¿Que estás haciendo aquí sola a medianoche?—digo sin ninguna emoción en mi voz—.

Cualquier persona que se vaya debe pasar por aquí —me contesta con voz apagada—.

Deberías volver a la cama —le digo mientras pasó al lado de ella y sigo derecho ignorándola completamente—.

Siempre te hacía ponerte furioso… —dice entre sollozos—, ¿todavía lo recuerdas?

Yo simplemente no contesto.

Cuando nos graduamos e hicimos los equipos… ese día… —hace una pequeña pausa—, Ese día fue la primera vez que estuvimos a solas y me regañaste.

En mi mente pasaron las imágenes de ese día, claro que lo recordaba, eso nunca se me iba a olvidar. Pero yo simplemente dije:

No lo recuerdo.

Hehe… me lo suponía, fue hace mucho tiempo. Desde ese día tu y yo… y Naruto y Kakashi-sensei, Los cuatro hemos completado muchas misiones, era cansado y difícil pero más que eso… me hacía muy feliz —se detiene por unos segundo y continua—, se lo que le ha pasado a tu familia pero algo como la venganza no le trae la felicidad a nadie. No te traerá la felicidad pero yo…

No la dejo continuar.

Como pensaba… yo no soy como ustedes. Tenemos diferentes caminos que recorrer. Cuando los cuatro estábamos haciendo misiones juntos… pensé que podría cambiar mi destino. Pero después de todo… mi corazón me dice… que soy un vengador, así debo vivir. Nunca seré como tú o como Naruto.

Sasuke, ¿quieres estar solo otra vez? Tú fuiste el que me hablo sobre el dolor y la soledad. Ahora mismo estoy sintiendo ese dolor. Tengo amigos y familia… pero sin ti mi vida…Yo… —sus sollozos llegan otra vez a mis oídos—.

Estos son los pasos que debemos dar en nuestros caminos diferentes.

A mi… ¡A mí me gustas mucho! —Grita con fuerza—. ¡No puedo soportarlo! Si tú y yo estuviéramos juntos… seguro que no te arrepentirías. Viviríamos felices cada día, finalmente encontraríamos la felicidad. ¡Haría cualquier cosa por ti! Así que… ¡por favor quédate! Te lo ruego. Mataría por ti. Cualquier cosa que me pidas la haría. Por favor… quédate conmigo, y si no puedes… llévame contigo a donde vallas —sus sollozos siguen escuchándose…no puedo evitar sentirme un poco feliz al haber escuchado todo lo que me ha dicho… ¿tanto me quiere, para hacer y decir todo eso?—.

Me volteo y la miro.

De verdad que eres fastidiosa —digo con una pequeña sonrisa que no puedo reprimir—.

Sus ojos se abren de par en par, mostrando un gesto de sorpresa a lo que le acabo de decir. Empiezo a retomar el camino que minutos atrás había sido interrumpido por la peli rosa, pero me vuelve a detener.

¡NO TE VAYAS! Si das un paso más empezaré a gritas.

En un movimiento rápido me coloco tras de ella, acción que la deja en estado de shock.

Sakura… Gracias.

Sin más le doy un golpe en la nuca para que segundos después caiga desmayada entre mis brazos y lo último que dice es mi nombre en un susurro. La alzo, camino hacia una pequeña banca que se encuentra a un lado y la dejo en esta.

Aparto un mechón de su cabello que tapa su cara, me acerco con lentitud a sus labios y le doy un tierno beso. Sin más…me marcho.

Abro mis ojos… solo había sido un sueño…

Me incorporo en la cama y miro a todas partes. Las paredes blancas me rodean, al igual que las cortinas de esta.

—¿Dónde estoy? —me pregunto a mí mismo—.

—Estas en uno de los hospitales improvisados.

Giro mi cabeza en dirección de dónde provenía la voz.

—Tsunade… —digo con sorpresa, me trato de mover pero un dolor punzante me jala en todo el brazo derecho hasta mi columna y costillas—.

—No te muevas, tienes tres costillas fracturadas y el brazo derecho lo tienes dislocado.

Aprieto mis dientes, el dolor es muy fuerte.

—Tsunade-sama… —dice una voz que entra apresurada, al momento se queda callada, yo volteo a ver de quien se trata. Mis ojos se abren con sorpresa, no puedo creerlo—, Sasuke…kun… —dice con un hilo de voz—, ya has despertado.

Aparto mi mirada de la de ella y miro por la ventana.

—En 2 semanas te daremos de alta. Y te podrás marchar.

—¿Qué ha dicho Tsunade-sama?

—Sasuke no se puede quedar aquí.

—Pero él ayudo… —la rubia la corta—.

—Lo se Sakura, pero no se puede quedar. El a echo mucho daño… los aldeanos no estarían contentos con eso, compréndelo.

Miro a Sakura de re ojo y veo que baja su mirada y no le contesta.

—Enti…entiendo —dice no muy convencida de eso, o al menos eso es lo que noto—.

—Te dejo con el chequeo general —empieza a caminar para salir de la habitación—.

—Espere…¿Qué dijo?...

—Encárgate del chequeo general del Uchiha —sin más cierra la puerta y se marcha—.

La veo, ella se encuentra dándome la espalda, lentamente se voltea pero no me ve a los ojos.

