Si, si ya se lo que dirán pero no sean exagerados tampoco me tarde tanto, solo fueron unos días y para que no digan aquí esta la continuación disfrútenla

.

.

.

Olvido

.

.

.

La luz de la luna bañaba casi con insuficiencia el gran jardín, alumbrando muy escasamente el lugar, era una noche obscura. Sus ojos perdidos en algún punto del espacio y tiempo, los dedos de sus manos estaban helados y completamente engarrotados, su inestabilidad emocional se hallaba extraviada al igual que su alma y sus cinco sentidos estaban en automático

-Señorita, déjeme ayudarle-tembló en su sitio sintiendo unos brazos rodeándola que le serian de apoyo para poder levantarse. Logro reconocer la voz y el rostro del joven viéndolo a través de los largos mechones de cabello mojado que obstruían su vista. El chico llevaba por nombre Joe, delgada complexión, cabello marrón y ojos de un extraño y poco inusual color que no descifrabas si eran grises o azules, trabajaba para su familia desde que era un niño ahora solo era un par de años mayor que ella

El chico la tomo con sumo cuidado, ella no se quejo y tampoco puso resistencia, la levanto poco a poco del suelo, había permanecido ahí desde el término de la ajena discusión con el señor Michelle, y desde entonces tampoco había parado de llover en un solo segundo. La condujo hasta la entrada de la casa pasando frente las miradas de los demás empleados que permanecieron en la entrada

Inmediatamente en cuanto cruzo la puerta y esta fue cerrada tras ella, una de las mucamas la rodeo con una toalla y es resto de los empleados –a excepción de Joe- se alejo soltando mormullos

-No se preocupe señorita, le preparare el baño en unos segundos –dijo la mujer mientras la secaba-Su recamara esta lista así que puede ocuparla nuevamente

Alice volteo a verla en señal de que había escuchado pero siguió sin decir nada, comenzó a alejarse aun acompañada por el chico que no se había separado de ella y subió las escaleras perdiéndose en el piso de arriba

Al término de una ducha más obligatoria que satisfactoria vistió con un nuevo par de ropa interior blanca y un camisón caliente pero ligero del mismo tono, fue guiada hasta su habitación y una vez que puso un pie adentro, cerro con seguro y se dejo caer sobre su cama

Se ahogo entre sus sabanas y el edredón, colocándose en posición fetal abrazada de sus rodillas. El sonido de tic tac de su reloj colgado en una de sus paredes se mantenía sumergido entre las voces de su cabeza, los ojos marrones fueron cerrándose solo por cansancio, no por otra y antes de darse cuenta había perdido otra batalla más contra el sueño

././././././

Ya había pasado más de media hora podía asegurarlo, llevaba sentado desde las diez veintiséis de la mañana y ya eran las once con cinco y aun no había señales del castaño. La palabra más adecuada para nombrar por lo que estaba pasando en ese momento era ridículo, a cualquier punto de vista profesional que le preguntara le dirían que eso era vergonzoso para alguien como el, pensar que a su edad y siendo uno de los mejores maestros graduado en el arte de la música tenia que pasar por algo así

Fue llamado desde muy temprano para reportarse en la oficina del directo de la escuela donde trabaja o trabajaba, ya no estaba tan seguro pues esa era la razón por la cual habían solicitado su presencia. Después de ser victima de una clase de regaño por parte del director, su jefe tuve que pedirle de la manera más cordial que le fue posible que lo esperara afuera de su oficina mientras hablaba con su representante y también mejor amigo Dan Kuso

Podría decirse que su futuro solo dependía de Dan, aunque a esas alturas, honestamente le daba igual si conservaba su trabajo o no

Escucho el click que anunciaba que la puerta frente a el se estaba abriendo y tras unos segundos la silueta de su compañero se hizo presente frente a sus ojos. Cruzaron mirada por un instante, Dan comenzó a caminar dirigiéndose a la salida, Shun se levanto con la intención de seguirle hasta que ambos salieron de la escuela

-¿Y bien? ¿Me corrió verdad?-se atrevió a preguntar el pelinegro una vez que ambos subieron al auto

-Tienes suerte de que no fuera así, el director estaba furioso, apenas logre convencerlo de que te dejara quedar -informo Dan al mismo tiempo en el que encendía el motor y lo ponía en marcha-Aunque estarás suspendido por un tiempo

-¿Suspendido?...En ese caso hubieras dejado que me despidiera-bramo el moreno con aire poco desinteresado ante su estado actual

-Bromeas ¿verdad?-Dan lo miro de reojo-Ese trabajo es lo único que te queda ahora, no puedes simplemente dejarlo así y ya

Un silencio hizo un pequeño intermedio, Shun permaneció callado y serio ante las últimas palabras que escucho, se acomodo en el asiento del copiloto, eso si que lo había hecho pensar. No puedes simplemente dejarlo así y ya pero si ya lo había hecho, había renunciado a Alice y a todo lo que alguna vez había planeado a lado de ella ¿Qué más daba si renunciaba a la música también?

