión," Le dijo suavemente. "Es ansiedad; me dan ataques leves el doctor recomendó estas pastilla solo para dormir, no quise el tratamiento completo le puedes preguntar…"

"Ya pregunte." Le dijo Jan Di, y se acercó a él, tomando su cara con ambas manos y sonriéndole. "Ya pregunte." Él le permitió a esas pequeñas manos inclinarle, para que ella pudiera darle un suave beso. "Ahora escucha, no supone te diga una palabra pero no quiero escuchar a tu madre; así que te dire la decisión tan importante que he tomado." Las grandes manos de Jun Pyo se acomodaron en las caderas de Jan Di, mientras la observaba. "Como heredero de Shin Wa debes viajar mucho, y aunque no quieras, debes cuidar de la compañía. Tu hermana tiene la mejor parte del trato, ella tiene las oficinas de Corea y Asia, así que no viaja tanto como tu; tu, da la mala pata, que tienes las oficinas de América y parte de Europa."

"Ya se todo esto…"

"No interrumpas." Le dijo después de un beso. "Como decía; tú tienes esas oficinas. Así que, tanto yo como tu madre, hemos decidido que lo mejor que podría sucederte a estas alturas es tener una esposa que viaje contigo."

Hubo un momento de silencio.

"No te daré el divorcio."

"¿Qué?"

"Me vas a pedir el divorcio, ¿no? Tu no quieres viajar y la única manera en tener una espo…"

"¡Cállate, idiota!" Le dijo, molesta. "¡¿Te estoy diciendo que me voy a mudar contigo y tú piensas que te voy a pedir el divorcio?!"

"¿Te mudas conmigo? ¿A Nueva York?"

"¡Esa era la idea pero ahora olvídalo! ¡Mejor dame el divorcio!"

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Yi Jeon corrió hacia Ga Eul.

Era lógica, en realidad, que lo hiciera; su corazón no aguantaba el dar lentos pasos hacia ella, mientras su corazón gritaba por abrazarla. La golpeo con un beso, mientras un suave grito de sorpresa la abandonaba, se abrazó a ella como se había prometió a sí mismo una y otra vez en las noches que despertaba solo. El viento se levantó en ese momento y los cabellos largos de Ga Eun se arroparon a su alrededor, dándole la bienvenida a casa. Le dio vueltas en la arena, como ella siempre había sonado, y la escucho reír; las pequeñas manos de ella se arroparon a sus mejillas y Yi Jeon sintió que por fin la vida resumía su caminar. La deposito en la suave arena, y le dio otro beso mientras ella respiraba el aire que el necesitaba y sus frentes se tocaban suavemente, ambos estuvieron en silencio por varios minutos hasta que Yi Jeon abrió los ojos y la escucho tararear una suave canción.

La misma que habían bailado esa noche en que le hizo el amor por primera vez. Comenzaron a moverse silenciosamente, perdidos en la simpleza de cada uno, acariciándose suavemente los brazos o dejando caer suaves besos en la palma de las manos de otro…

De repente ella se detuvo y se separó de él; haciendo que el la mirara sorprendido. "¿Amor… Ga Eul?" Ella le sonrió levemente y respiro hondo.

"Hay algo que debes saber."

"¿Dónde has estado? Te he buscado por todas partes."

"Antes de eso…"

"Te he extrañado tanto…" Le dijo el, suavemente, sus manos deslizándose por sus suaves costados hasta llegar a sus caderas; ella lo observaba con ojos de sorpresa, mientras la vista del bajaba y observaba el redondo vientre. Ga Eul siempre había sido una chica delgada, siempre tenía problemas para ganar peso y durante su niñez fue algo anémica, pero durante su adultez su figura se había mantenido muy bien. Así que cuando las manos de Yi Jeon finalmente la acariciaron y descubrieron el bulto oculto por el vestido, el solo pudo quedarse quieto observando. "Ga Eul." Dijo el suavemente, atónito.

