Saludos a todos, Hinata-San Hyuuga se reporta de nuevo a la acion.

Antes he leido bastantes Pokefics que me han gustado mucho, y como escritora de Fanfics que soy quise darme la oportunidad de poder escribir una historia como esta, por lo que aqui se las presento esperando que le den una oportunidad y pasen a leerla.

Sobre esta historia, bueno esta basada en algo de lo cual me he percatado durante la serie o anime, sobre todo con cierto protagonista con un roedor amarillo. Estoy segura de que si ven el titulo sabran mas o menos a donde se dirige esto, y si no es asi... tendran que esperar jajaja.

Bueno, eso es todo, dejo el prologo del Fanfic y espero algun review por parte de ustedes. Saludos

La Travesia Legendaria Definitiva

Prologo

La vida de un entrenador pokémon no termina cuando ha ganado ya varias medallas de gimnasio y se ha proclamado como un campeón. No, la vida de un entrenador continúa hasta que captura hasta al ultimo pokémon del universo y lo hace su guerrero. Compartir con ellos un lazo de amistad e irlo evolucionando hasta formar una cadena de confianza y respeto mutuo, irrompible y ferrea, hasta convertirse en una sola alma, un mismo ser.

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Ash P.O.V.

Nuevamente me quede en el camino, en cada competencia de liga siempre quedo entre los mejores, acaso sera coincidencia o un destino ya fijo, en la Liga Johto fui derrotado por Morrison y el usaba un Blaziken, un pokémon del que no sabia nada a excepcion de la poca informacion que me dio el profesor Oak, lo mismo aqui en Unova con Hydreigon, otro pokémon del que no se nada manejado por Cameron.

Ahora no se que hare de ahora en adelante, podria intentar entrar de nueva cuenta a otra liga en las otras cuatro regiones que he recorrido, pero no estoy seguro. Al solo pensar en esa posibilidad, la idea de un nuevo fracaso viene a mi mente, el saber que posiblemente no pueda superar aquellos retos me ponen triste, mi sueño de ser maestro pokémon se ve cada vez mas y mas lejano e inalcanzable.

Al menos me queda el consuelo de ganar la Liga Naranja y la Batalla de la Frontera, para ser todavia un novato he tenido algunos logros. Creo que ha llegado el momento de regresar a casa y replantear mi futuro sobre que hacer al respecto y que camino seguir, no hay duda de que extrañare a Iris y Cylan, pero ellos tienen responsabilidades aqui en Unova y si soy sincero no tengo animos de verlos y mostrarme ante ellos por mi derrota en la conferencia Hikagi. Tal como lo dicen, las despedidas son dolorosas pero espero algun dia poder volver a reunirme con ellos. Hasta ese entonces, sera cuando nuevamente nos volvamos a ver.

Fin P.O.V.

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Ash Ketchum era un chico que se caracterizaba por ser alguien con iniciativa, muchas energias y con una mentalidad positiva ante los retos que la vida le ponia enfrente, y si alguien viera al actual joven entrenador de Pueblo Paleta, se podria decir que veia el reflejo de el mismo en un espejo.

En esos momentos el estado de animo de Ash era todo lo contrario a lo que le caracterizaba. Se podia sentir como un aura deprimente y de tristeza lo rodeaba por completo, y si alguien no podia sentir esto lo podia ver de manera fisica ya que el joven azabache ocultaba sus ojos bajo la sombra que su gorra proporcionaba, incluido que sus manos estaban escondidas en los bolsillos de su pantalón y su boca mostraba una mueca de pena profunda. En su hombro yacia el roedor amarillo que era su mas grande amigo y con quien inicio su travesia en su region natal Kanto, el pokémon electrico Pikachu quien miraba triste a su entrenador y mejor amigo ya que el podia sentir el estado actual en el que se encontraba.

Ambos ya llevaban un dia caminando desde que ambos se marcharon de la Conferencia Hikagi, ya que en un principio el junto con Iris y Cylan habian decidido ver las finales del campeonato antes de marcharse de ahi y separarse para proseguir con sus destinos ya trazados, pero ante la eventual depresion que el sintio por su derrota se marcho a escondidas de ahi, dejando atras a sus amigos y tomando la decision de volver a su hogar.

Lo primero que tenia que hacer era regresar a Pueblo Arcilla y visitar a la profesora Juniper para anunciarle sobre su regreso a Kanto, ademas de preguntarle sobre ciertas cosas sobre los pokémon que hacia capturado en Unova, seguido de tomar el avion que lo llevaria a su region natal. Ese trayecto le llevaria cuatro dias y en esos momentos que ya estaba obscureciendo se encontraba en Pueblo Terracota por lo que se detuvo.

-Sera mejor pasar la noche aqui y mañana ir con la profesora Juniper. Vamos Pikachu. - Dijo el joven entrenador sin siquiera levantar la mirada, para el desconsuelo del pequeño pokémon a quien no le agraba ver a su amigo asi.

De inmediato el joven entrenador entro al centro pokémon y se dirigio al mostrador donde se encontraba la enfermera Joy, a la cual el de forma amable aunque seca le pidio una habitacion para pasar la noche, a lo que ella asintio al entregarle la llave. Ash dio las gracias de forma adecuada, no sin antes dejar con ella a sus pokémon Snivy, Pignite, Oshawott, Unfezant y Leavanny para que descansaran.