Dan noto que había dejado a su compañero mudo, aprovecho la oportunidad para continuar con la platica

-También dijo que puedes tomarte los días que sean necesarios y regreses hasta que estés listo-murmullo el castaño con dificultad. Eso solo quería decir una cosa, la escuela entera sabia específicamente lo que había ocurrido y aunque claro, la academia no tenia prejuicios con el como se relacionaran alumnos y maestros, estaba por demás decir que la noticia había sido de primera plana

-Obviamente no tendrás paga mientras estés ausente, usaran ese dinero para comprar otro piano-termino manteniendo su vista al frente sin despegar sus manos del volante

El profesor bufo por debajo, en primer lugar le daba igual lo que la gente diga de el y de lo que paso, numero dos con lo que le importaba ese maldito instrumento, no lamentaba para nada que hayan tenido que remplazarlo, si por el fuera lo hubiera tirado el mismo a la basura aunque le hubiera costado un año de su sueldo. De un día para el otro paso de ser un maestro estrella al lunático que le hizo daños materiales a su propio colegio, seria mejor que cortara cualquier lazo que le recordara a ella, ya no era sano para su equilibrio mental, cualquier cosa podría ser mejor que pasar el resto de sus días tratando de olvidarla en un sitio tan significativo para ambos como lo era el salón de clases

-¿Y si decido no regresar?-hablo Shun con la vista en su ventana

Nuevamente el silencio se apoderaba de ambos, una luz roja los había obligado a detenerse al igual que los demás vehículos. Dan lo miro seriamente ¿en realidad Shun pensaba en no volver a dar clases de nuevo?

-Shun, yo se que tal vez crees que no hay manera de arreglar esto pero podríamos…

-Cállate, quieres-interrumpió con tono helado dedicándole una cortante mirada

-Pero Shun, si nosotros…-trato de hablar pero el moreno no se lo permitió

-¡Que te calles!-alzo el tono escuchándose más agresivo

-Pero ¿¡Por qué!?-cuestiono Dan, odiaba cuando su amigo tomaba esa actitud tan a la defensiva y cerrada

-Porque se lo que vas a decirme y la respuesta es no, no quiero volver a hablar con ella-exclamo fuerte y claro-Y no insistas

Conocía a Dan perfectamente y sabia cuales hubieran sido sus palabras si no lo callaba a tiempo, diría algo como por que no hablas con ella y arreglas todo o no culpes a Alice por algo que paso hace años. Así que mejor le hacia un favor a ambos y le ahorraba el discurso por que digiera lo que digiera no lo haría cambiar de opinión, Dan tenia que entender que no era nada sencillo para el tratar con lo que había sucedido

-Entonces ¿prefieres abandonarlo todo que tratar de salvar lo mejor que te a pasado en la vida?-señalo Dan tomando un tono serio del que pocas veces hacia uso

-¿Lo mejor?, Dices-rio sarcástico-No tienes idea por lo que estoy pasando, ¡tu no eres quien pensó que por fin llenaría su vacio de hace años y al día siguiente te lo arrebatan de las manos!

La luz verde que indicaba ya era el momento para que pudieran avanzar se había hecho presente desde hace ya unos segundos acompañada de quejas por los otros conductores que esperaban tras ellos y gritaban mares de reclamos que simplemente ignoraron haciendo que los demás los rodearan para seguir con sus respectivos caminos

Los ojos marones versus los rojizos se mantuvieron mirando por un largo tiempo, ninguno de los dos se había atrevido a pronunciar cualquier otra cosa y los dos jóvenes sabían que era mejor así

-Al diablo-Shun soltó un gruñido al instante no iba a soportar ese escándalo, abrió la puerta del auto dispuesto a marcharse

-¿A dónde vas?-Dan observo como este salía del carro

-Que te importa-fue lo último que escucho justo antes de que el portazo también se hiciera presente

No entendía, de verdad que no lo entendía, si su amigo seguía con esa maldita actitud del diablo se iba a arrepentir y ya se lo aria ver el tiempo

Lo único que atino a hacer Dan fue soltar un suspiro lleno de paciencia inhalando toda la tolerancia posible, era cierto que estaba acostumbrado al duro carácter de su mejor amigo pero en ocasiones como esa estaba comenzando a desear haber evitado cualquier tipo de contacto cuando lo conoció por primera vez. Aunque claro a su corta edad de dos años eso nunca se le hubiera cruzado por su ingenua mente ¿Quién sabe que era lo que habían pensado sus madres al momento en que los juntaron? Un misterio que jamás iba a resolver

Exhalo poniéndose en marcha nuevamente ya había obstruido el paso lo bastante

././././././

Siete días, eran exactamente siete días contados desde que no lo había vuelto a ver y desde que había regresado a su dulce, dulce hogar en donde había vivido encerrada dentro de su alcoba sin salir de la cama y vistiendo su pijama todos los días durante todo el día. Había escogido esa rutina diaria, lloraba hasta quedarse dormida y despertaba cuando el reloj marcaba más haya de medio día no salía ni a comer, Joe le dejaba su desayuno a los pies de la puerta y ahí permanecía hasta que el sol se ocultaba de nuevo, solo había probado bocado dos o tal vez tres veces, no estaba muy segura pero tenia la impresión de sentirse más delgada aunque claro eso ¿Que importaba?