"¿Si?"

"¿Estas embrazada?"

"Sí."

"Es mío." EL dijo, sin duda alguna.

"Sí."

"Ga Eul."

"Yi Jeon."

"Siento que me voy a desmayar." Y lentamente el cayó al suelo, riendo como un tonto. Estaba borracho de la emoción, finalmente había encontrado el amor de su vida y poco a poco su vida volvía a ponerse en orden, solo para encontrarse en esta situación. Ahora no había manera de que alguien, fuera quien fuera, pudiera arrancarla de su lado. Ga Eul se sentó junto a él, preocupada, mientras trataba de mirarle a los ojos, Yi Jeon solo rio y la tomo de las manos, ofreciéndole un suave beso en los labios.

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"¿Jun Pyo?" Dijo Ji Hoo mirando a su amigo, quien estaba recostado en una de las muchas butacas en el balcón de playa; a media mañana Jan Di decidió que había esperado lo suficiente y fue a buscar a su amiga. Los gritos de emoción que ambas dejaron salir despertaron toda la casa y Jun Pyo, quien estaba obviamente tomando la hermosa reunión como un pretexto para alejarse de su trabajo, decidió que tomaría una siesta lejos de los demás. Ji Hoo lo encontró y sigilosamente se le acerco, al decir su nombre el heredero de Shin Wa volteo de lado y se cubrió, obviamente asustada.

"¡No hagas eso! ¡Me matas del susto!"

Ji Hoo solio rio y se acomodó en la butaca junto a Jun Pyo. "Tengo que hablar contigo."

"¿Sobre qué?"

"Mujeres."

"¡Ay Ji Hoo!" Dijo Jun Pyo levantándose. "¡Ve y habla con Woo Bin!"

De una de las muchas puertas Jan Di apareció, seguida de Jae Kyung, quien reía ampliamente mientras los saludaba. "¡Ustedes! ¿Es hora de buscar a Yi Jeon?"

"Ah, ¿ya es hora?"

"Después hablamos Ji Hoo." Y ambos hombres siguieron a las dos mujeres, quienes se apresuraban hacia la habitación donde los reencontrados novios pasaron la noche.

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Había mucha gente en los jardines. Yi Jeon se asomó a la ventana curioso y observo a su amigo Woo Bin dando órdenes a las personas, seguido por un par de mujeres en ropa de negocios, quienes parecían aconsejarse. Habían flores y ornamentos de colores blancos y rosa pálido y mientras más observaba más interesante se volvía el asunto; un pasillo en larga tela blanca,

Alguien toco a la puerta y Yi Jeon volteo.

Jan Di entro a la habitación y miro hacia la cama, donde vio a Ga Eul. "¿Yi Jeon Sumbae?"

"¿Si?"

La puerta se abrió de par en par y Ji Hoo junto con Jun Pyo lanzaron gritos de júbilo, mientras caminaron a Yi Jeon y lo arrastraron fuera del cuarto, hablando sobre algo de cambios y ropa nueva. Mientras tanto las mujeres se movieron a la cama, donde la sorprendida Ga Eun, recién despierta, las observaba.

"¿Jan Di-ah?"

"¡Levántate perezosa!" La doctora se acercó a la cama y abrazo fuertemente a su amiga, una vez se alejó, pero solo un poco, toco el vientre hinchado, haciendo pequeños sonidos para que él bebe la escuchar. "Hola, bebe, es tía Jan Di de nuevo."

"¿Que está sucediendo?"

"¡Levántate, pronto! Tienes que darte un buen baño, la estilista estará aquí pronto."

"¿De qué hablas?"

"¡Es el día de tu boda, niña!" Dijo Jae Kyung mostrándole una hermosa corona, mientras Jan Di sacaba de su bolsillo un velo estrujado. "¡Yah! ¡Jan Di-ah, te dije que cuidaras de ese velo!"