—¿Puedes sentarte?

Yo solo asiento.

—Pues hazlo —dice cortante—.

Hago lo que me dice. Me encuentro sentado en la cama con los pies en la orilla, mis pies cuelgan…me sorprende lo altas que son las camas.

—Respira —dice mientras pone el estetoscopio bajo mi camisa, en la espalda—.

Sigue con su tono cortante. Respiro.

—Otra vez.

Lo vuelvo a hacer.

—Ok —ahora lo coloca en mi pecho, el artefacto esta frio, eso hace que me pase un escalofrió en todo el cuerpo—, respira.

Lo hago por tercera vez. Así transcurre los minutos mientras respira mi cuerpo, pasando su chacra verde agua por mis costillas y brazo derecho.

—¿Ahora eres ninja medico? —trato de hacer tema de conversación—.

—Sí.

''Ok…¿y yo soy el monosílabo?''

Veo que es inútil tratar de hablar con ella en este momento, simplemente me callo y dejo que siga revisándome. Pasan uno minutos más y se retira de la habitación. Suspiro.

''Que frustrante…ella nunca ha sido tan seria conmigo''

A mi… ¡A mí me gustas mucho! —Grita con fuerza—.

''Sácate eso de la cabeza…eso fue hace mucho tiempo…tal vez…ella ni se acuerde de la opción que nos dio''

Por favor… quédate conmigo, y si no puedes… llévame contigo a donde vallas.

Cierro los ojos y me acuesto en la cama. Basta de pensar en eso…

Tok tok…

Escucho que tocan la puerta, luego la abren. Es Sakura. Siempre viene a esta hora.

10:00am.

—¿Cómo te encuentras hoy? —me pregunta sin verme, como es costumbre—.

—Aburrido.

—De salud Sasuke.

—Creo que bien.

—Ok.

—Oye…Sakura.

—¿Qué? —no parta sus ojos de la carpeta que tiene en sus manos, algo escribe, seguro son los chequeos—.

—¿Ahora me odias?

Me vuelve a ver.

''¡Por fin!''

—¿A qué viene la pregunta Sasuke? —su entrecejo esta fruncido—.

—Simple curiosidad.

—Ya veo…y no Sasuke, no te odio.

—Entonces, ¿Por qué tan cortante?

—Acaso, ¿no puedo?

Yo simplemente me quedo callado. Ella toma mi brazo derecho y lo revisa.

—Ya mañana cumples tus 2 semanas. Mañana te podrás ir.

No digo nada. No quiero irme, sin antes aclarar algo.

—Sakura, ¿puedo preguntarte algo?

—Si.

—Recuerdas…el día que me fui…me propusiste algo.

FlashBack

Sasuke, ¿quieres estar solo otra vez? Tú fuiste el que me hablo sobre el dolor y la soledad. Ahora mismo estoy sintiendo ese dolor. Tengo amigos y familia… pero sin ti mi vida…Yo… —sus sollozos llegan otra vez a mis oídos—.

Estos son los pasos que debemos dar en nuestros caminos diferentes.

A mi… ¡A mí me gustas mucho! —Grita con fuerza—. ¡No puedo soportarlo! Si tú y yo estuviéramos juntos… seguro que no te arrepentirías. Viviríamos felices cada día, finalmente encontraríamos la felicidad. ¡Haría cualquier cosa por ti! Así que… ¡por favor quédate! Te lo ruego. Mataría por ti. Cualquier cosa que me pidas la haría. Por favor… quédate conmigo, y si no puedes… llévame contigo a donde vallas.

Fin del FlashBack

—No lo recuerdo —dice sin más.

Sonrió.

—Me lo suponía…eso fue hace mucho tiempo…

—Si eso es lo que me ibas a preguntar, me retiro.

Solo asiento. Ella sale de la habitación.

Me encuentro en la entrada de la aldea. Está Sakura, Tsunade y algunos ambu.

—Sasuke Uchiha, ya puedes irte —la rubia se da media vuelta y se marcha junto con los ambu, la única que se queda es Sakura que me mira con una expresión triste en su rostro—.

—¿Qué pasa? Creí que estarías feliz de que me fuera. Así como todos los de esta aldea están —me volteo para darle la espalda y empezar a caminar—.

—Si recuerdo… —la escucho susurrar—, recuerdo lo que dije esa noches, recuerdo cada una de las palabras que dije Sasuke-kun…

''Vuelvo a ser Sasuke-kun''

—¿Y?

—No me arrepiento.

De un movimiento rápido quedo tras de ella. Se repite la escena de hace años atrás.

—Tú me dijiste que…si no podía quedarme te llevara conmigo…

—Sasuke…kun… —susurra—.

—Y es lo que voy hacer Sakura.

Ella se voltea a verme a los ojos, en ellos se encuentran lágrimas que peligran en derramarse y deslizarse por sus mejillas. Unos segundos más y las lágrimas se deslizan por sus mejillas, levanto mi brazo y coloco mis manos en cada mejilla de la chica, seco sus lágrimas y ella sonríe.

—¿Tú propuesta sigue en pie?

Como respuesta ella dirige sus manos atrás de su nuca y desatan el nudo de su protector de Konoha.

—Nunca ha dejado de estar en pie Sasuke-kun. Nunca eh dejado de amarte.

FIN