Evitaba mirase al espejo podía apostar que su rostro no se veía nada bien y no quería corroborarlo parece que al final de todo su destino no era más que fracasar en su sueño, su abuelo tenia razón, toda la razón del mundo nunca debió de haber salido de casa, esa equivocación la había pagado y muy caro pero era culpa suya y de su estúpida ingenuidad si no hubiera sido tan ciega y no hubiera insistido cuando el la rechazo de inmediato pero no tuvo que ser tan terca y necia y la única que perdió en todo eso fue ella

-¡Sino hubiera sido tan tonta!-chillo en voz alta incorporándose sobre su cama. Limpio sus lagrimas de inmediato ahogando lamentos no se permitiría quebrarse ahí mismo no otra vez

-¿Señorita?-escucho del otro lado de su puerta, se quito los cabellos de encima y aclaro su voz lo mejor que puedo

-Ahora no Joe-dijo secamente. Como todos los días el muchacho iba a buscarla y le preguntaba si quería algo para desayunar y su respuesta era siempre la misma "Ahora no"

-Pero señorita tiene visitas-Alice abrió los ojos eso si que jamás se lo hubiera esperado

-¿Visitas?-pregunto más para ella misma que en general

-Si, las señoritas Makimoto y Misaki quieren verla-informo el joven mozo

Sus amigas estaban ahí, no, no, No quería verlas no tenia ánimos de ver a nadie ni mucho menos de hablar con alguien aunque se tratara de ellas, seria mejor que se fueran

-No es un buen momento, Joe, diles que n…

-Alice, princesa, somos nosotras-escucho la intraversión de Julie con un tono delicado-Abre la puerta ¿Si?

-Por favor, Alice-imploro la voz de Runo-Trajimos galletas

Las dos chicas cruzaron miradas algo melancólicas al no obtener ninguna clase de respuesta, querían que Alice las recibiera, ambas habían dejado el trabajo a un lado solo para ir a verla. Joe quien había permanecido ahí soltó un suspiro triste, el aparte de mayordomo también era buen amigo de la chica de cabellos rizados y no le gustaba nada verla así

-Las acompañare hasta la salida-hablo el muchacho, era evidente que Alice no quería salir

Ellas asistieron bajando las miradas un tanto desanimadas, dieron la media vuelta pero antes de que alguno de los tres diera un paso el rechinido de la puerta llego a sus oídos y una pequeña porción de luz se asomaba tímidamente

El trió de jóvenes sonrieron al instante más sin embargo solo Julie y Runo fueron las que entraron a la habitación no sin antes contar con un deseo de buena suerte por parte del chico que les había dado antes de irse. Se conformaba con que al fin la señorita Gehabich se haya animado de hablar con alguien y quienes más que sus dos mejores amigas

-¿Qué están haciendo aquí? –pregunto sin mirarlas directamente

-Que más, vinimos a verte-contesto con obviedad la modelo-Estábamos preocupadas por ti Alice ¿estas bien?

-No-reconoció con voz rota iniciando a llorar sin poder contenerse

Runo y Julie no lo dudaron ni un segundo y rodearon a su amiga en un tierno abrazo en grupo quedándose así por un largo tiempo

././././././

Miro por tercera vez por arriba de su hombro esperando encontrarse completamente a salvo y que Shun no estuviese tras de el o en un perímetro cercano, debía ser muy cuidadoso y silencioso

Los últimos días habían sido los más grises en toda su vida, Shun apenas y le habla y el noventa porciento de sus palabras eran insultos el otro diez solo monosílabos, se mantenía encerrándose en su habitación todo el tiempo justo como ahora, primero había salido a quien sabe donde y desde que llego se había aislado del el, al menos agradecía ser ignorado por el cuando tenia ese carácter de mil diablos pero claro Dan Kuso no era de la clase de personas que dejaban de preocuparse por sus amigos aun cuando estos no se hablaran Así que cuando lo fue a buscar para preguntarle si ya había o comido o en su defecto si quería salir a comer alguna parte lo encontró profundamente dormido

No intento despertarlo mejor así, tendría unos segundos de paz sin discusiones además podía estar más tranquilo y ese podría ser el momento que había estado esperando

Ya lo había estado meditando una semana entera y aunque no contara con la aprobación del pelinegro estaba dispuesto a buscar por el mismo a Alice. Debía hablar con ella y hacerle saber que fue lo que paso en realidad. Dan sabia que esa relación todavía tenía una salvación y la única manera de arreglarlo era hablar con Alice directamente, tal vez no era asunto suyo pero no iba a dejar que Shun se hundiera en el olvido

"Alice, por favor, necesitamos vernos acepta mi invitación esta misma noche"

Envió el mensaje, en verdad tenía todas sus esperanzas para que ella accediera verlo y le diera la oportunidad de hablar y si así era tendría que ir pensando en una muy buena escusa para escabullirse de Shun

./././././././

Se destapo un poco, comenzaba a sentir calor aunque era de esperarse después de todo no abandono por más de dos minutos su cama y tampoco abría ventanas ni si quiera tocaba o dejaba que alguien retirara las cortinas hace mucho que no veía la luz del sol

Sus amigas se habían ido hace un par de horas, claro no se hubieran marchado sin antes hacerla comer un poco y haber tenido una muy corta platica

