Dicen que si amas a alguien quieres que sea feliz aunque no sea contigo. Muchos esperan casarse con el amor de su vida, tener hijos y envejecer juntos pero a veces esos sueños no se pueden hacer realidad, a veces debes de aceptar el amor adecuado.

Entre recuerdos, lagrimas y fotografías ella esta plenamente convencida de que lo ama, siempre va a hacerlo, cuando su matrimonio esta a punto de llegar a su fin Natasha y Steve reflexionan en como llegaron hasta ahí, su amor puede ser una historia de fotografías, recuerdos pasados marcados de amor, pero ellos no quieren recuerdos, quieren un futuro.

Hasta ese momento se había dado cuenta que la quería, de una forma poco sana, la quería para él, para nadie más, porque no quería otros labios ni otra mujer que no fuera ella, ella que se quedaba ahí siempre, incluso en los momentos no planeados, la que estaba dispuesta a llorar a su lado y a amarlo sin ser correspondida.

Clint Barton siempre tiene razón y no se equivocaba cuando le había dicho que estaba enamorada, después de todo era su mejor amigo y ella muy en el fondo de su corazón sabia que Steve y ella estaban destinados a estar juntos.

No era un adiós nunca lo fue, Aarón continuo su vida y dos años después ella volvió a el, no de la manera esperada pero lo hizo, porque lo adioses no existen, porque el de Aarón Hotchener y Emily Prentiss no era un adiós porque nunca lo fue. Este fic participa en el Reto Temático de Mayo: "Emily Prentiss & Aaron Hotchner" del foro Mentes Criminales: Unidad de Análisis de Conducta.

Ellos no necesitaban etiquetas nunca lo habían necesitado hasta ahora, no estoy celoso le había dicho y ella sabia que mentía, entonces en lo que a mí respecta tú me amas y yo te amo, soy tuya y tu eres mio, entonces deja de pensar barbaridades que no voy a dejarte, no puedo y no quiero hacerlo.

Porque nunca fue ella siempre fuiste tu, no eran sus ojos los que vi eran los tuyos...Solo soy un hombre de 44 pidiéndole a una chica que me ame como yo la amo y que vaya conmigo el al baile.