Pareja:Simón & Clary.
Él parpadeó sorprendido. Todo era nuevo... todo incluyéndola a ella. Parecía un detective en busca de pistas, mientras con su nueva visión "perfecta" la examinaba de pies a cabeza. Incluso la veía más hermosa que antes, si es que eso era posible. Pero, ahora también veía con claridad las nuevas marcas en sus muñecas, las marcas de las runas de proteción escritas en su piel, como delgadas líneas talladas con nieve, poco a poco derritiéndose y fundiéndose con la piel de la joven.
Su nuevo olfato amplificado captó un olor, atrayente, hipnotizante. Aspiró profundo buscando el origen del olor con los ojos cerrados, buscando a ciegas, dejándose guiar por sus instintos de cazador... pero estaba como drogado, extasiado, y se encontró a escasos centímetros de la piel del cuello de Clary, que permanecía inmóvil.
—¿Si-Simón? —titubeó nerviosa por la cercanía del joven—. ¿Estás bien?
—Eres tú...—Aspiró su aroma, acariciando la piel de su cuello con la punta de su nariz—, hueles muy bien, Clary.
Ella se estremeció, pero no dijo nada. ¿Qué podía decirle? "Oye, no soy un postre", porque muy en el fondo, sabía que sí lo era. Olía la sangre palpitante en ella.