Flashback…

-Alice…dinos por favor que no piensas quedarte aquí para siempre-comenzó Julie sentada en un extremo del colchón mientras comía una de sus mencionada galletas

-Créeme Julie yo también quisiera que fuera mentira-susurro en un tono apenas audible

-Vamos Alice, no vas a amargarte la vida por el ¿o si?—comento Runo pasando una de sus manos por la cabeza de la rizada acariciándola con ternura

No hubo respuesta más que un largo silencio que hizo sentencia en el lugar, las dos chicas volvieron a cruzar miradas cómplices, era momento de hablar enserio pero ninguna se atrevía a tocar directamente el tema. Lo único que habían escuchado era la clase de tipo que resulto ser el maestro ese por parte del señor Michelle

-Es difícil creer que tu…-Julie callo siendo interrumpida a mitad de oración

-No, no lo menciones, por favor, no quiero escuchar su nombre-suplico hundiéndose más entre sus sabanas

-Lo entendemos, pero ¿que va a pasar con tu sueño de ser pianista?-siguió Runo esperando no empeorar la situación

-Parece que no es mi futuro ser panista-contesto seca-Nunca lo fue, creo que tendré que iniciar a trabajar con mi abuelo

-Pero Alice, tu misma nos has dicho que odias la medicina-le recordó Runo con seriedad-No ganaras nada si te fuerzas a ser doctora

-Por favor Runo, lo entregue todo en la música ¿Y que fue lo que gane, eh?-hablo cambiando su tono de voz a uno más fuerte, sus amigas la miraron con atención-¡Mírame!, encerrada en mi habitación, apenas meda hambre, me quedo aquí, sola, llorando todo el tiempo, solo pensando en lo mucho que lo extraño y lo mucho que me gustaría volver a verlo

Su volumen había amentado tras cada palabra que decía, hasta su respiración se vio alterada un poco

-Por que aun a pesar de todo lo que me dijo, aun lo quiero y me duele saber que este sentimiento solo es de mí parte-definitivamente no lo quiso pero comenzó a llorar de nuevo

-Alice, si…-intento Julie de animar un poco la situación pero Alice hablo más rápido haciéndola que guardara silencio

-No digas nada váyanse, por favor, quiero estar sola-dijo antes de volver a transformarse en un capullo dentro de sus cobijas tapándose por completo

La modelo estaba dispuesta a protestar pero Runo le indico con la mirada que ya era suficiente al menos lograron que su amiga se desahogara un poco era un avance. Dejaron el paquete de galletas sobre la mesita de madera a un lado de la cama saliendo de la habitación

End flashback

Se sentía tan confusa después de haber tenido aquella conversación con sus amigas que ahora ya no sabia lo que quería en realidad ¿De verdad entraría a trabajar en el hospital? Sabia que si lo quería tendría el puesto inmediatamente solo bastaba con una de sus palabras pero no, si lo aceptaba no seria ella misma y no quería cometer una equivocación más no se lo iba a perdonar

Ya tenia demasiado con todo aquello ahora solo quería rescatar algo de lo perdido y eso era la relación con su abuelo. Desde lo que había dicho en su momento cuando estaba completamente dolida no habían sido necesarias más de un par de horas para darse cuenta de su error y que la culpabilidad la invadiera, nunca debió haberle dicho eso a su abuelo al final de todo, el solo la había ayudado y aunque no haya sido así no era para nada sano tener esa clase de deseos

No se había atrevido a verlo desde aquel día y claro el tampoco la busco durante toda la semana tenia el presentimiento de que hasta la evitaba y no era para menos. Se había comportado de la manera más malcriada que ningún abuelo se merecía

Piso con sus pies descalzos el frio suelo ya se lo había propuesto, iría a disculparse, hablaría con el sin importar que, estaba consiente de que cavia la posibilidad de que no fuera bien recibida pero correría el riesgo además iba a darle toda la razón y eso ablandaría un poco las cosas

Abrió lentamente la puerta de su cuarto asomándose para darse cuenta del que el pasillo estaba desierto, suspiro aliviada lo ultimo que quería era lidiar con preguntas de los empleados

Agradeció de sobre manera que haya llegado sin problemas hasta el despacho donde casi siempre a esa hora podría encontrarlo dejo de perder tiempo y toco firme pero temblorosamente la puerta

-Adelante-trago saliva al escuchar la dura voz de su abuelo, entro a paso lento sintiendo como instantáneamente la cruda mirada del anciano la perforaba por completo provocando que una intensa tensión la ahogara

Mantuvo la mirada por unos segundos pero los ojos de el la obligaron a bajarla con culpa, jamás fue capas de aguantarle esa filosa mirada que tenia con ella cada vez que estaba molesto y esta superaba por mucho todas la anteriores

-Déjame a solas con mi nieta-ordeno de inmediato a su nunca faltante trabajador. Gus quien hasta hace unos segundos hablaba con su jefe de las últimas novedades del trabajo, el joven de cabello azul se levanto de su asiento enseguida y mejor para el no quería estar en medio cuando el señor comenzara a lazar fuego por la boca. Esa semana el doctor había estado más exigente y estricto que de costumbre, aceptaba que esa niña tenía agallas para enfrentarle más aun de lo que le había dicho y que todo el mundo sabia, se necesitaba ser muy sínico o muy valiente para presentarse ante el