Tan solo al entrar a la habitacion Ash se quito su mochila la cual dejo sobre una mesita de noche y se sento en el borde de la cama junto a su fiel amigo quien estaba sobre la misma mirandolo fijamente esperando que este hiciera algo que delatara su actual estado de animo. Eso sucedio cuando el se quito su gorra y mostro que sus ojos estaban algo apagados y que el brillo obscuro que tenian, denotaban un sentimiento muy triste. Obviamente el todavia no se sentia bien consigo mismo, y aun se atormentaba por su derrota en el campeonato.

Y no era para menos. Sus participaciones en las diferentes ligas habian sido buenas en un principio, pero siempre habia el mismo rasgo que se habia vuelto caracteristico por decirlo asi. El perdiendo antes de llegar a las finales, eso era mas que claro en sus enfrentamientos con Ritchie, Harrison, Tyson, Tobias y ahora Cameron, y a pesar de que el habia dado lo mejor de si en todos esos combates, al parecer el no habia puesto lo mejor de si mismo para salir con la victoria y por esa misma razon se sentia decepcionado.

Por supuesto que esa decepcion no era hacia sus pokémon. Ellos habian dado su mejor esfuerzo y el lo daba por sentado ya que conocia el potencial de todos, lo que el sentia que estaba mal era su papel como entrenador, ya que si bien el habia obtenido logros considerables en sus viajes, estas eran minimas a comparacion con todas las competencias en las que habia participado.

-Quizas, despues de todo no de la talla como entrenador. - Susurro a si mismo el azabache sin que Pikachu lo escuchara mientras miraba por la ventana abierta la luna llena a lo lejos, cosa que lo puso nostalgico y le traia recuerdos de sus viajes por Kanto, Johto, Hoenn y Sinnoh, de todas las aventuras que vivio, pero sobre todo de sus grandes amigos quienes lo acompañaron.

Ahora que lo recordaba, el no sabia mucho de ellos despues de las ultimas veces que se vieron a excepcion de la poca informacion que obtuvo cuando tenia sus momentos libres. Lo que sabia de ellos era que Brock habia regresado a Ciudad Plateada y seguia con sus estudios para convertirse en un criador pokémon, para despues avanzar y ser un reconocido doctor, sin olvidar claro su retomado papel como lider de gimnasio, por parte de Misty ella seguia manejando su gimnasio en Ciudad Celeste al mismo tiempo que entrenaba a sus pokémon de agua ya que segun rumores, ella planeaba desafiar a la Elite Four de Kanto para convertirse en uno de sus miembros, en camino de cumplir su meta de ser una gran entrenadora de pokémon de este tipo. Por parte de sus amigos de Hoenn, Max habia iniciado su viaje por su region despues de que recibiera a su primer compañero de parte del profesor Birch, mientras que con May la cosa era algo confusa, ya que segun lo que entendia Ash, ella se encontraba recorriendo Sinnoh participando en los concursos de coordinadores para reunir los listones requeridos para el Gran Festival, mientras que su amiga Dawn, poco despues de su visita en Unova le dijo a el que partiria a Johto para participar en la Copa Wallace que se organizaria, por lo que era probable que su amiga castaña tambien hubiera partido hacia alla.

No habia duda de que Misty, Brock, May, Max y Dawn poco a poco estaba cumpliendo sus sueños, y eso tambien incluian a sus recientes compañeros Iris y Cylan, por lo que no dudaba que pronto el sabria de las victorias y metas que ellos probablemente hubieran alcanzado, por una parte se sentia feliz de que ellos estuvieran avanzando a comparacion de el que parecia ir en retroceso.

-Tal vez deberia renunciar a mi sueño de ser maestro pokémon y enfocarme a otra cosa. - Dijo para si mismo Ash, ya que su amigo Pikachu habia caido rendido por el sueño y se habia quedado dormido junto a su entrenador, quien lo tomo sin despertarlo y lo acomodo en su regazo mirandolo fijamente. - Solo espero que tu sigas apoyandome, sea cual sea mi decision.

La noche siguio con su curso, y eran aproximadamente las once de la noche cuando el joven Ash Ketchum cayo rendido ante el sueño junto a su fiel amigo Pikachu, dejando de lado todo el pesimismo que cargaba consigo mismo y despejando su mente para poder obtener un descanso reparador. Era por esa razón que ni el joven o el pokémon se percataron de algo curioso.

Por la ventana que daba al exterior, a duras penas se podia notar una figura que se movia de forma cautelosa y que por la silueta que se notaba estaba mirando hacia el interior, siendo exactos a un azabache profundamente dormido, aquella presencia mostro lo que en apariencia era una ligera sonrisa, seguido de entrar a la habitacion y subir a la cama para dormir junto a Ash y Pikachu, aunque en apariencia no se podia ver nada de aquella presencia que indicaba se trataba de un pokémon, cuya identidad no era conocida pero que al parecer conocia bastante al joven entrenador como para hacer una cosa asi.