Una vez que supieron habían quedado solos estaban de acuerdo que ya no existía vuelta atrás. Ya estaban ahí y debían hablar

-Tienes muy poca vergüenza para haber venido hasta acá Alice-siseo el señor incorporándose en su silla-Después de lo que dijiste debía de haber llamado a un internado para encerrarte

-¿Y por que no lo hiciste?-contraataco ella sin dejarse intimidar por el frio tono

-Ese no hubiera sido un castigo suficiente, además sabia que recapacitarías algún día aunque debo decirte que tardaste más de lo pensé-continuo haciendo notar su enfado con cada palabra-¿A que viniste?

-Quiero disculparme por lo que dije hace unos días, se que no fue correcto y de verdad espero que me perdones-termino inclinando la cabeza completamente arrepentida

-Admito que nunca creí que fueras tan malagradecida y no será nada fácil que nuestra relación vuelva a ser la antes –mascullo firmemente-Pero admiro tu valentía y acepto tus disculpas

Alice volvió a levantar su rostro sorprendida por las palabras de su abuelo ¿la perdonaba tan fácil?

-Pero…-debió suponer que habría un pero-Quiero que de ahora en adelante no vuelvas a desobedecerme, algunas cosas cambiaran desde hoy así que espero y no tengas ningún problema

-Claro que no, dime que es y lo hare-dijo siendo completamente consiente de lo que esas palabras significaban

-Parece que… si quieres compensármelo- se burlo el observando la determinación que se reflejaba en su nieta-No quiero que vuelvas a salir de esta casa sin mi autorización

-De acuerdo ¿Qué más?-asintió con total atención

-Olvídate de la música, si vuelves con esa maldita idea de querer estudiar piano prometo que comprare el primer boleto a Moscú y regresaremos haya-amenazo

Alice trago saliva, odiaba ese país, su niñez no fue de lo mejor sin contar que aunque sus padres murieron en Japón, sus cuerpos fueron sepultados haya y jamás pudo comenzar su sueño con libertad, Japón le había ofrecido muchas oportunidades más que con las que conto en Moscú y su abuelo lo sabia así que seguramente el no lo pensaría dos veces para que regresaran

Hasta le sorprendía que aun no lo hayan hecho, ya le había dado razones suficientes como para que la encerrara de por vida, se preguntaba que era lo que hacia que su abuelo no abandonara Tokio

-Tu ganas, no volveré a tocar el piano-su abuelo la vio muy impresionado, vaya que la culpa la estaba matando, nunca pudo conseguir que su nieta digiera esas palabras, esa era su oportunidad

-Y…-Alice se preparo mentalmente esperando a que acabara-Quiero que trabajes conmigo en el hospital

Su boca se abrió ligeramente, ese punto se le había olvidado por completo a pesar de que lo había escuchado un millón de veces y como todas esas veces diría que no, todo menos eso, sus amigas tenían razón se odiaría así misma, si, tal vez haber estudiado música tampoco resulto como siempre había soñado pero estaba completamente segura que estudiar medicina no era una opción

-Abuelo…yo-el viejo noto la duda en los ojos jóvenes así que decidió intervenir

-Si quieres… no me respondas hoy, te daré unos días para que lo pienses-tomo aire-Por el momento me conformo con que cumplas las primeras dos y se que al final harás lo correcto

Ella se quedo pensativa, esta bien ya no diría más aunque tal vez su abuelo se había visto sospechosamente generoso ante la oferta lo dejaría pasar pero aun di le diera mil años para pensarlo la respuesta seguía siendo un no pero eso le daba tiempo de evitar el tema lo más posible que pueda. Se aclaro la garganta antes de decidirse a hablar

-Si eso es todo me retiro-giro sobre sus talones dispuesta a marcharse

-Espera, solo una cosa más-dijo su abuelo rápidamente obligándola a detenerse. Alice volteo a verlo

-En unos días are una pequeña reunión aquí en la casa, tendremos la visita de uno de los mejores doctores recién graduados desde Inglaterra y será su bienvenida-informo meticulosamente

-¿Y tu quieres que yo…?-probo ella adivinando las siguientes palabras

-Estés a mi lado todo el tiempo como una buena nieta-remarco el las ultimas dos palabras-Si todo sale bien ese doctor firmara contracto con nuestro hospital y estará trabajando para mi

Al escucharlo decir aquello, Alice entendió el porque no habían regresado a Moscú, tal parece que a su abuelo no le convenía dejar el país o al menos no por el momento, podría usar eso a su favor. Soltó un suspiro resignada, si bien no tenía muchas ganas como para asistir a una fiesta lo haría de todos modos

-Bien ahí estaré-el señor sonrió victorioso al fin todo estaba resultado a su modo

Alice salió de la oficina y sin percatarse su sonrisa se hizo más grande en cuanto quedo solo. Tenia a su nieta en la palma de su mano podía hacer con ella lo que quisiera, ya no estaba en su camino esa maldita rata musical, sin el retenía a su nieta donde siempre quiso y con la culpa que ella sentía obtenía aun más poder a su favor

Sin duda haberlos separado fue lo mejor que se le pudo ocurrir, nunca, jamás en esos dieciocho años llego tan lejos y no debía tardar en hacer su siguiente movimiento

-Creo que ah llegado el momento de pasar al siguiente nivel-inhalo profundamente relajando sus músculos, Quizás buscar un buen marido para su nieta no estaría mal. Si las cosas seguían así el futuro de su Alice seria todo un éxito

././././././

No había resultado nada fácil, esa conversación con su abuelo fue algo extraña, debía estar preparada, el doctor podría estarla poniéndola a prueba pero, como estaban las cosas ya no podía temer más de todas formas ya no le quedaba nada que perder

El aire silencioso de su habitación la invadió sofocándole los pulmones, ahora que volvía a entrar a su cuarto podía notar la brisa triste y pobre que ella misma había creado tan miserable como lo era en ese momento. ¿Así debía ser?

Se hizo esa pregunta después de salir del despacho de su abuelo. Le costaría tal vez la mitad de su vida dejar atrás la música y todo lo que involucraba pero ya lo había prometido y lo haría, no solo por su abuelo, si no por ella, más por ella que por nadie

-Solo dame una señal de que estoy haciendo lo correcto-suplico a quien fuera que la estuviera escuchando, se acerco hasta su cama y como si sus palabras formaran parte de alguna clase de conjuro mágico consiguió ver entre las revoltosas sabanas una luz parpadeante

Escarbo haciendo las cobijas a un lado tomando en sus temblorosas manos el aparato celular. Se detuvo indecisa al leer lo que decía la pantalla. Era un mensaje de Dan, soltó el teléfono como si le quemara ¿Que quería? ¿Hablar, para que?

Su corazón comenzó a latirle con fuerza y su garganta se había cerrado, tenia claro que ir iba en contra de lo que acababa de decidir y aun así su estúpido sentido de inconsciencia se lo rogaba como si no hubiera tenido suficiente ya. Ella misma lo había pedido, es decir una señal, una razón, algo que le ayudara para guiarse de una vez por todas

Escucho paso fuera de su puerta y antes de pensarlo corrió a abrirla, encontrando justo a la persona que quería ver

-Joe…-el chico respingo tomado por sorpresa, había ido a cambiar las toallas del baño al fondo pero nunca esperaba que Alice lo solicitara mucho menos a esa hora esta a poco de ser las doce de la noche

-Señorita-asintió atento y un tanto preocupado, la cara de la chica se veía algo seria

-Necesito de su ayuda ¿Podría hacerme un favor?

-Claro señorita, lo que sea- le sonrió sin pesar lo que sus propias palabras provocaron

././././././

Se iba a arrepentir corrección ya lo había hecho y ni así se había detenido, ni eso fue suficiente para hacerla recapacitar solo fue cuestión de unas horas para que rompiera con la primera regla que su abuelo le había dictado

No saldrás de esta casa sin mi consentimiento, vaya que no le resulto nada difícil haberse escabullido por las puertas traseras claro contando con la ayuda de su mayordomo personal. Así es ya había rato la primera regla

Sin embargo, Joe había quedado en total desacuerdo desde el inicio tuvo que presionarlo un poco para que la ayudara a salir sin que nadie se diera cuenta, lo cual fue sencillo ya que la mayoría dormían plácidamente en sus habitaciones. Si había tomado el riesgo de aceptar la invitación de Dan era solo por ponerle un fin definitivamente al asunto. El Cataño dejo especificado la hora y el lugar, comprendía el por que la cito tan tarde y agradecía ya que ella no podría salir sin sospechas durante el día y en la situación en la que estaba ni pensarlo

Estaba columpiándose en cuerda floja, si su abuelo notaba su ausencia –cosa que dudaba mucho- ella terminaría en algún internado en Moscú y Joe seria despedido o en el peor de los casos en la cárcel ya que tomaron la drástica decisión te tomar un préstamo sin permiso de uno de los autos así que haría que valiera la pena el haber aceptado la invitación

El chico fue estacionándose cuidadosamente. Estaban en el parque central del país, un lugar lleno de arboles de cerezo que rodeaban un gran puente de madera el cual cruzaba un pequeño lago

-Podría esperarme aquí, no tardare-indico ella abriendo la puerta del auto para salirse

El joven mayordomo asintió a regaña dientes no contaba con mucho detalles sobre el por que la chica le había pedido que la llevara hasta ya a altas horas de la noche pero ante todo eran amigos y ya era cómplice no le quedaba más remedio que aguardar a que ella regresara

Alice comenzó a alejarse del auto más tranquila, confiaba en Joe, el no iba a abandonarla mucho menos a delatarla y eso le quitaba un gran peso de encima

Subió el puente encorvado y justo a la mitad pudo ver la silueta del chico, recargado en el barandal viendo hacia el horizonte, Alice se detuvo en seco antes de continuar quería asegurarse de que no hubiera rastros del moreno por ningún lado y si todo resulta ser un plan de Dan para verse de nuevo con Shun se iría inmediatamente por nada del mundo quería ver al pelinegro no sabia de que seria capaz si eso pasara

Imito la misma posición que el tenia poniéndose a un lado estaba lista para lo que fuera que viniera

-Alice-nombro el notando la presencia de la chica-Creí que no vendrías

-Igual yo pero aquí estoy-Dan la atrapo en su inútil intento de querer aclarar su voz sin conseguirlo

Sus ojos tristes y cansados, su pálido color de piel y la maraña que era su pelo no podían engañarlo eso era muestra de lo mal que se la había pasado la ultima semana. El suspiro para comenzar

-Alice yo quería…

-Si…-ella interrumpió-Si vas a decirme que no tenías idea de la clase de persona que era el profesor ahórratelo por que no voy a creerte

-Esa no era exactamente mi intención, pero Alice yo lo conozco mejor que nadie y se todo lo que paso entre ustedes-se atrevió a agregar con seriedad

-¿Lo sabes todo?-pregunto ella negando con la cabeza-¿Sabes lo que me dijo? ¿Lo cruel que fue conmigo? ¡¿Lo sabes?!

Ella se derrumbo tan rápido en cuanto inicio a hablar y eso a parte de alterarla también la molestaba y le molestaba aun más saber que Shun era causante de su enojo, que el y solo el podía ponerla de esa manera

-Se que Shun es un idiota eso no lo voy a discutir-hablo tranquilo mirando como ella apretaba los puños de la frustración para contener las lagrimas. Los ojos femeninos se habían cristalizado-Pero hay algo que tú no sabes

Ella levanto la vista aun sin tirar ninguna lágrima y hablo confundida

-¿Algo que yo no se?-repitió sin entender-¿Qué se supone que es lo que no se?

Dan callo unos segundos ¿Por donde empezaba? No tenia idea de cómo Alice tomaría todo aquello pero no podía callarle algo tan importante y que a su parecer explicaba varias cosas

- Shun ya conocía a tu abuelo desde hace tiempo…-soltó el esperando su reacción

-¿Qué dices?...-retrocedió, eso no tenia sentido si así fuera ¿por que su abuelo nunca menciono que se conocían?

-Se conocen desde hace quince años-siguió el muchacho pero ella intervino

-Eso es ridículo-se encogió de hombros-Shun tendría…

-Once años-termino Dan de a completar la oración sabiendo cual era el punto de la chica

Que un niño de once años conociera a un doctor y tras tanto tiempo haya sido un encuentro muy significativo no sonaba con mucha lógica o gran importancia

Alice quedo muda pensando en que decir aun sonaba difícil de creer ¿pero si era verdad? Estaba dispuesta a escucharlo todo

-No entiendo ¿Por qué Shun nunca dijo nada? Y ¿Qué tiene que ver con que se conocieran desde hace años?- Alice exclamo desesperada, fue a buscar respuestas y solo consiguió más dudas

-El no sabía tu apellido, la tarjeta que tú le diste nunca la leyó y tiene mucho que ver por que tu abuelo dejo morir a su madre-contesto ambas preguntas al mismo tiempo

-Que…-Alice se atraganto con su misma lengua, una de dos o su mente ya estaba lo suficientemente dañada como para jugarle con ese tipo de paranoias o Dan había utilizado un muy exagerado termino… ¿Que su abuelo hizo que…?

El joven soltó un largo suspiro, fue consiente de cada una de las palabras que dijo ahora solo le faltaba buscar un gran explicación, que ella sin duda estaba esperando

-Quince años atrás, la madre de Shun tenia que ser operada de ultima hora-trago saliva para continuar-Ya llevaba días en el hospital pero después de unos estudios descubrieron que tenia un tumor cerebral entonces necesitaba cirugía lo antes posible. Cuando la operación inicio el abuelo de Shun y yo estábamos en la sala de espera aguardando a que alguien diera informes pero…

Dan se detuvo, ahí venia la parte más difícil

-¿Qué sucedió?-exiguo ella para que continúese, ¿porque esa pausa tan suspensiva?

-Ese mismo día, una familia tuvo un accidente, al parecer se habían estrellado contra un poste en una carretera y la única que sobrevivió fue una niña…de tres años de edad-el castaño apretó los dientes comenzaba a preocuparse por el rumbo de la conversación-Esa niña fue llevada a urgencias y entonces…

Alice frunció el ceño, fulminándolo con la mirada, no sabia por que pero sentía una extraña sensación en el pecho y que el se detuviera solo la ponía más nerviosa

-Entonces no esteramos que el doctor que se suponía operaria a la madre de Shun, salió de la sala a mitad de cirugía-retomo el tema, haciendo que los ojos de ella se abrieran con sorpresa-El doctor abandono la operación para ir a atender a la niña que acababa de llegar

La boca femenina se abrió ligeramente, Alice permaneció así, mientras se perdía mentalmente, tratando de armar un rompecabezas que la torturaba con un mal final. Dan no paso por alto la reacción de la chica así que siguió hablando

-Al hacerlo, provoco que se retrasara la operación y la madre de Shun murió horas más tarde, después de eso nos enteramos que la niña que había llegado era la nieta del doctor, eso explicaba el porque el había preferido atender a la pequeña que concluir con la cirugía

Dan termino cerrando los ojos, esperando el momento en el que ella digiera algo pero tras unos segundos no escucho nada, abrió poco a poco los parpados y fue entonces que ella se decidió a hablar

-E…Esa niña de la que hablas soy yo ¿Verdad?- no era de todo una pregunta solo quería que se lo afirmara, ella misma ya se había encargado de reconstruir los hechos en su cabeza, recordando que lo de el accidente de sus padres hasta había sido noticia saliendo en varios periódicos y la historia que su abuelo siempre le contaba de cómo le salvo la vida al fin cobraba sentido

-Si…-respondió al instante en el que ella casi cae al suelo

Alice logro sostenerse del mismo Dan, cuando este vio que ella estaba por desfallecer consiguió agarrarla a tiempo. La rizada se incorporo poco a poco, tanto su equilibrio como el aire se le fueron arrebatados al tener la respuesta, de no haber sido por Dan seguramente hubiera terminado en el suelo

-E…Es decir que lo que Shun me hizo fue una clase de venganza-tartamudeo la chica notando un incomodo sentimiento en su pecho. Eso tenia sentid, su abuelo deja morir a la madre del profesor y este venga su muerte enamorando a la nieta para después deshacerse de ella como si nada

-No, no, no, Alice te equivocas-la corrigió el rápidamente-El no lo supo hasta hace unos días-informo Dan con seriedad no permitiría que Alice pensara de ese modo-Pero cuando se entero el…

-Entiendo…-dijo la muchacha de modo en el que las palabras que le faltaron al castaño ya venían de sobra pues estaba por demás decir que cuando Shun se había enterado termino con su relación-Ahora lo entiendo todo

Las lágrimas no tardaron en aparecer, bajando por sus mejillas hasta la barbilla. El chico la observo con lastima como intentaba en vano reprimir el llanto, tragándose sus sollozos, fracasando en el acto. Se acerco a ella haciendo lo que todo hombre aria en esa situación, la abrazo con fuerza dándole el tiempo que ella quisiera para que se calmara

-Pero, Alice, puedes cambiarlo-aconsejo el con su siempre tono amable-Si quieres verlo, yo podría…

-No Dan-corto ella limpiándose las lagrimas-El fue en que quiso que las cosas se quedaran así, Yo solo voy a respetar su decisión

-Eso quiere decir que tu…

-Así es-asintió adivinando sus palabras-No hare nada, si el no quiere verme nunca más, lo entiendo

-Pero…-suplico Dan en otro intento fallido

-Shun, tiene todo el derecho de odiarme así que lo haga, que me odie y que me olvide porque yo lo hare con el-ella termino escondiendo su rostro entre los mechones de su cabello

Dan permanecía callado sin entender, por que la chica había tomado esa decisión tal vez existía algo que solo Alice y Shun podían ver y que los llevaba a quedarse de brazos cruzados

-Bien, de acuerdo, no insistiré más-soltó el muchacho con resignación-Pero prométeme una cosa, renuncia a Shun todo lo que quieras pero la música-hizo una pausa-Alice, te eh escuchando tocar y no puedes dejarlo

Ella se trago sus palabras al escucharlo, no iba a decirle que de haber renunciado Shun también implicaba dejar la música de lado

-Prométeme, que al menos lo pensaras…-ella acertó con la cabeza

-Esta bien-murmuro como respuesta-Te lo prometo

Dan pinto una sonrisa de lado, al menos pudo lograr algo, se separaron poco a poco pero antes de que el digiera una cosa más ella se adelanto

-Podrías darle esto, por favor-ella extendió su mano entregándole una cadena. El castaño reconoció el collar al instante, el mismo había acompañado a su amigo a comprarlo

El lo tomo sin oponerse y ella tomo aire para seguir hablando

-No, voy a mentirte, lo voy a extrañar y mucho-chillo con voz aguda-Y a ti igual

Alice corrió a abrazarlo de nuevo pero esta vez con más fuerza que antes, Dan correspondió de igual manera se quedaron así, ninguno supo exactamente cuanto tiempo paso pero no importaba. Solo se mantuvieron en silencio sentenciando una larga despedida, por que eso no era más que un adiós y un pleno agradecimiento por todo lo que vivieron juntos

Alice había finalizado, ese había sido el punto de partida, desde ahí empezaba de cero, desde ahí iniciaba con una nueva vida y todo lo demás lo dejaría en el olvido…

.

.

.

Hasta aquí el capitulo de hoy les pido una disculpa por la tardanza pero los últimos días estuve muy saturada de trabajo y apenas pude terminarlo. No se preocupen el Finc sigue en pie solo esperen el próximo capitulo que ya muy pronto la historia llegara a su final

Espero sus comentarios y no dejen de enviar sus Reviews y si tienen Internet ahí nos vemos

P.D.. se que había dicho que eliminaría algunas historias pero una chica me pidió que no lo hiciera y hasta hoy estoy pensándolo, por el momento seguirán al aire hasta nuevo aviso

P.D 2 ya inicie con un nuevo proyecto espero lo sigan como este no se exactamente cuando este disponible para que ustedes lo lean pero si les interesa llevara por nombre "Dulce catástrofe" sin más que agaragar me despido que tengan lindo día